Invisibles

Capítulo 9

La semana había pasado rápido, ya era viernes otra vez.

Había sacado un 10 en el examen de Matemática al igual que los demás. Estaba muy fácil la verdad.

Rix estaba arreglando las cosas con Marcela. Aquel día no quedaron en nada, pero al menos dejó ir a Adrian a su Fiesta. Aunque yo todavía tenía ganas de matar a Rixton. Le dijo que Adrián era mi novio.

Casi.

Tu callate.

Estaba junto con Cloe en el parqueo de afuera del colegio, esperando a que llegara mi padre.

-Hola chicas- nos saluda desde dentro del coche.

-Hola papá- le digo.

-Hola Cris- lo saluda Cloe subiendo al coche, yo la sigo.

-¿Que tal esta semana? - nos pregunta.

-Bastante...- dice Cloe.

-Normal- termino por ella.

-Me ha dicho tu madre que van a una fiesta?- se dirige a mi.

-Si, es el cumpleaños de Marcela.

-¿La novia de Rix?

-La misma- dice Cloe entusiasmada.

-Bueno hagamos algo- nos propone- seguro que la fiesta acaba tarde no?

Asentimos.

-Bien, para que Manuel no tenga que buscar a Cloe a tal hora- Manuel es el padre de Cloe- después de la fiesta las voy a buscar y se quedan las dos en casa, que les parece.

-Genial- digo feliz mirando a Cloe.

La verdad teníamos esa idea, pero mi padre se ha adelantado.

-

-Que te pondrás?- le digo a Cloe sentada en su cama.

Estábamos en su casa. Ella debía preguntarle a su madre si podría quedarse en mi casa y además buscar ropa.

-No se, creo que este vestido, que te parece?

Era un vestido rojo, no muy largo pero tampoco corto por debajo de las nalgas. Estaba a una altura perfecta. Al igual que el vestido era muy lindo.

-Me encanta-le digo levantándome de la cama y mirando el vestido mejor.

-Si verdad, además es formal, pero no tanto y sirve para poder bailar bien. Es nuevo, pero siempre me pruebo las cosas para ver en que ocasión me sirven.

INSTINTO DE CHICAS.

-Bien, vamos.

Bajamos las escaleras, nos despedimos y nos metimos al coche.

Ya estábamos en mi casa. En mi habitación junto con mi madre. Ella se encontraba delante del armario escogiendo un vestido por mi.

Yo no tenía que ponerme.

Venga ya, tienes más vestidos sin estrenar que cualquier cosa en el armario.

Te dije que te callaras ya, maldita consciencia.

-Que te parece este- me enseña un vestido del mismo corte del que escogió Cloe, pero este era celeste. Me encantaba.

-Si este será- digo entusiasmada.

-Bueno las dejo solas, estaré en el salón- se despide mi madre.

-Vamos a estar guapísimas- dice Cloe.

Después de un rato hablando sobre qué haríamos en la fiesta nos metemos a bañar, ella va al cuarto de baño de la habitación de huéspedes y yo al mío para que no llegar tarde a la fiesta.