La morena la miró seriamente antes de tronar la lengua y chistar una maldición causando una risita encantadora por parte de la ojiverde, quien seguía esperando con ansias tan aquel anhelado abrazo, la veía esperanzada, admirando a la preciosa mujer morena a su frente a pocos centímetros de ella, causando que la emoción burbujeara en ello. Camila, sin decir, o maldecir más, volvió a pegar sus cuerpos en un seco movimiento causando el sonido “Plaf”, con fingida confianza metió su cabeza entre el hueco del hombro y cuello y la recargó ahí con su nariz rozando la piel del cuello de la princesa.
—Listo, princesa—Chistó burlonamente pero aquella emoción se desvaneció cuando escuchó el jadeo de la ojiverde, y el como sus brazos la apretaron aún más contra ella.
Maldecía internamente, el olor a uva fermentada provenía más de aquel sensible lugar, e inevitablemente y con sigilo respiró el olor, el haber vivido casi toda su vida en la producción de vino la había vuelto de cierta manera adicta al olor, y resistente al sabor, y más aún cuando el olor era verdaderamente delicioso, porque había marcas donde el vino era totalmente asqueroso, donde lo amargo dominaba, o viceversa. No había ni un solo espacio entre ellas, incluso Camila sospechaba que ninguna corriente de aire podría pasar entre ellas, a menos que fueran por los costados, pero como era una habitación cerrada, el calor se empezó a guardar e incrementar.
—Camzi—Murmuró su nombre roncamente adolorida, y la morena no sabía el porque del dolor.
—¿Uhm?—Emitió con los la boca cerrada sintiendo el cuerpo de la ojiverde empezar a arder, asimilándose a la primera noche que actuó de está manera.
—Lo siento—Su disculpa no parecía tan enserio, pero aún así confundió a la morena, quien con el ceño fruncido trato de separarse pero la princesa no le permitió ni un milímetro.
—Hey, ¿qué te pasa?, ¿y por qué te disculpas?—Interrogó con la voz levemente asfixiada pero a los instantes supo la razón.
El inmenso calor abundó todo su cuerpo, e involuntariamente un jadeo salió de sus labios y el frente de sus caderas se golpearon, los puños de Camila tenían envueltos el saco de la ojiverde mientras ella pasaba sus dientes, lenguas y ardiente boca por la parte más sensible de su cuello. Sus cuerpos se separaron levemente para permitir que la princesa prosiguiera marcando con sus besos y saliva la carne del cuello de la morena, y mientras eso sucedía, Camila no dijo ni un pío.
No quería hablar porque revelaría lo extrañamente reconfortante y satisfactorio que se sentía los besos en su cuello, lo agradable que sentía el rozar de la lengua ardiente de la ojiverde en su piel y los mordiscos suaves en su pulso.
—¿Puedo marcarte?—La voz de Lauren pidió aún recorriendo el camino ya explorado pero que ansiaba aún explorar.
Camila abrió los ojos como platos cuando la princesa habló pidiendo marcarla, su cuerpo y mente estaban tan sumergidos en el calor abundante que desprendía el aura y cuerpo de la joven realeza. Sin embargo, lo haría, rechazaría ser marcada a pesar de que su cuerpo gritaba por ser marcado por ella pero definitivamente no quería la marca en cualquier parte de su cuello de la princesa, eso era la marca de que se había dado por vencida autos sucios trucos.
—No.
Su respuesta fue seca pero su voz se escuchaba ansiada por lo sucedido anteriormente. La mujer de ojos verdes refunfuñó pero aceptó, por el momento, vio con hambre el cuello de la morena pero únicamente se agachó y dio un suave beso antes alejarse y únicamente abrazarla más fuerte que antes. Esta vez ya no uso su boca para incitarla, esta vez usó únicamente sus manos, quienes traviesamente se habían colado dentro de la camisa y el saco de la muchacha morena, no acariciaba su piel, pero sus uñas rozaban la carne de la cintura, cosa que hizo que involuntariamente el cuerpo de Camila se pegara más al de ella.

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Poisoned
FanficUna escuela de magia para los hijos de los más grandes emprendedores o los más importantes famosos, incluso había de la realeza, pocos pero lo había. Camila Cabello hija de uno de los más grandes emprendedores de licorería en todo el mundo, conocid...