v e i n t i d ó s

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Guillermo se despertó con el ruido de la bocina de un auto, un dolor de cabeza le impidió levantarse en su totalidad, quedándose en donde estaba, acostado en el sofá. 

¿Cómo había llegado ahí?

El chico levantó la mirada, y lo único que pudo ver fue un rayo de luz que pasaba al lado de la cortina cerrada, unas cuantas cosas tiradas en el piso, y poco más.

De ahí, poco a poco trató de recobrar la compostura, se apoyó del mueble en el que estaba para sentarse ahí mismo y analizar la situación.

Trataba de recordar, pero no podía en su totalidad. Veía imágenes sin claridad, pequeños recuerdos.

Se encontraba con Rub en la noche, entraron a un lugar, y al principio todo fue tranquilo. ¿Qué pasó después? Escuchaba como alguien había estado gritando su nombre, y esa voz aún la tenía en la cabeza.

"Guille, ¡Guille!"

Estaba claro de quien era aquella voz, la conocía desde hace tiempo, ¡Era Samuel quien lo había estado llamando!

Luego de ello, ya un poco más despierto, notó que estaba en su hogar. Como había llegado ahí, no tenía ni la menor idea, gritó un par de veces pero no escuchó a nadie en ese lugar. Estaba completamente solo. Todo aquello parecía un juego de enigma, en el que tenía que descubrir lo que había pasado la noche pasada, ¿Por qué no conseguía recordar? Sintió un escalofrío al formularse la pregunta.

Antes de continuar con lo demás, se levantó, tambaleaba un poco por los efectos del alcohol que aún seguían en su cuerpo, y llegó al lugar donde solían guardar pastillas para las ocasiones como aquella.

Él detestaba tomarlas, pero se armó de valor y junto a un vaso con agua, se la pasó lo más pronto posible.

Solo quedaba esperar a que aquella haga efecto, y por el momento, se sentó en el sofá donde se había apoyado antes.

Una pequeña nota estaba encima de la mesa de centro. ¿Cómo no la había notado antes? Con rapidez, la tomó para leerla.

"Han pasado muchas cosas, pero ahora mismo no hay tiempo para explicarlas, volvemos lo más pronto posible! Cuídate"

¿Qué clase de nota era aquella? Más que darle soluciones, le deseperaba más. El híbrido soltó un quejido, y volvió a dejarla en su lugar.

...

Por otro lado, lo menos esperado estaba sucediendo.

Samuel estaba algo impaciente, había largo rato en el que estaba esperando sin noticia alguna.

¿Por qué Rubén tenía que ser tan descuidado?

Lo que había pasado en una sola madrugada era increíble. Había comenzado como una noche tranquila, en la que él fue con unos amigos a una discoteca para pasar el rato. Él de verdad quería convencerse que no debía de proteger demasiado a Guillermo y Rubén, ya estaban lo suficientemente mayores para poder hacerlo solos, pero cuando dejaba de hacerlo y se relajaba, ellos se metían en problemas como el de ese tipo.

Para resumir, el par de chicos habían terminado emborrachándose sin pensar en las consecuencias, al punto en el que ambos no estaban totalmente conscientes de la situación que se les iba a presentar. 

Bien dicen que no debes aceptar bebidas de desconocidos en un lugar como ese porque nadie sabe qué es lo que puede pasar. Y eso fue exactamente lo que hicieron.

En la mente de Samuel, no paraba de pensar en que hubiera pasado si es que no los hubiera visto a tiempo, agradecía también, la coincidencia en el lugar donde se encontraban, porque si no hubiera accedido a salir, no hubiera podido evitar la situación.

WillycattusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora