¿Así es como te sientes?

Problemas en el paraíso

Lynn:  ¡¡NOOOO!! ¡¡NO PODÉIS SEPARAAAROS!! Jajajajajaja

Lori: Ya vale pesada.

La mayor de la familia se encontraba sentada en su cama con los brazos cruzados, la cara roja y completamente malhumorada por las burlas ante su reacción. En la cama de Leni, la deportista y el peliblanco la miraban divertidos.

Lincoln: Vamos Jefa, ha sido muy gracioso. Ni Luan logra hacer que todos nos riamos tanto.

Lynn: Vale, ya dejo de burlarme. Cuando quieras empezamos, tenemos mucho que hacer.

La rubia soltó un bufido de resignación mientras se giraba a mirar a sus hermanos, no se encontraba muy animada para aquello pero seguía pensando en que era lo que debían hacer. Sus hermanos esperaban impacientes ante lo que tocaba.

Lori: Bien, damos comienzo a esta reunión de hermanos de emergencia ante la noticia de que papá y mamá se van de vacaciones a solas durante las próximas dos semanas.

Lisa: Empeshare leyendo el acta de la reunión anterior...

Lola: Oh, no. ¡Ni en broma perderemos el tiempo así!

La princesa rosa se apresuró en tomar la hoja de papel de las manos de lisa y hacerla pedazos.

Lucy: ...Lo que debemos hacer es acordar como nuestras almas compartirán esta experiencia... Aun en contra de mi opinión personal, la soledad no es buena para todo el mundo...

Luan: Lo que nuestra oscura hermanita quiere decir es que no tenemos porque SEPARARNOS, ¿entienden? Jejeje

A varias de las asistentes se les escapó un poco de aire al intentar aguantar la risa al mirar a la mayor de la familia la cual volvía a ponerse algo roja. La reunión duró a penas una hora indicando quienes serian los responsables de la casa y como repartirían los días para cuidar a las pequeñas, quienes se encargarían de las compras y quien conduciría vanzilla para llevar a cada cual a sus actividades.

Saliendo del cuarto, Lincoln cargaba con la pequeña Lily para llevarla a su cuarto acompañado de Lisa, la cual aprovechó para solicitarle que le leyese unos capítulos de La clave secreta del universo, por muy científica que fuese su hermanita, en el fondo seguía siendo una niña a la que le gustaba que le leyesen cuentos antes de dormir. 

Por su parte, Lynn ya se había cambiado y se encontraba tumbada en su cama hablando con Lucy.

Lynn: Y dime, ¿has escrito alguna historia nueva de relaciones prohibidas con Lincoln?

Lucy (molesta): ... T-Te he dicho mil veces que aunque tengan el pelo cano los vampiros de mis obras NO son Lincoln...

Lynn: Vamos, no me voy a enfadar por que fantasees con él. Siempre dices que muchos vampiros tienen el pelo blanco como excusa, pero te pusiste bien roja cuando tú misma te delataste, cuando describías esa escena en que "el ser de plateado cabello como la luna, ensartaba la feminidad de la joven de pelo oscuro haciendo que de su intimidad brotase la sangre que la alejaba de la santidad y mientras él invadía con placer su cuerpo, ella no podía dejar de susurrar 'Más hermanito, más' a su oreja mientras sus colm..."

Un libro impactó en la cara de Lynn haciendo que se callase en el acto. La chica de pelo negro se estiró en su cama y se volteó intentando controlarse. Últimamente parecía que Lynn sabia hacer que sus emociones la traicionases con demasiada facilidad.

Lucy: ...Hacia tiempo que no te veíamos tan animada... Hasta hace unas semanas pensaba que terminarías pidiéndome ropa negra para vestirte y que compartiésemos poemas melancólicos... Pero mis ilusiones se desvanecieron con lo del intercambio...