11. Un paso más cerca.

55 22 19
                                    


Esa misma noche no logre dormir mucho ya que las imágenes de la pelea se repetían una y otra vez, imágenes de mi sentada sobre Liam, el acariciando mi tatuaje, sentía un cosquilleo de solo recordar que estuve a punto de besarlo porque lo iba a hacer ¿no?
Claro que no, fue solo el momento.

La actitud de Liam era algo que también me desconcertaba, pero el había dicho que era algo que haría por cualquiera así que decidí no pensar más en eso. Logre apagar mi mente a eso de las 2 am; era de sueño profundo pero después de unas cuantas horas termino despertándome cuando siento los almohadazos de alguien sobre mí, me duele cabeza, los brazos, no quiero moverme pero al abrir los ojos lo primero que siento es que me arrojan una camiseta a la cara.

—¿Pero qué? —balbuceo levantándome y quitándomela de encima y veo la camiseta que use ayer cubierta de sangre seca.

—¿Me puedes explicar que carajos es esto?

—Yo eh..—trato de hablar, pero los recuerdos de anoche pasan por mi mente rápidamente y no sé que contar porque todo es peor y no creo que decir que estuve con Liam era lo mejor; además estaba cansada para todo esto solo anhelaba dormir—Nickie...

—¿Mataste a alguien? Puedes estar tranquila—dice, colocando sus manos en mis hombros y sin parar de hablar—. He visto Riverdale y se cómo deshacerme de un cuerpo.

—¡Ya basta! ¡No he matado a nadie estás loca!—digo, apartándome y recojo mi camisa—. Fue solo un incidente

— ¿Un incidente?

Di un leve asentimiento y volví a cubrirme con la sábana para que no me molestará más pero no funcionó

—Entonces no debo preocuparme por las actitudes de mi compañera de habitación, ni porque llegue de madruga con la camisa cubierta de sangre ¿No?

—No Nickie, no me pasó absolutamente nada, puedes estar tranquila—la vi gruñir ante mí respuesta, pero termino dejándome tranquila o al menos eso creí hasta que comenzó a refunfuñar

—Oye con los chicos vamos a la cafetería de la otra vez si te apetece puedes levantar tu culo de ahí e ir con nosotros

—No Nickie la verdad no me apetece salir, estoy muy cansada—murmuro con la cara sobre la almohada—, lo último que me apetece es salir.

Y esto era cierto, no había peleado físicamente con nadie, pero había forcejeado y me habían jalado del cabello por bastante tiempo y tenía unos cuantos moretones en los brazos, lo único que me apetecía era dormir y que morfeo me llevara en sus brazos.

Vi a Nickie sacar un montón de ropa como siempre del closet, pero no paraba de dar vueltas una y otras vez buscando no se que sobre su cómoda, solo deseaba que dejara de hacer tanto ruido para dormir de una maldita vez.

—¿Puedo tomar algún accesorio de tu cosas? Es que lo mío ya está un poco anticuado y vi una horquillas para el cabello en tus lajas del otro día y...

—Toma lo que quieras Nickie—y dicho esto se llevo mi caja al baño donde la escuche exclamar mil y un veces lo que le encantaban mis objetos, me hice un ovillo y me cubrí totalmente con la sábana, tratando de conciliar el sueño pero consiguiendo justo lo contrario, cuando por fin termina se para frente al espejo y me quito la sabana de encima para verla pero en ese momento me concentre en el dije que llevaba en el pecho y una serie de flash backs se colaron a mi mente de inmediato.

<<Es un reloj de arena porque aunque nuestro tiempo ahora se haya acabado tarde o temprano nos volveremos a encontrar, así que cuando estés sola y sientas que tus ganas se apagan, voltea el reloj que tarde o temprano la vida nos volverá a unir>>

5 Años más [EN PROCESO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora