Near y la chica problemas.

La invitada

Irrumpiendo en el gran portón de "Wammy's house" y dirigiendo paso veloz dentro de sus instalaciones, Geovani vio como un peliblanco muy astuto tenia en su regazo a Joe. Estaba furioso por la escena. Su corazón yacía estrujado por el coraje de ver a su mujer con el niño genio. Una combinación extraña: colera y pesar.

Ese pequeño diablo sentía algo por Joe, lo sospechaba desde hace tiempo pero no daba crédito por de quien se trataba. Los sujetos como Nate solo necesitaban de sirvientes y libros, y el no seria la excepción. Con los puños en alto se dirigió a la pareja. Golpearía a Near, o de menos le gritaría un poco, seguía siendo su jefe.

_¡¿Que crees que haces?!— pregunto con exigencia.

_Nada interesante, solo progresar con mi investigación— contesto bastante calmado, a pesar de que la seguía sosteniendo en brazos — ¿algún problema con ello?

_Dime ¿Qué sientes por ella? Me han dicho que alguna vez te salvo la vida.

_Ah, eso. No me digas que estas celoso  Geovani.

El pelinegro miro hacia abajo sin cruzar miradas, en cambio Near río para si mismo. Tal vez después de todo solo confundía las cosas. Near era lo bastante retardado como para sentir una pizca de amor o afecto, asimismo de que acariciaba a la chica como a un perro lanudo.

_No te preocupes por eso. No siento nada por la bestia de tu novia, es demasiado fastidiosa para mi gusto.

¿Fastidiosa?, después de todo nadie se expresaría así por alguien que le gusta. ¿O si?

_Te creo Near. Dámela, la llevare a una de las habitaciones en el orfanato.

Cargándola como una princesa la trasladó dentro, camino por los pasillos hasta llevarla a una de las camas, eran literas pequeñas, justo para niños. Con mucho cuidado la recostó sobre la colchoneta. Dormía plácidamente y unos pequeños ronquidos se le escapaban por la boca. Su cabello contrastaba con el color de las sabanas. "Hermosa" pensó.

_Te amo tanto Joe

Después de un rato viéndola dormir Iría por un vaso de agua, tal vez un aperitivo para invitarle a su querida, pero Joe lo tomo del brazo y con un pequeño susurro menciono "Quedate". Como no hacer caso ante su dulce voz. Se recostó a su lado, de espaldas para ser precisos, abrazándola por la cintura y hundiendo el rostro en la nuca. Sus pies sobresalían, un hombre demasiado alto para un mueble tan pequeño.

Los parpados comenzaron a pesarle, y en un dos por tres, quedo amodorrado.

(...)

_¡Near!¡Near! — grito un niño algo asustado. Venia corriendo desde alguno de los pasillos como loco, casi se le iba el aire al respirar.

_¿Que es lo que te sucede?

_Algo le pasa al señor Geovani, una niña intenta atacarlo. ¡Por favor ayúdelo!

_ ¿Atacarlo?

_Si, una niña. Es mas grande que yo, es como usted.

_¿Donde esta?

_En el hala sur

Caminando nervioso y esperando el peor de los escenarios, observo como una chica bastante familiar estaba montada sobre Geovani pareciendo darle un besó. Traía maquillaje en las manos y explicaba a las pequeñas como hacer un "cambio de look radical". Las nenas estaban fascinadas con la invitada del señor Geovani, aunque tal vez no debió quedarse dormido , pues lo usaron como sujeto de experimentos. Si que tenia el sueño pesado, no dio cuenta de los brochazos en su piel.

_¿Que diablos haces mujer?

Al entrar la pelusa blanca todas las niñas salieron corriendo, si Near se enojaba tendrían que soportar sus sermones. Y no gracias.

_Nada en particular — se levanto revelando lo menos pensable. Geovani estaba tan pintarrajeado y lleno de besos con labial que rozaba lo ridículo. Y no solo eran besos de Joe, si no también de las pequeñas que encontraban atractivo al agente de la SPK — realmente ahuyentaste a mis subordinadas. Que aburrido eres.

Ya no lo soportaba, no podía aguantarlo: Near se carcajeo tan fuerte que todo el mundo en la casa se sorprendió. No era una de esas risas siniestras tan comunes, si no la de un joven adolescente al que hacen cosquillas.

_No te rías, se le ve lindo — y ambos mofaron del agente una vez mas.

_No lo creo, aunque debo admitirlo: se ve diferente. ¿Tienes idea de la fama que te acabas de ganar?

_¿Fama?

_No prestes atención, solo son apodos de niños. Te llamaron: chica bestia.

_Ay no, no puede ser — se golpeo la sien — mejor me voy a casa, esos niños no pararan hasta que dejen de verme. Espero y se les olvide con el tiempo. ¡Sabes una cosa! dile a esos niños que no soy nada parecido en lo mas mínimo, que soy bien agradable y buena persona. Créeme, el publico me adora.

_No deberías hablar así, eres una mentirosa. Asustaste a todos los varones. Ja ja ja

_¿Y porque no ? Fue muy divertido, en todo caso te temen mas a ti. ¿Acaso no viste como salieron corriendo? eres un loco maniático.

_Soy el rey de mi propio mundo y eso es suficiente

_Claro como no. Aunque deberías ser mas sencillo y no tan estirado, tal vez así te haga caso alguna chica. Yo no claro, soy del bello durmiente.

_No necesitó de nadie — cruzo los brazos y desvió su cuerpo.

_Ya, ya. No te enojes cachetón — golpeo su espalada — ¿tienes idea de que es lo hermoso de este mundo? No puedes hacer todo tu solo, así que no digas que no necesitas de nadie — se acerco y le dio un jalón de mejilla — nos vemos cachetón — Joe dio un beso a Geovani en la boca y prosiguió — dile a mi novio que lo veo mañana en el bar "Rose Mary", la verdad no creo que despierte hasta un buen rato.

_Claro.

Salió por la puerta sin que la vieran los huérfanos, le daba mucha pena que le dijeran "chica bestia" de la nada.