El Pacto 【Tomokazu】

Capítulo 8

Kazuha se fue a su casa pensando en la práctica de ese día, no entendía por que le había ido mejor que las practicas con su abuelo, pero ese pensamiento no rondo mucho su cabeza pues a pesar de todo estaba feliz.

Ya en su cuarto quizo practicar algo mas, la postura de sus manos como le había dicho Tomo. Puso sus manos alineadas y se preparó para entrenar, cerrando sus ojos y visualizando que portaba una Katana en sus manos, empezó con movimientos lentos que se iban haciendo mas rápidos, parecía que iba bien hasta que sus manos chocaron contra algo lastimándolo.

Kazuha abrió los ojos, se había movido del lugar inicial y como consecuencia se había golpeado contra una mesa que había en su cuarto, lo que le lastimo bastante, aun así decidió seguir, poniendo algunos cogines en aquella mesa por si volvía a ocurrir.

Volvió a empezar, obteniendo los mismos resultados esta ves con la pared, no entendía por que se estaba moviendo tanto pero en eso recordó que tomo le dijo que se movía innecesariamente, parecía que primero debería aprender a moverse lo justo por una zona limitada.

Los días pasaban, Kazuha empezaba a ir junto a Tomo todos los días para practicar y escuchar sus avances, aunque estos eran casi inexistentes, aunque durante ese tiempo pudo mejorar un poco su movimiento, haciendo que el rango por el cual se movían sus pies eran limitados. También mejoro algo la postura de sus manos, pues estas cada día estaban mas cerca lo que alegraba a Kazuha.

- ¿Cómo he estado? - preguntó Kazuha tras la sesión de ese día

- Mejor, aunque veo que disminuiste la velocidad

- Es por el fri- antes de terminar soltó un pequeño estornudo, ya era diciembre por lo que el frío estaba mas que presente.

- Es mejor que vuelvas a tu casa, te resfriaras si te quedas mas tiempo - dijo Tomo al ver a su amigo, Kazuha sólo asintió pues tampoco quería resfriarse, por lo que ambos se despidieron.

Kazuha volvía a su casa, a pesar de estar abrigado tenia bastante frío, el cielo igual estaba nublado por lo que no tenia el sol de los días pasados para calentar un poco, sin duda el frío completo había venido de repente. Siguió caminando cuando se dio cuenta de que empezó a nevar, por lo que aceleró su paso.

Al llegar a su casa fue recibido por su madre que estaba alterada, Kazuha igual lo estaba pues no esperaba verla allí.

- ¡Kazuha! ¿Dónde estabas? ¡Te estuve buscando por todas partes! Afuera hace demasiado frío, busque en el patio y no te vi, pensé que algo te había basado - dijo mientras abrazaba a su hijo el cual estaba completamente helado y con algo de nieve que le cayo encima.

Kazuha se empezó a sentir mal, él estaba bien, nunca quizo preocupar a sus padres pero tampoco sabia que llegarían antes.

- Lo siento... - respondió sin saber que mas decir.

- ¡Cariño prepara un baño, ya encontré a Kazuha! Ve a bañarte y calentarte, estas helado, y mas vale que nos digas donde has estado, no vuelvas a escaparte así hace demasiado frío afuera, si hubiera nevado mas podrías estar en peligro.

Kazuha solo pudo asentir y dirigirse al baño, estaba demasiado avergonzado pero sabia que en cualquier momento se darían cuenta de que se iba, aunque no sabia si decirles la verdad o no, pues sentía que no le creerían.

Despues del baño, Kazuha tuvo que dirigirse al salón donde los esperaban sus padres, ambos esperándolo enfadados, Kazuha solo pudo sentarse frente a ellos con miedo de lo que le dirían.

- ¿Desde cuando te escapas? - empezaron preguntando.

- N-No lo se bien... 1 mes quizás... Algo mas.