Capítulo 12

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Los padres de Kazuha estaban hablando en su cuarto sobre la situación del abuelo, debatían si deberían decírselo o no a Kazuha, que viera como está.

- Entiende, ¡aun es joven! - indicaba la madre de Kazuha.

- No importa cuantos años pasen, ¡para ti siempre es un niño! Esta situación es grave, lo mejor es que no se la ocultemos mas, debe empezar a acortarlo... Tú también - dijo aquel hombre mirando como su esposa se negaba a aceptarlo.

Ambos sabían que en aquella situación al padre de la mujer no le quedaba mucho tiempo, le faltaba extremidades, algunos de sus horgsnos vitales habían sido dañados y a pesar de eso logró regresar, era fuerte pero no duraría mucho mas.

- Vivirá - indicó la mujer negándolo - yo lo cuidaré ¡debe vivir mas! - dijo al borde del llanto, quería convencerse a si misma de algo que no era real.

El hombre abrazó a su mujer para intentar consolarla, aquella situación era muy complicada y lo sabía, pero solo podía hacer eso en aquel momento, no podían estar siempre negando la realidad.

- Cariño, se que es difícil, pero piensa en tu padre y en Kazuha, ambos se llevan bien y no se ven desde hace mucho tiempo, al menos dejalos que se despidan...

No era algo fácil de aceptar, aquel hombre que acabo con ejércitos enteros y que infundía miedo con la propia mirada estaba en aquel deplorable estado, no sabía di los años le hicieron factura o si eran a un monstruo a lo que se enfrentaban.

La pareja siguió hablando durante un tiempo hasta que llegaron al acuerdo, dejarían que Kazuha y el abuelo pudieran hablar, quizás esa era la última oportunidad que tendrían, la única condición era mantener la distancia y que el cuarto estuviera oscuro, no querían que el pequeño lo viera así.

Kazuha estaba junto a sus padres enfrente de la puerta de la habitación de su abuelo, nada mas regresó a su cuerpo fue llamado por sus padres y no tardó en adivinar para que era.

- Escucha cariño... Tu abuelo esta muy débil, puedes hablar con él pero no alces la voz muy alto y mantener la distancia, la luz daña sus ojos así que no la encenderemos, ¿bien?

Kazuha asintió y fue acompañado por su madre hacia el interior de la habitación. Dentro todo estaba oscuro y en silencio, apenas podía distinguir algunas cosas.

- Bien Kazuha, te dejaré a solas por 5 minutos, luego vendré a por ti pues tu abuelo debe descansar - Kazuha asintió y tras eso la mujer se fue dejando a ambos solos.

Kazuha no sabía que decir, no podía ver bien a su abuelo por lo que no sabía lo que le pasaba, en su cabeza solo se le ocurría el hecho de que su abuelo estuviera en verdad mal y herido, a punto de morir por aquella batalla que escuchó.

- Kazuha... - dijo el mayor sin poder dirigir la mirada a su nieto, no solo por la oscuridad si no por su vista que había sido dañada - ten cuidado.

- ¿Abuelo? - dijo el pequeño confundido pues no tenia idea de a que se refería.

- Kazuha, disfruta de tu vida... No confíes en los demás... No confíes en- antes de terminar la frase su boca quedó seca, aquel contrato le impedía decírselo - ... Se fuerte pequeño... Cuida a tu familia.

Kazuha no entendía las palabras de su abuelo, parecían frases incompletas o sin un contexto, como si le quisiera transmitir algo pero no sabía el qué. El abuelo era consciente de esto pero no le podía decir mucho, estaba débil y aquel contrato le impedía decir con claridad lo que quería además de que solo tenía 5 minutos para hablar con su nieto lo que no eran suficiente para nada.

- Kazuha... Recuerda que eres fuerte, se que eres hábil, perteneces a la familia Kaedehara, recuerdalo... Si estas en peligro recuerda que puedes con todo

El Pacto 【Tomokazu】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora