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A la mañana siguiente Jimin se levantó muy temprano, en Corea tenía esa costumbre de correr todas las mañanas y no quería perderla, así  que para cuando dieron las 6 de la mañana ya estaba vestido con un calentador y una chompa de color negro, por debajo llevaba una camisa mangas cortas por si le daba calor, con una botella de agua y su teléfono en el bolsillo salió del apartamento.

Paso por aquel callejón de restaurantes, lo vio vacío gracias a que ningún restaurante abría aún, siguió corriendo varias cuadras más y no paró solo hasta después de media hora, se tiró en el césped y respiraba de forma agitada tratando de calmar sus respiraciones. 

-Bien, estoy muriendo...-dice para sí mismo.

Empieza a ver a su alrededor, vio a unos cuantos chicos pasar hacia un edificio, agudizó su vista y logró leer en la entrada del enorme edificio el nombre de la universidad, pensó entonces tal vez que esta universidad podría ser la que estaba cerca del academia de baile que menciono Bo-ra, pero aún estaba muy cansado para comprobarlo, se tomó la mitad de su botella de agua, se sacó la chompa y la amarró en su cintura, dejando expuestos sus brazos trabajados pues prefería eso a seguir ahogándose en la calor que le brindaba la chompa.

Después de unos minutos decidió seguir su camino pero esta vez a paso lento y mirando a su alrededor para poder ver si encontraba aquella academia que había investigado bastante, sin embargo, no tuvo éxito encontrándola, su cuerpo pedía gritos que descansara, el no haber comido nada en la mañana le estaba pasando factura pues empezó a sentir leves mareos.

Encontró una cafetería unas cuadras más abajo, parecía que recién estaba abriendo pues de lejos vio a un chico de cabello plateado entrar y salir del local mientras acomodaba las mesas y sillas afuera. Caminó a paso lento hasta que llegó, en lado derecho de la cafetería había un callejón que la separaba del otro local, el chico de antes ya no estaba así que solamente entró esperando a que lo atiendan pues al parecer como recién estaban abriendo solo un empleado se encontraba atendiendo el local.

De lo cansado que estaba ni siquiera vio el nombre de la cafetería pero una vez sentado la admiró, el lugar no era tan grande y su fachada era una mezcla del estilo rústico y moderno, el olor a café inundaba el lugar, abriéndole el apetito, en cada mesa estaba pegado el menú de lo que se servía en la cafetería, Jimin lo ojeo sabiendo ya lo que iba a pedir, siguió observando su alrededor, detrás del mostrador había varias máquinas que Jimin asumía que era para preparar café, la puerta detrás del mostrador se abrió dejando ver al chico platinado salir con un cuadernito en la mano y murmurando cosas que no eran audibles, el chico llegó frente a Jimin pero aún no alzaba la mirada.

-Good morning, what do you want to order? -(Buenos días, ¿Qué desea pedir?) el chico alza su vista -¿Jimin? 

-Hola Yoongi- sonríe Jimin con ternura ante la cara de sorpresa -no sabía que trabajabas en una cafetería.

-Y yo no sabía que tu vendrías a París- responde Yoongi con una sonrisa lobuna.

-Bueno, no sabemos muchas cosas de nosotros- Jimin encogió los hombros restándole importancia.

-¿Donde te estas quedando?- pregunta Yoongi aprovechando en hablar ya que no habían clientes.

-En el departamento de Taehyung.

-Estas un poco lejos de allí.

-Bueno, estaba corriendo- eleva su termo para mostrarle que era cierto, ya no estaba tan sudoroso que antes y el aire acondicionado del lugar estaba haciendo que su cuerpo deje de estar caluroso -terminé llegando aquí y tenía que descansar.

-Que bueno que hagas ejercicio- sonríe Yoongi -¿Qué te sirvo? 

-Un café y una porción de mini waffles de frutillas con nutella.

La noche del inicio  (Yoonmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora