TRES VECES HOSEOK

6.1 Confesiones🌻

Te enseñare a volar... 

Hoseok.

Dos días. 

Pasaron dos días, para que Taehyung me llamara. Jimin me había dicho, que el número que le había dado, había sido el de la casa. Así que, estuve pendiente de día y noche por si me llamaba, cosa que paso dos días después.

Mentiría si dijera, que no me había sentido un poco triste y decepcionado, porque Tae no me había llamado.

Por mi cabeza, pasaron muchas cosas, como que quizás, se había arrepentido de ser mi amigo y se había marchado a Daegu, así que estuve en una pequeña depresión, hasta que la llamada llego. Entonces, Tae dijo que no había podido comunicarse conmigo, debido a su trabajo, ya que él trabajaba en un bufete como abogado.

Después de ese día, Tae me había llamado todas las noches, en las cuales, habíamos hablado de cosas triviales por teléfono hasta tarde, y así paso una semana, hasta que decidí invitarlo a casa. Me ponía triste pensar, que sólo quedaban dos semanas para regresar al internado, y no poder ver a mi nuevo amigo. El caso era, que Tae dijo que no podía venir a casa por el trabajo.

Al siguiente día, después de mi invitación a casa, me sorprendí cuando Taehyung me llamo y me invitó ir a cine, así que acepte sin chistar. Para la tarde, me dirigí al cine, ya que con Taehyung habíamos quedado de encontrarnos allá... Y bueno, por supuesto yo no iba sólo, ya que los chicos decidieron auto invitarse ellos mismos, con la excusa de que papá, no me dejaría ir sin ellos.

Ese día pasamos una tarde muy agradable, al principio sentí un poco de miedo, porque pensé que Tae se iba a enojar conmigo, por llevar a Habid y Jimin, pero al contrario de eso, se mostró agradable y fue muy amable.

Después de la peli que elegimos y que resultó ser un fiasco, definitivamente la peor película que había visto en mi vida, Tae nos llevó a cenar a un restaurante, para quitar mi enojo por la película, y entonces compro mucha comida para nosotros. Después de eso, nos acompañó al auto donde Jungkook nos esperaba, ya que estaba vez, nos permitió andar por la ciudad sin el siguiéndonos, claro con la promesa de que papá no se enterara de nada.

Y cuando creí, que no podía haber mejor día que ese, Taehyung seguía sorprendiéndome.

Después de nuestra ida al cine, Tae nos invitó a un parque acuático, al museo nacional de Gwangju y dos veces al parque, pero lo que más me hacía feliz, es que mis hermanos y mi mejor amigo, ahora se llevaban muy bien con Tae. Claro, Sese aún estaba un poco reacio a nuestra amistad, pero por lo menos, ahora no decía, que Tae lucia como uno de esos hombres, que papá siempre buscaba para penalizar. Habid y Jimin, si se llevaban de maravilla con Tae, al punto de ahora parecer los mejores amigos.

En este tiempo, tampoco podía pasar por apercibido, que los insultos de Habid hacía Jungkook, habían cesado un poco, siendo ahora reemplazados por miradas cómplices. Y la verdad era, que a mi esos dos no me engañaba. Yo podía percibir que, hay estaba pasando algo. Jungkook era un buen hombre y hacia su trabajo bien, por lo que realmente no quería que perdiera su trabajo, por una aventura con mi hermano.