Demonio azul [Dabi x T/N]

13. Nuevo miembro

---> Narra T/N

Llegué y me encontré a un pequeño gato oliendo las botas de Dabi. No entendía nada, supuestamente yo había parada el tiempo, ¿por qué este gato estaba aquí moviéndose y oliendo las botas de Dabi?

Me dispuse a volver a poner el tiempo en marcha y Dabi bajó lentamente la mirada hacia sus botas cuando su vista chocó con la del pequeño felino.

- Nos lo podemos llevar?

Dabi: ¿Qué hace el gato éste aquí?

- No lo sé, yo venía tan tranquila y cuando llegué aquí me encontré al gato oliéndote las botas, parece que mi quirk no le afectaba.

Dabi: Se estaba moviendo mientras estaba el tiempo parado?

- Efectivamente.

Dabi: Que cosa mas rara.

- Ya, no sé porque pasa.

Dabi: Bueno vayámonos a casa.

- Pero el gato se viene.

Dabi: Vámonos.

- Con el gato.

Dabi: Por qué quieres un gato?

- Porque está abandonado, no tiene hogar y ha tenido la confianza de acercarse a nosotros, además es pequeñito, no debe tener más de 9 meses.

Dabi: Pero nos tendremos que hacer cargo de él.

- Y? A mi de pequeña me abandonaron y gente se tuvo que hacer cargo de mi.

Dabi: Estás tratando de darme pena?

- Mmmm yo? Imposible.

Dabi: Va venga mocosa, cógelo y vámonos.

- Siiii! Vamos pequeño!

Lo cogí en brazos y lo subí al carrito que llevaba yo, se acurrucó encima de las toallas y emprendimos nuestro camino hacia casa.

Cuando llegamos Dabi y yo comenzamos a limpiar la casa, estaba llena de polvo y telarañas. Mientras el felino se puso a investigar la casa y de vez en cuando se lanzaba hacia la escoba que llevaba Dabi y trataba de jugar con ella, se veían muy adorables. 

Seguimos limpiando hasta dejar la casa totalmente limpia.

Dabi: Oye el gato éste no tendrá hambre?

- Oh mierda es verdad! Vamos a por cosas para él.

Dabi: Y para nosotros? O nos vamos a morir del hambre?

- También también. Vámonos.

Fuimos hasta una tienda de mascotas donde paré el tiempo y agarré recipientes de comida, una cama y una caja de arena, además vi algunos juguetes de gato y también los agarré.

Se los dejé a Dabi y por suerte también había un supermercado cerca donde agarré comida y algunos productos como jabón, gel, champú, lavavajillas y demás.

Volví con Dabi donde puse de nuevo el tiempo en marcha para volver a casa.

Cuando volvimos me puse a cocinar nuestra comida mientras que Dabi montaba los muebles que había agarrado yo y le daba de comer al gato.

Terminé de cocinar y nos pusimos a comer los dos en el suelo encima de la isla de encimeras ya que yo no había agarrado sillas.

- Wow se ha quedado bonita la casa.

Dabi: La verdad que sí, pero podrías haber cogido unas sillas o sofá.

- Perdóneme señor, pero no me cabían más cosas.

Dabi: Está perdonada señorita.

El gato de un salto se subió a la encimera y se acercó a Dabi para refregarse en su pierna.

- Mira, le encantas.

Dabi: No quiero admitirlo, pero al final me ha caído bien.

- Has visto, nos lo teníamos que traer. Por cierto, no le hemos puesto nombre.

Dabi: Es verdad, ¿cómo le ponemos?

- Pues... el gato es blanco y negro, como tu pelo cuando te crece la raíz.

Dabi: A dónde quieres llegar con eso?

- Como tu te llamas Dabi pues el se puede llamar Babi.

Dabi: Babi?

- Sii.

Dabi: Bueno, vale.

Terminamos de comer y nos fuimos a la cama ya que no teníamos nada que hacer, nos avisó Shigaraki de que tendríamos cinco días de descanso para arreglar y acomodarnos en las casas. Estaba más majo que al principio, parece que los de la Liga nos habíamos conseguido colar en su pequeño y frío corazón.

Estábamos tanto Dabi como yo tumbados mirando al techo fijamente.

- En qué piensas?

Dabi: En mi vida. Y tu?

- En ti.

Dabi: En mi? Por qué?

- Tus cicatrices.

Dabi: Te dan asco?

- No!

Dabi: Entonces?

- Quiero tocarlas.

Dabi: Por qué?

- Nos hemos visto el cuerpo descubierto y las he tocado indirectamente, también con los labios al besarnos. Pero como he dicho siempre te las he tocado indirectamente, no he podido tocarlas cuidadosamente, y quiero hacerlo.

Dabi: Vale, pero con una condición.

- Vale, cuál?

Dabi: Donde tu me toques te tocaré yo a ti.

- Vale.

Los dos nos giramos para mirarnos cara a cara y dirigí mi dedo índice a la primera cicatriz, la que tenía bajo el ojo, pasé mi dedo lentamente y con cuidado.

Cuando terminé de tocar la cicatriz, él hizo exactamente los mismos movimientos que había hecho yo.

Mi siguiente movimiento fue hacia su oreja, deslicé mi dedo índice desde sus piercings hasta el lóbulo de su oreja.

Él repitió mis movimientos.

Después con mi dedo le acaricié del cuello hacia la mandíbula muy lentamente pudiendo sentir el tacto de su cicatriz, cuando llegué a la mandíbula me acerqué a él y deposité un beso en sus labios pudiendo fijarme en el distinto tacto que tenía su labio superior del inferior. Estuve varios segundos pegada a él besándolo mientras que él iba deslizando su dedo desde mi cuello hacia mi mandíbula al igual que había hecho yo con él.

Cuando terminó separamos nuestros labios y pasé a mi siguiente movimiento.

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Holii! Aquí tenéis el capítulo de ésta semana :)

Espero que os haya gustado! El siguiente capítulo será bastante profundo.

Acuérdate de votar por la historia, comentar y darme a seguir para que te lleguen todas las novedades <33