𝕄𝕒𝕥𝕥𝕖𝕣 𝕠𝕗 𝕥𝕚𝕞𝕖

"El dolor sin lágrimas sangra eternamente" - Christian Nevell

POV Colette

"Una de las teorías que se barajan es que se hayan fugado juntos"

"Encontradas grabaciones de seguridad en las que se les puede ver discutiendo..."

"El director de la empresa T&L asegura que ha sido provocado por una falla en el proyecto en el que se trabajaba"

"No me lo creo, parece sacado de una película de ciencia ficción"

"El tribunal dicta prisión sin fianza de un año para el responsable de la seguridad del proyecto"

"Todos los testigos de los hechos aseguran haber visto desaparecer la nave, como si se hubiese volatilizado"

"No hay pruebas suficientes que respalden la declaración del empresario"

"He estado al tanto de las investigaciones que se han llevado a cabo y estoy prácticamente seguro de lo que se dice es cierto"

"La investigación debe ser cerrada en cuanto antes, pues fomenta la creación de nuevas teorías conspiratorias"

Una pared blanca, con vinilos en forma de flores. Mi mano sobre el sofá. La televisión está encendida, pero no presto atención ni a las imágenes ni a lo que dicen. Cuentan lo mismo de siempre y nunca resulta ser la verdad. Por eso sigo con la vista clavada sobre la pared blanca con vinilos mientras que lo que hablan se convierte en un ínfimo murmullo. Ajena al mundo, a la realidad y a todo en general.

Noto el chirrido desagradable de la puerta de la entrada siendo abierta. No me inmuto siquiera y continúo contemplando esos dibujos de flores. 

Unos pasos se acercan hasta el sofá donde me encuentro. Los ojos me pesan. Todo mi cuerpo de arriba a abajo semeja una inamovible gran roca. Los pies de plomo, las piernas de piedra. Se asemeja a portar una gran losa de cemento, preparada para caer con toda su fuerza cuando menos te lo esperes.

-¿Aún sigues ahí? - pregunta mi hermano.

Entonces lo veo cargando un montón de bolsas del supermercado de en frente. Me levanto para ayudar pero indica con un gesto que no me moleste, que él puede llevarlas hasta la cocina. Sigo su recorrido con la mirada y, en cuando vuelve hacia donde permanezco sentada, frunce el ceño. 

-¿Continúas viendo todas esas patrañas que anuncian por la televisión? - cuestiona algo disgustado.

Agacho la cabeza. Me entran unas ganas inmensas de esconderme del mundo y continuar oculta de los susurros y chismorreos que percibo cuando paso al lado de la gente por la calle. Evitar preocupar a mi hermano por mi cambio de actitud y de humor. 

Bastian coge el mando y apaga el aparato, de forma que la molesta voz de la periodista desaparece, reinando el silencio. Un silencio tan necesario...

Llevo semanas sin apetito, ni sueño... El mantenerme tapada con mi manta sobre el sofá, viendo alguna película que echen por la televisión se ha vuelto mi hobbie favorito. Ante la ausencia de Attis, Bastian me ha hecho un hueco en el apartamento que han alquilado. Lo cierto es que los colchones son muy cómodos, al igual que el sofá, pero aún así me es imposible conciliar el sueño. Diego, de vez en cuando, se pasa por aquí para hacerme alguna que otra visita. Él también presenció cómo la nave despareció de un momento a otro, como se engullía a si misma y, con ella, a mi mejor amiga, a mi incondicional de toda la vida. El chico lo ha pasado mal, no lo negaré, pero su cercanía con Attis era muchísimo menor que la mía con Elie. Se ha portado genial y se preocupa por mi situación tanto como Bastian. De hecho creo que, de no ser por él, Bast nunca habría creído mi versión de los hechos. Lo que es razonable, pues el asunto de normal tenía más bien poco.