DOCE

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Como mismo fue un impulso que hizo que ambos nos miráramos, quitó su mano a la velocidad de la luz y así rompió el contacto visual de cuajo. Yo por mi parte me había quedado bien chafada, y también un poco molesta, no sabía el porqué de mi enojo pero lo estaba. A lo mejor quitó la mano porque está conduciendo y tiene que velar por la vida de ambos o a lo mejor a sentido la misma electricidad que he sentido yo en la mano, la razón que fuera me descolocó bastante. Tanto, que todo el camino fue súper incómodo. Si después del beso estábamos incómodos era porque no sabía que era estar encerrada en un lugar concurrido como este teniéndole al lado y sin siquiera mencionar palabra, esto no es incómodo, es la palabra que le sigue y quiere tirarme por la ventanilla y matarme.

Aún así, lo aguanto, es que incluso me desamoré de su auto. Todo fue...extraño. Ninguno de los dos mencionó palabra hasta que aparcó unas casas lejos de la de MinJi para pasar "casualmente" por allí. Ahora eso de invitarle no me hacia tanta gracia, la verdad.

—¿Vas a bajar? —pregunta una vez fuera, ¿cuándo a salido? No tengo ni idea.

—Ah...sí, claro, claro —salgo pitando del auto con los nervios de punta, y mira que ponerme nerviosa a mi es difícil, pero es que este tío, tanto los nervios malos como los malísimos me los activa a la máxima potencia, es que me siento las piernas hasta flojas.

Me planto a su lado y veo como mete sus manos en los bolsillos de su pantalón. Yo llevo mi móvil con la grabadora puesta porque algo tengo que tener que grabe la evidencia, y buena memoria no tengo mucha.

—¿Caminas? —le pregunto cuando doy un paso y el sigue estático.

—Sí, claro —lo dice creo que igual que yo hace unos segundos.

Madre mía, es que estamos que metemos la cabeza en la tierra de la vergüenza y la incomodidad, yo voy tan rígida que me duele hasta caminar, sin mirarle. Nunca había estado tan incomoda en mi vida como ahora y es una puta mierda.

—Oye...que lo siento —habla, ¡por fin! Yo lo mire con el ceño fruncido.

—¿Qué? ¿Porqué? —pregunto. Aún mas chafada que antes.

—Por...lo de antes, ahora estamos incómodos y...

—Que no pasa nada, no te mosqueés con eso ¿vale? Fue un error con...la palanca, porque fue un error ¿cierto? —pregunto más porque acababa de decirle algo intimo y de mi privacidad antes de que me cogiera la mano, y no puedo negar que en algún punto de este momento, me llegó la suposición de que tal vez intentara reconfortarme, aunque viniendo del chico rata...¿porqué querría él hacer que me sintiera mejor? Pues por nada, no tenía porqué quererlo, o a lo mejor le doy lástima, que también es una posibilidad, porque mi familia me explota. Es que lástima doy, no lo pues negar.

—Claro, a sido un...error —lo dice mirando a sus zapatos, ¿él chico rata es tímido? Ni de coña, es que el concepto que tenía de él se está borrando mucho, ropa ancha, come snacks de bananas, es tímido... Pues me da miedo.

No puedo siquiera ocultar que lo que a dicho me a decepcionado un poco, bueno, me a decepcionado bastante. Es que doy vergüenza, claro que era un error.

¿Qué querías que te dijera YunJi? ¿Qué le a cogido la mano para que supieras que él estaba ahí para apoyarte? Pues no, que estás siendo un poco gilipollas, espabila un poco que a este paso, te enamoras del chico rata.

Police › jjk, pjm ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora