Willycattus

d o s

Guillermo no era tan tonto como para hacer algo que le digan que no debe hacer.

[O al menos cuando está totalmente consciente.]

No iba a desobedecer las órdenes que le habían dado, y así era mejor.

Podía divertirse con sus amigos y conocer a gente nueva. Dos en uno. Iba a ir a donde David, el amigo de Rubén, para conocerse y platicar un poco.

—Hola- el chino se acercó con un par de vasos al sitio dónde estaba el mayor- ¿Quieres?

—Ya tengo uno- sonrió y le mostró su vaso- pero otro no me haría mal

Estuvieron conversando por más de media hora. Le cayó bien, no había que negarlo, en el fondo era un buen chico.

—Oye, ¿Sabes cómo se llama ese chico de ahí?- el mayor señaló a una persona que estaba riendo y sentado en uno de los sofás 

—¿Él? Es Alex

—¿Y cuántos años tiene, sabes?

—Eh, ten cuidado que él es menor que tú- rió

—Eso no es importante, ya verás, nos vemos luego- sin mucho preámbulo, dejó al chico de cabellos blancos para acercarse al otro que estaba en el sofá de la sala.

Willy al ver eso, fue a buscar a alguna otra cara conocida, pero en esto se rindió y fue a por más de su bebida y a bailar.

En un momento, ya había tomado lo suficiente pero no tanto como para no caminar de manera correcta, y de pronto, se chocó con uno de esos chicos con los que su amigo le dijo que no debía hablar.

—P-perdón- evitó hacer contacto visual y con su cabeza baja fue directo a la cocina para desaparecer de la vista de aquellos chicos.

Su miedo fue tan grande que no se atrevía a salir del lugar, y por suerte se encontró dentro con uno de sus amigos, Borja.

—¿Willy? ¿Qué haces aquí dentro?

—Eh, la verdad no lo sé. Estoy esperando a que unos chicos se vayan, creo...

—¿En serio?- el de cabellos marrones río- Bueno, si se te acaba tu bebida puedes tomas más del tercer cajón. Me quedaría más rato pero Raúl me está esperando, nos vemos más tarde 

Se despidió de su amigo y se sentó en una de las sillas de la que estaban dentro.

Había unas cuantas personas más en el lugar, pero no les tomó importancia y empezó a revisar su celular para que se le pasara un poco el efecto del alcohol. En sus notificaciones, tenía un mensaje de su mejor amigo.

Triple 7🦄

<oye

<vas a volver? sino para pedir algo para comer

<creo que eso es un no

<si te vas a quedar muy tarde, puedo ir a recogerte 

<para que vuelvas seguro, no quiero que nada malo te pase

<[mensaje eliminado]

<[mensaje eliminado]

<espero tu mensaje

Claro que le iba a pedir que vaya a recogerlo, no quería pedir un taxi ni volver caminando. Estaba por escribir el mensaje pero justo el contenido de su vaso se acabó y Guillermo recordó las palabras de su amigo

"...puedes tomar más del [—] cajón"

¿Qué gaveta era? ¿Segunda? ¿Tercera? 

*

Rubén solo tuvo que tomar un par de vasos para ya sentirse mareado y borracho.

—Oye- uno de sus amigos le llamó- ¿Tienes la bebida "especial"?

—¿Mhh...? ¿De qué me hablas?

—Ya sabes, para convertirte en un híbrido...

—Ohh, claro que tengo- afirmó- ¿Quieres un poco?

—Eh, si

—Ya espera, que voy a ir a por una botella

Doblas se levantó del pequeño círculo en donde se encontraba para dirigirse a la cocina. Todo parecía muy normal hasta que vió a su amigo con una botella vacía de etiqueta verde.

—¡WILLY NO, NO TOMES ESO!- dijo Rubén, pero no a tiempo. Su amigo ya se había tomado la poción entera.

—¿Pasó algo?- Díaz no entendía nada y hablaba con tranquilidad

—¿¿PERO NO SABES QUÉ ACABAS DE HACER??

—Claro que —hip— sé. Tomé esto- levantó su vaso y la botella, mostrándolos con orgullo

—¿¡Estás bobo o qué-!?- con un movimiento rápido, le quitó la botella vacía- y te lo tomaste todo...

—Perdón- el de cabellos blancos- si quieres te —hip— compro otro

Rubius iba a responderle pero, de manera inesperada, su amigo se desmayó.

~

en este capítulo no fui capaz de escribir más 1000 palabras(cómo me gustaría) pero no quiero tener actualizaciones lentas,,

faltan 47 días para navidad