~Continuación de "dejemos de un lado el hockey|Charlie Conway". La pueden encontrar en mi perfil y les recomiendo que lean esa historia y después se vengan a disfrutar esta.~
~Basada esta historia en The Mighty Ducks o Los Campeones 3 del año 1996,c...
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Había pasado una semana desde el encuentro con Varsity. Tenía un esguince de segundo grado y me dieron muletas, pero no las ocupo mucho, son demasiado incomodas. Igualmente podía caminar.
Mi madre, al enterarse, no se molestó en ir al hospital para llorar en frente de la tumba de mi padre. Espero hasta que llegara a la casa y me mandó a dormir. ¿En qué tipo de madre se había convertido?
Teníamos un juego hoy pero miraba desde el banco. Los chicos habían votado que, aunque siguiera lesionada, aún seguía siendo parte del equipo, y ellos mismos me sentaron ahí.
No había señal de Charlie y Fulton, conociendo a ambos, seguramente fueron a un parque de diversiones o al centro comercial para olvidarse de sus problemas.
El otro día fui a ver a Hans, tenía mucha toz y eso me preocupaba, ya se hacía viejo y era la hora de marcharse, por lo menos se encontrará con mi padre, ¿no?
Volviendo a lo del partido, éramos horribles, sin Conway y Fulton, que eran el ochenta porciento del equilibro del equipo, este se venía abajo.
El único que hacía el verdadero esfuerzo y tenía al menos un poco de ganas (los demás estaban bajoneados) era Goldberg.
—Faltan diez segundos y las cosas lucen mal para Eden Hall. El único que brilla es Goldberg, quien es defensa está noche. Es un equipo de demolición —Decía sin ánimo el comentarista.
—Estamos perdidos —dijo Averman a un lado mío, tirando la cabeza para atrás y suspirar.
—timis pirdidis —me burlé
—Hey, digo la verdad. Dónde está ese carácter de Bash Sister —Me miró fijamente levantando ambas cejas esperando mi respuesta.
—Siempre he sido positiva, Lester. Y... —En ese momento, se prendió una luz en mi cerebro. Como si fuera la luz en un túnel vacío. Ya sabía que tenía que hacer.
—Sonó el timbre. Al final del segundo, Cardenales 4, Warriors 1.
Mis problemas no se iban a solucionar completamente, pero tenía una amistad con esta persona que también tenía amistad con mi mejor amigo, el me entenderá más que nadie.
Tenía en número anotado de Dean Portman gracias a Fulton, la vez que se hicieron amigos me lo paso.
