Disclaimer: El siguiente cap es un Modern AU, todos los personajes son mayores de edad, Human Luca (21)/ Human Alberto (22-23) y situaciones subidas de tono no apto para menores (no se ni pa que lo pongo si de igual forma lo van a leer :v).
Pero weno.
Si el contenido no es de tu agrado estas en todo tu derecho de no leerlo y seguir con otro capítulo o dejar esta historia.
Gracias por su atención UwUr.
Giulia pedaleaba su bicicleta por los rincones del pueblo realizando sus ultimas entregas, el sol comenzaba a enfriarse cuando dejo el ultimo pedido; estaba apunto de dirigirse hacia su hogar cuando se detuvo a descansar las piernas frete a la tienda de flores de su amigo.
Miro fijamente la pequeña pero pintoresca tienda de los Paguro, de acuerdo a la hora seguramente Luca estaría a pocas horas de cerrar.
Con el trabajo acumulado en la pesquería y la cantidad inmensa de tarea de la universidad no habia tenido oportunidad de verlo en estos últimos días. Mas aun cuando se trataba de recoger los pequeños envíos de ramos personalizados que la familia Marcovaldo-Scorfano acepto hacer de favor.
Sin embargo de eso ultimo se habia encargado su hermano, a regañadientes.
En solo recordar el lio que se armo ante su negativa le hace reír negando con la cabeza.
Por que de nada le sirvió la excusa de que estaba demasiado ocupado en su trabajo de tatuador como para ir por unas míseras flores. Vasto una mirada de su papa y ahí lo tenias todas las tardes recogiendo los arreglos mas lindos y adorables que la costa puede tener, siendo cargados por un mastodonte amargado lleno de tatuajes y perforaciones.
La pelirroja a veces se preguntaba como le hacia Luca para aguantarlo, sabia que el chico era paciente pero todos deben de tener un limite.
Para ser sincera no le sorprendería que un día el castaño se arte y le termine cantando las cuarenta a su hermano.
Eso sin duda es algo que pagaría por ver, el pequeño, escuálido y adorable Luca riñéndole al grandote, fornido y cara de matón de su hermano.
Pero bueno, dispuesta a darle aunque sea un saludo rápido estaciono su bicicleta a un costado para entrar a la tienda. Dentro de esta no visualizo a Luca en ninguna parte, normalmente este solía estar pendiente de las plantas o incluso ocupado en el mostrador.
Y de estar en la parte de atrás siempre se presentaba en cuanto oía el sonido de la campanilla.
— Luca ¿Estas aquí? — Llamo, al no tener respuesta camino hacia la oficina de atrás que servía de mini oficina administrativa.
Estaba a punto de tocar la puerta respetando la privacidad de su amigo pero reafirmando su autoridad de mejor amiga entrando de todos modos, cuando un ruido la paro en seco.
— Auch — Esa era la voz de Luca.
— Si no te estas quieto no puedo sacarla — Y esa la de Alberto.
Giulia se alejo sin poder cree lo que sus oídos escuchaba, pero como buena metiche apoyo su oreja contra la puerta.
— Auch, es que es muy grande.
— Ay por favor como si nunca se te hubiera metido una.
Sus ojos casi se salen de sus cuencas y boqueo la boca como un pez.
— Bueno si varias veces pero nunca una tan grande.
No te conocía esas mañas Luca.
— Ok bueno quédate quieto y tratare de sacarla.
— ¡¡AHH!! ¡Con cuidado Alberto, que duele!.
— ¡¡¡PERO QUE DEMONIOS ALBERTO!!! — grito la pelirroja azotando la puerta, con el rostro tan rojo como su cabello, para ver a dos muchachos completamente vestidos sentados en unos bancos.
— Patea la puerta mas fuerte Giulia, creo que aun no se rompió — Reclamo Alberto con sarcasmo, Giulia pasaba su vista de Luca que se sobaba el dedo a su hermano que sostenía en una de sus manos una pinzas con una astilla.
— Y-yo.. amm... Vine a ver... P-pero ustedes estaban... ¿Qué estaban haciendo?... No mejor dicho ¿Qué haces tu aquí? — Pregunto girando la cabeza de su amigo a su hermano.
— Ayudando al cangrejito, que no vez — Respondió sarcástico mostrando el pedazo de madera que tiro en la papelera.
— Si eso veo, pero no me refiero a eso — Dijo posando sus manos en su caderas— ¿Qué haces aquí tan tarde?. Normalmente estas en casa a esta hora.
— A eso iba pero tuve que quedarme a ayudarlo con algo — Respondió señalando al menor, Giulia dirigió su vista hacia el para que confirmara.
— Eso hizo, vino para devolver un par de jarrones y como aun era temprano se quedo a ayudarme a limpiar antes de que cierre — Respondió.
— ¿Alberto? ¿Ayudándote a limpiar? ¿De forma voluntaria? — Pregunto alzando una ceja sin poder creerle.
— Oh vamos! ¿tan difícil es creer que hago algo de buena fe? — Comento con tono ofendido, la pelirroja le lanzo una mirada de seriedad.
— Hermanito, a penas si puedes mantener el cuarto en una sola pieza, por favor — Respondió poniendo los ojos en blanco, Alberto no era conocido precisamente por ser alguien ordenado.
— Bueno pues es lo que paso y no lo que sea que pase por esa cabecita de zanahoria — Dijo picoteando su frente, Giulia lo aparto de un manotazo.
— ¿Qué otra cosa podría pasar? — Pregunto confundido.
— Aww ¿Eres o te haces? — Se burlo el mayor pellizcando uno de sus cachetes, Luca se lo saco con el rostro ardiendo de incomodidad.
— Nada Luca — Respondió lanzandole una mirada de advertencia al piel tostada, este alzo sus manos en gesto de rendición dejando al menor en paz.
Después de un par de palabras intercambiadas y una promesa de ponerse al día por mensaje de texto, Giulia salió del establecimiento. Alberto le indico que se adelantara ya que se quedaría con Luca para cerrar, después de una ultima despedida subió a su bicicleta y partió a casa.
— ¿Ya se fue? — Pregunto Alberto minutos después de haber escuchado la bicicleta alejarse. El menor se asomaba por la ventana para verificar.
— Si ya se fue... Te dije que escuche a alguien entrar, por poco y nos atrapa en una posición nada favorable— Replico cruzándose de brazos, el mayor lanzo una sonrisa torcida y se acerco arrinconándolo contra el escritorio.
Sus brazos rodearon su esbelta figura en un abrazo seguido de esconder su rostro en el hueco de su cuello, Luca lo miro con el seño fruncido antes de lanzar un respingo al sentir los labios de este besar y morder sobre la piel expuesta de su cuello.
— Ya ya perdón... Ahora en que estábamos — Dijo con voz gesto sugerente, Luca lo miro unos instantes antes de devolverle la mirada y tomándolo de los hombros acercándolo para que se volviera a acomodarse entre sus piernas y volver a iniciar la sesión de besos que iba a pasar a mayores de no se por la interrupción.
Fin.
Ay wey 👀
'Inches huercos calenturientos.
Hasta aquí el cap de hoy.
Espero que lo hayan disfrutado, si es así dejen u voto/comentario y nos vemos en el siguiente cap. ;D
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Imagine your OTP
FanfictionEl titulo lo dice todo pero para los despistados. Serie de situaciones protagonizadas por tu Ship o tu OTP. En este caso el Luca x Alberto(o como se llame el ship, no se). Si no te gusta estas en todo tu derecho de abandonar este libro y buscar otra...