~Continuación de "dejemos de un lado el hockey|Charlie Conway". La pueden encontrar en mi perfil y les recomiendo que lean esa historia y después se vengan a disfrutar esta.~
~Basada esta historia en The Mighty Ducks o Los Campeones 3 del año 1996,c...
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—¿Hola? —Escuche la voz débil de mi madre.
—Hola, mamá. Es Lane.
—Oh, querida —hubo un sollozo
—¿Mamá qué pasa? Sé que estás llorando ¿Por qué? —Silencio incómodo.
—Hija, quiero que sepas que te quiero mucho y que...
—¿Qué está pasando?
—Tu padre...tuvo un accidente
—Ok... —Ya sabía lo que iba a venir pero, ¿Mi padre estuvo para mí siempre?
Quiero decir, vio uno de mis partidos y siempre estaba trabajando. No estaba enfermo. ¿Y ahora le pasa un accidente?
Solo una lágrima pudo completar mi cara ya que no me conmueve que se haya muerto. Si, era mi padre. Pero seamos sinceros, lloraría más con la muerte de mi madre. Y las lágrimas no siempre significan tristeza, en realidad, puedes llorar por muchas emociones.
Pero mi madre no se compara con nadie. Tengo preferencias en ella, y eso no está mal. Muchas personas llorarían o harían cualquier cosa por su figura paterna. ¿Estoy triste? Si. ¿Lo que me imaginaba cuando iba a llegar este momento? No.
Ayudaría a mi madre a pasar eso y, eso sí me importa más. Tengo otro problema, empezó a llover y la conexión con mi madre se perdió, y no pude decirle nada más. Saque mi única lágrima y Adam me abrazó, pero al sentir el perfume y la presencia de otra persona me di cuenta que no era Adam. Sam Smith era otra vez mi ayuda. Ni siquiera Fulton o Charlie.
—¿Sam?...
—¿Si? —Se separó de mí y paro de abrazarme.
—Mi padre acaba de morir y no he llorado lo suficiente y... —Paré de hablar ya que sentí unos labios junto a los míos, bajo esa fría lluvia. Me separé de inmediato y ya estaba a más de un metro de él.
—¿Que te pasa, Smith? —dije duramente.
—No sé, solo fue un impulso.
—Claro, un maldito impulso. Sam...¡Somos amigos desde los 10! Y ahora somos adolescentes y prefiero que tus estúpidas hormonas se calmen. Estoy con Charlie, ¿recuerdas? —Recordé a Charlie, mierda.
—Conway no debe porque enterarse.
—Si, el debe, porque es mi novio. ¿No te das cuenta que este día no puede ser peor para mí? Se muere mi padre, los de mi equipo le hicieron una broma muy pesada a mi novio y a mis amigos, tu me besas y estoy muriéndome de hipotermia.
—No sabía todo eso, Lane. ¿Amigos? —dijo simplemente. ¿Como lo dijo tan facil?
—Debo pensarlo. Porque si no te diste cuenta, es el peor día de mi vida.
Sam solo se fue con las manos en los bolsillos cuando...Oh no.
De nuevo ese estupido ataque. Me costaba respirar y mlver las piernas, pero aun asi tuve que salir de ahi.
Salí de ahí y me puse en la entrada principal del restaurante para que no me cayera más lluvia. Quería entrar y ayudar. Entonces entré y no los encontré en la larga mesa, entré a las cocinas y ahí estaban todos limpiando y estaban cansados. Abrí la puerta para que sientieran mi presencia y voltearon su cabeza. Julie, Connie, Charlie y Fulton fueron los primeros que se acercaron para preguntarme que había pasado.
—Chicos, la verdad no sé porque Cole, Riley y sus amigos hicieron eso, no tenía ni idea...
—No, eso no —Me interrumpió Connie.
—Estas mojada y estás temblando del frío —dijo Fulton.
—Si... Mi padre acaba de morir y... —No sabía cómo explicar lo que acababa de pasar con Sam—. Charlie, se que te puedes enojar pero prometeme que no le harás daño —Él frunció el ceño y se acercó a mi.
—¿A quien no le tengo que hacer daño?
—A...S-Sam... el...
—¿Que hizo él, Lane? Puedes confiar en mí —Se agachó un poco y me miró a los ojos.
Bajé la mirada y susurré. —El me besó —Un silencio apareció y antes que alguien dijera algo aclaré—. Me aleje y le grite que éramos amigos, Charlie...Por favor... No le hagas nada. No pierdas el tiempo en personas como el.
Charlie asintió con la cabeza y solo me abrazó, Julie, Connie y Fulton ya se habían alejado y parecían agradecidos de que Charlie no saliera por atrás mío a buscar a Sam y golpearlo.
—Estoy enojado. Pero entiendo —me dijo poniendo uno de mis mechones pelirrojos atrás de mi oreja y me abrazó más fuerte.
—Gracias —Lo bese en la mejilla y me agarró la mano.
—Pensábamos en hacerle una venganza a Varsity por esto —señaló el desastre en el lava-manos, ya calmandose un poco mas al recordar la venganza.
—Queremos que estes con nosotros para que tampoco salgas involucrada —dijo Fulton.
—¿Y Banksie? —Se me ocurrió preguntar.
Charlie chasqueó la lengua. —No te preocupes por el comedor de pasteles, duerme en otra habitación, no le llegará la broma a él —Charlie acomodó su brazo al rededor de mis hombros.