Capítulo 03

255 12 3
                                    

"Tal vez pueda quedarme un poco más" Menciono ma joven mirando el reloj que estaba sobre su antebrazo "No prometo que sea todo el día, pero al menos si lo suficiente como para visitar a los 'Picus'" El asintió, era mejor que nada.

"Bien, entonces démonos prisa para que no se haga más tarde" Ella sonrió, tomando rápidamente su bolso y saliendo del departamento.

Ambos caminaron hasta el estacionamiento en donde se subieron al automóvil en destino hacia la nueva y remodelada casa de los 'Picus'. Hacía ya mucho tiempo atrás que el trío había dejado de vivir en el edificio. Federico estaba apunto de hacerlo, o al menos estaba en proceso de mudanza mientras las cosas llegaban a su nueva estancia.

"Es una linda casa" Menciono mientras ambos caminaban por el gran jardín.

Alex rápidamente se acercó a la puerta y tocó el tiemble que estaba aún lado de la puerta. Al poco tiempo el toque había sido correspondido, mostrando a un niño preadolescente que se había apresurado a ver quien estaba en la puerta.

"¡______!" Rápidamente el corrió a sus brazos, quedando en su pecho debido a la estatura que tenía el mejor. Siempre la había visto como una hermana mayor.

"Hola Dom, ¿Están tus hermanos?" El rápidamente la tomó de la mano apresurándola a pasar por la puerta siendo seguida por el hombre de cabello negro que se encontraba a su lado "Tranquilo Dom, tenemos medio día para estar con ustedes" Ella sonrió sintiendo como el agarre era aligerado y la soltaba para seguir corriendo por toda la casa.

"¡Tony, Luigi!" Exclamo con entusiasmo mientras tomaba a ambos de las manos y los arrastraba detrás de su paso para acercarlos a los mayores.

"Hey, ¿Qué sucede?" Cuestionó el mayor de los tres hermanos aún siendo arrastrado por el menor.

"¡______, Alex!" Rápidamente el mediano se acercó a saludar a los mayores que estaban frente suyo "¡Qué sorpresa es tenerlos por aquí!"

"Pasamos un momento, en un rato me voy al aeropuerto para devolverme a California" Sonrió levemente "¿Cómo han estado?, se que nos vimos ayer en la boda pero no tuve el tiempo de pasar a hablar con ustedes"

"Todo ha estado tranquilo, nuestros padres ahora salieron porque fueron a visitar a nuestra tía, pero nosotros nos quedamos por asuntos importantes" Aclaró Luigi saliendo del agarre de su hermano menor.

"Lo sé, tener una carrera como la suya es tan agotador y ocupado" Los dos mayores asintieron.

"¿Y como han estado ustedes?" Cuestionó Tony "Hacia ya mucho tiempo que no los veíamos, incluso años para ser exactos" Era cierto, la oportunidad de regresar a México jamás se había dado, la boda de su hermano había sido un evento importante que no podía perderse y había sido su única excusa para poder volver, al menos un corto tiempo.

"Lo sé, también he estado muy ocupado con los patrocinadores y la audiencia" Menciono Alex el cual estaba a un lado de la mujer de cabellera castaña.

"Al igual que Alex también he estado ocupada, no puedo permitirme mucho tiempo debido a las grabaciones u otros eventos que surjan inesperadamente" Suspiro rememorando que tenia asuntos pendientes que resolver al volver a California.

"Me alegra que estes cumpliendo tus sueños, ______. Se notaba hace años que anhelabas el tenerlo" Menciono Dom haciendo una aparición con varios dulces entre manos.

"Invítame a uno" Sonrió de manera infantil cuando el menor le tendió uno entre sus manos, un paleta de chile con sandía. Las amaba "¡Gracias Dom, son mis favoritas!" Este contrario sonrió amablemente con un sonrojo leve en sus mejillas.

"No es nada"

"¿Y a mi?" Cuestionó Alex intentando hacer la misma jugada, pero al parecer no obtuvo el mismo resultado.

"¡No!" Los tres presentes se hacharon a reír a carcajadas en el instante que eso ocurrió. Este frunció el ceño con irritación.

"Eso no es justo, ¿Por qué a ella si y a mi no?" Alego en forma de berrinche mientras señalaba a la mujer que estaba a su lado con una paleta entre sus manos.

"Por qué a ella la quiero, a ti no" Saco la lengua del modo infantil mientras se posicionaba al lado de la mujer mientras está solo reía.

"¡Vamos Alex!" Río un poco "Deja en paz a Dom, después vas a ver que te va a dar uno" El solo asintió mientras rodaba sus ojos y se cruzaba de brazos.

El día había transcurrido con gran paz y normalidad; habían pasado una agradable plática entre risas y burlas para el más pequeño y el más mayor de todos los presentes. Dom aún seguía renegado a compartir algo que no fuera con la mujer castaña.

A la punta de la tarde ambos se despidieron de los tres menores, subiendo al auto y emprendiendo su viaje al edificio de nueva cuenta para recoger las cosas de la mujer. Una vez el suceso estaba hecho ambos se dirigieron al aeropuerto, caminando ambos por este con las maletas de la mujer que apenas eran una.

"Muchas gracias por todo, Alex" Se despidió dando un leve abrazo a su contrario mientras se alejaba después de este.

"No es nada, ______" Sonrió con pesar "Fue un placer verte de nuevo después de tanto tiempo"

"Digo lo mismo Alex" Sonrió con nostalgia al recordar la ultima vez que había estado en ese mismo lugar.

Aquella vez que no había ido a despedirse de ella por la furia e impotencia que le causaba pensar que ella lo dejaría. La había dejado ir sin despedirse todo por rencor, ahora estaba frente a ella haciendo lo que debió hacer años atrás.

"¡El vuelo 12 con destino a California, favor de abordar el avión!"

"Adiós, Alex" Se despidió la mujer tomando sus cosas y comenzando a caminar hacia el destino esperado.

"Adiós, preciosa" Susurro mirando como ella salía de su vista y abordaba el mismo avión que la había alejado a los atrás, dejándolo desolado y vacío por dentro, como en ese mismo instante.

•𝑬𝒍 𝒅𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒐 𝒏𝒐𝒔 𝒆𝒔𝒑𝒆𝒓𝒂 - Carlitos y tú «𝒸𝑜𝓇𝑒𝑒𝒸𝒸𝒾𝑜𝓃»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora