•αℓωαуѕ ρꪮડડꫀડivꫀ•

•9•

-9-

Pietro abrió la puerta en la que estaba apoyado y entró, noté que tenía un ojo negro e hinchado.

- ¿Aidan te golpeó de nuevo? Pregunté y me reí por la nariz.

- No no. Fue otra pelea - dijo simplemente - Y solo viste una pelea con Aidan, en otras peleas que tuvimos a la mayoría de él que fue golpeado.

"Oh, sí, me imagino", dije sin poner mucha fe en lo que había dicho Pietro.

-¿Estás dudando? - solo arqueó una ceja y noté que se molestaba

"Yo no," dije, haciendo un movimiento con mis manos.

-Oh bien - dijo y se sentó a mi lado

- ¿Por qué no dejas este pequeño mundo? Esto solo proporciona desgracia. - finalmente, dije, me estaba atascado.

- Esa es mi vida ahora Gio. Es una oportunidad para mí de no ser más un idiota invisible, para que la gente me respete...

- Idiota sigues siendo - dije sencilla

- Ya no puedo hablar contigo sin tener ganas de dispararte - dijo irritado con mi comentario, solo lo miré

- Pietro,eres... ERAS una de las mejores personas que conozco o conocí, no necesitas eso, no necesitas meterte en peleas o matar a alguien para demostrar que eres el mejor.

"Pero los gánsteres no somos del todo malos"- dijo.

- Dame un ejemplo - dije

- Está bien, entonces ... Si vemos, por ejemplo, un hombre agrediendo a una pobre anciana, le volamos la cabeza - dijo con indiferencia

- Oye, ¿te quedas con su bolso, verdad? - Fui sarcástica.

-Claro que no Rach - dijo - Devolvemos la bolsa, solo nos quedamos con lo que hay dentro. - Mierda, no había oído eso. No sabía si Pietro estaba bromeando o en serio. Ah, por supuesto, segunda opción.

- Qué horrible Pietro - dije aterrorizada y él se rió - Ahora caíste completamente en mi concepto.

- Sí, pequeña Gio - Odiaba que me llamaran así - Esta es mi nueva y divertida vida, drogas, fiestas, sex@, robos, de todos modos, ser libre - Si no eso fuera gratis, preferiría estar en prisión perpetua. No estaba comprando todo ese cambio, estaba hablando con alguien a quien nunca había conocido, nunca.

- Por favor, vete y solo vuelve cuando vuelva el verdadero Pietro -Hablé conteniendo el lloro.
El no dijo nada, solo se levantó yendo hacia el portón, en cuanto se fue se volvió y dijo:
- Te amo Giovanna. Siempre te amé, pero ya no te merezco.
Allí, perdí todo el hilo de mis pensamientos, me senté allí un rato más todavía sin creer lo que acababa de escuchar, no solo cuando Pietro dijo que me amaba, sino también en todas las demás mierdas que dijo. Intentaba calmarme, lo juro, pero me estaba resultando imposible.

Allí me quedé una hora más, hasta que esperé a que llegara mi padre, pero como no llegaba y yo estaba muy cansada porque había sido un buen día, decidí entrar. Fui directo a mi habitación y me tiré en la cama, era a ella a quien realmente necesitaba, me perdí en mis pensamientos y terminé durmiendo.

El celular despertó y me desperté super feliz, mentira, me volví a dormir, hasta que el celular despierto de nuevo y me despierto, llegaré completamente tarde. Me levanté corriendo, tropezando con todo hasta que llegué al baño, donde tomé la ducha más rápida de mi vida y me vestí con el primer atuendo que vi frente a mí, la parte de abajo eran mis pantalones de pijama. Lo cambié, por supuesto. Retrasándome aún más. Sin mencionar que estaba la parte de bajar las escaleras y no podría hacerlo corriendo, se lo contrario...