LO QUE FUIMOS

MOLESTO

Tessa

Desperté con un dolor de cabeza insoportable y sin recordar nada de lo que había pasado ayer, joder, no sé cómo llegar al piso de Jack, mire a mi lado, estaba vacío, el no estaba, me preocupe, la razón, me puse demasiado ebria, Jack no está a mi lado, siempre se queda por más tarde que despierte, además no debía beber, se que a Jack le molesta y lo peor le prometí que no bebería demasiado, joder que hice.

Me levanté ignorado el dolor de cabeza y un pequeño mareó, mire mi ropa tenía una camisa de Jack, sonreí, me puse mis pantuflas y salí, en el salón se encontraban todos, Jack regañaba a Sue y a Mike.

—Te dije que la cuidarás, no que dejaras que bebiera hasta más no poder— paso una mano por su cabello.

—Jack estás exagerando—. le dijo Sue.

—Claro que no, apuesto que no recuerda lo que pasó ayer—. dijo el.

Tenía que intervenir, así que me metí en su plática.

—Claro que recuerdo lo que sucedió ayer—. todos me miraron, Mike suspiro aliviado.

—Muy bien, de igual manera que bueno que me llamaste, para avisar que llegarían a cenar y llegaron temprano.

Yo sonreí, no recordaba ni una mierda, Pero Jack me la puso fácil.

—Lo se, lo se—. Jack suspiro y negó con la cabeza.

¿Que pedo que pasa?

—Tessa, nunca llamaste, tampoco respondiste, y menos llegaste temprano—. yo mire mal a Jack.

—Tessa—. Susurró.

ME LLAMO TESSA, ESTA MUY MOLESTO, OOH MIERDA, JODER QUE HICE.

—Jack—. me interrumpió.

—Ross—. me miró.

En ese momento mi mundo se vino a bajó, Ross, Ross quiere que le llame Ross, no puedo, negué con la cabeza.

—No, no es—. de nuevo lo hizo.

—Lo lamento Tessa, no quiero escuchar mi nombre salir de esos labios—. su tono era frío, distante.

Escucharle decir aquello, hizo que sintiera mi pecho arder, mi corazón romperse en mil pedazos, pero aún así asentí con la cabeza, las lágrimas se acumularon en mis ojos pero no las deje salir.

Sin más camine a la habitación de Ross, tome la poca ropa que tenía aquí, me cambié, tome todo lo que me pertenecía y salí, para mi suerte en el salon solo estaba Sue y Will, los cuales me miraron y se levantaron, Will corrió hacia a mi.

—¿Que haces Tessa?—. me preguntó.

—El no me quiere ver, le daré su espacio—. le dije sonriendo.

—No, no, no la última vez que le diste espacio a alguien jamás volviste—. mire a Sue, ¿cómo ella sabía eso?.

—No, no te puedes ir pequeña—. Lágrimas brotaron por mi rostro.

—Lo lamento, pero es mi decisión—. sin más salí a toda prisa de el piso de Ross.

Cuando entré al elevador y este estaba por cerrar , pude mirar a Naya, la cual me miró con lágrimas yo sonreí y ella negó.