Hoy me he puesto mi disfraz, esa botarga parece siempre estar feliz, me cae bien, tiene una cara confiable, a veces se enamora, casi siempre es amable, es muy sincera con los demás aunque conmigo no lo sean, es un buen ciudadano, una persona intachable, pero lo más importante es que sonríe, siempre sonríe, aunque a veces no pueda respirar debajo de todos esos trapos, me gusta como se ve en el espejo, pero me siento extraño, como que esa sonrisa esconde algo, aún no se bien que tiene.
La mayoría del tiempo me hace sentir bien o más o menos, más bien, me hace sentir vacío, cortado, asustado, con miedo y descomprometido, pero ¡Ey! No he llorado, he logrado suprimir hasta el último soplo del pecho cuando se pone de lado, cuando está derrotado.
A veces me cuesta trabajo usar la botarga y la tengo que colocar con calzador, "a huevo" pero entra, me esfuerzo y la fuerzo hasta que ingresa lo poco de mi cuerpo que me queda, a veces me queda perfecta, es cuando no tengo que forzarla y la sonrisa parece más auténtica...
A veces creo que con el mínimo respiro podría deshacer mi disfraz.
Y romper, descubriendo porque a veces me siento tan extraño, y me gustaría deshacerme de ese disfraz tan antiguo con ideas y recuerdos de los que no me he despojado, pero me da miedo, estar con él y no estarlo...

ESTÁS LEYENDO
De Poesía e historias sobre ti.
PoesíaNo leas lo que he escrito sobre ti. Te conozco más de lo que piensas.