He Is Not My Boyfriend °Jikook°

07

La lluvia continuó, Jimin se acercó a la entrada observando a través de la ventana en el muro aledaño a esta, Jungkook estaba calmado.

Entre sus manos una taza ligeramente humeante con bebida caliente en su interior, Park había sido tan paciente con él, a pesar de que Jungkook estuvo llorando durante varios minutos con fuertes sollozos.

— ¿Puedes prestarme el teléfono? — preguntó Jungkook en voz alta.

Park giró a verle desde la lejanía.

— ¿Necesitas avisar en tu casa? — Jimin se alejó de la ventana para buscar el teléfono que no se hallaba en la sala.

— Pediré un taxi — Jimin quien ya estaba de regreso, se quedó observándolo por varios segundos en silencio.

— Sigue lloviendo fuerte, es una tormenta allí afuera Jungkook.

— Estará bien, solo déjame pedirlo.

Jimin le pasó el teléfono, una agria expresión en su rostro que se transformó en una de preocupación legítima.

— Escucha, no creo que vayas a conseguir un taxi con esta tormenta.

Jungkook al final ignoró su comentario, comprobó momentos más tarde que el contrario tenía razón en ello.

— Realmente sería bueno si te vas ahora, mis padres no deberían tardar en llegar — revisó la hora en su móvil — pero ni siquiera estoy seguro de si ellos vendrán a casa con esta lluvia tan fuerte.

El más alto evitó llevar la mirada al contrario, era consciente de que su presencia estaba incomodando a Park.

— Lo siento, te retuve allí afuera y ahora estás aquí en tu propia casa estancado conmigo.

Park llevó su mirada hacia Jungkook quien mantenía su rostro bajo.

— Vamos — dijo Jimin — no lo digas de esa forma, no es como lo estás pensando.

— Quieres me vaya de inmediato.

— Eso es cierto, pero no soy una mala persona como para hacerte salir con esta tormenta.

— Puedo caminar hasta la estación más cercana si me prestas un paraguas.

Park sacudió su cabeza de un costado a otro.

— Estás loco, te mojarás igual — le refutó.

— No importa, llegaré a casa y me daré otra ducha.

El más bajo no respondió a ello y se alejó de la sala escaleras arriba.

Jungkook elevó el rostro cansino, suspiró para luego tragar saliva con poca fuerza esperando y deseando que el dolor en su torso desapareciera de una vez por todas.

Pero no fue así.

Park apareció en su rango de visión con un paraguas en su mano derecha y ahora estaba usando un abrigo, en su mano libre tenía uno para Jungkook.

— Te llevaré hasta la estación, iré contigo.

— ¿Qué? No es necesario, te mojarás si lo haces — respondió Jungkook acercándose para tomar el abrigo.

Intentó tomar el paraguas, pero el contrario se lo impidió.

— Iré contigo — repitió Jimin con voz firme.

— He dicho que no irás, ya tomaste una ducha y estás en casa, no hay sentido en que salgas con esta tormenta.

— Entonces sabes lo estúpido que es salir justo ahora con esa tormenta.