𝐒 𝐏 𝐘 𝐍 𝐊 𝐄 𝐄 𝐑 | 𝒀𝒆𝒐𝒏𝒃𝒊𝒏

- Capitulo 15

Había llegado la hora de dormir. El cielo era de un azul marino y estaban muy cansados.

En ese momento estaban acomodando las mantas, tenían linternas para ver mejor y los dos estaban muy callados. Por lo general, Soobin odiaba el silencio, pero se encontraba bastante alterado como para darse cuenta; muchos pensamientos le habían estado quebrando la cabeza en los últimos días, no podía pensar en otra cosa más que en eso. Sentía culpa y ansiedad al mismo tiempo. Se puso feliz cuando lo supo, pero luego se dió cuenta que había sido un error.

- Estira eso.. - pidió Yeonjun mientras acomodaba una manta azul. Soobin sólo obedeció sin quejarse. Usualmente siempre hacia todo un drama por tender su sitio para dormir. Esa vez tenía mejores cosas para pensar.

Después de unos pocos minutos, Yeonjun apuntó contra su cara.

- Soobin, Mírame. - pidió, aún con la luz en todas sus facciones. Era gracioso - ¿Qué te pasa, eh? Te dije que no tomaras esa flor, seguro morirás.

- ¡Claro que no! - le exclamó con indignación - Ya me hubiera muerto. No lo sabes todo.

- Ajá, ¿pero qué te pasa? Parece que estás a punto de vomitar - le dijo con un poco más de preocupación - Si lo vas a hacer, salte de mi tienda.

- ¡Es nuestra! ¡NUESTRA! ¿Quién hizo la decoración?

- Eso no es decoración, genio.

- Te voy a romper la que te.. ¡Me esforcé mucho! - chilló.

- ¡Deja de desviarte! - le reclamó. Soobin comenzó a sacudir los pies con intención de desacomodar.

- Eh.. eh, eh, eh, ¡Eres un cerdo!

Soobin seguía moviendo los pies exageradamente.

- Te voy a matar. - tomó una manta, y la puso sobre Soobin, pero no con malas intenciones.

- ¡No es mi culpa que tengas complejo de ama de casa! - le gritó Soobin, aún sacudiendo los pies, intentando hacer que Yeonjun se le quitara de encima.

- ¡Ah! ¡Maldito animal! - terminó por rendirse, y el otro chico tomó venganza cubriéndolo a él también con la manta, quedando encima. Lo podía mirar fijamente con un filtro azul perfectamente.

Él estaba jadeando, Yeonjun tenía los labios separados mientras lo miraba con impresión. Estaba esperando una queja, algo, pero todo se quedó en silencio.

Soobin se sintió vulnerable en ese momento. Muy, muy vulnerable.

Podía escuchar la respiración del contrario demasiado cerca. Estaba viendo el tinte de su cabello de cerca. Todo estaba cerca.

- Oye, ya quítate. Los monstruos pensarán que estamos haciendo cosas raras. - Yeonjun intentó alejarlo.

Al escuchar eso Soobin se quitó con mucha pena.

Cosas raras. Estaba fingiendo que no sabía a lo que se refería; pero obviamente lo sabía.

No pudo mirarlo a los ojos durante mucho tiempo desde esa vez.

- ¿PERO QUÉ DEMONIOS HICISTE? - gritó Soobin, lo más alto y fuerte que pudo. Su corazón ya no estaba latiendo fuerte porque corrió, sino porque ahora estaba tan asustado por lo que estaba viendo.

Jamás imaginó que a estás alturas para Yeonjun el suicidio se había convertido en una opción, era bastante imaginable.

Se quedó quieto por unos segundos en lo que veía el charco de sangre frente a sus narices, enserio era real.

- Soobin..

En cuanto pudo, fue a bajar las escaleras a buscar un botiquín, o algo para que su amigo. Hubiera querido correr y abrazarlo, pero por alguna otra razón le causaba miedo.