Fiscal Tanapon "PerthMark"

Capítulo 10

Narra Mark:

No hay forma de que me sienta más feliz, Perth, mi esposo me hizo el amor toda la noche, mis fantasías se quedaron cortas con lo que provocó en mí. Pero creí que despertaría en sus brazos y no fue así, cuando abrí mis ojos, Perth ya se había ido y me sentí un poco triste.

Se fue sin despedirse de mí, ni siquiera me despertó para darme un beso antes de irse, ¿acaso le disgustó lo que hicimos anoche? Me doy la vuelta para sentir la luz del sol en mi rostro y para mi sorpresa, había una nota sobre la mesa de noche; me levanté casi de inmediato y la leí:

"Buenos días Tesoro, ¿descansaste bien? ¡Perdóname por no quedarme, hubo una emergencia en la oficina! Te extrañaré todo el día, espero volver y repetir lo qué pasó anoche, fue realmente mágico. ¡Te amo Mark!"

- ¡Yo también te amo Perth! - Grité y la Nana entró.

- Niño Mark, ¿se encuentra bien? - Venía con mi desayuno.

- Nana, ¿a qué hora se fue Perth?

- ¿Su esposo? ¡Salió muy temprano! No dijo si volvería pronto; pero tal vez alguien pueda convencerlo y me motivan a preparar una cena especial.

Comí lo que me llevó Nana, todo estuvo muy delicioso; después me tomé el medicamento que dejó mi esposo para mí. Ella vino y le conté casi todo lo que había pasado anoche, obviamente no le conté los detalles, pero ya sabe que Perth me hizo suyo hasta que amaneció.

Luego le mandé un mensaje a mi esposo, porque cuando llamé no me contestó, por eso asumí que estaba ocupado. Nana me ayudó a arreglar una mesa en la habitación para cenar ahí con Perth, habían velas, chocolate, fresas, el platillo principal y el postre.

Cuando Perth me dijo que ya iba de regreso, me duché de inmediato, saqué mucha ropa y me sentí como una quinceañera en su primer cita, nada de lo que me ponía me gustaba; me quité lo último que me había puesto y cuando estaba solo en ropa interior y camiseta, él entró.

- Creí que me invitabas a cenar comida Mark.

- Así es, no estoy listo y que eso no altere tu juicio.

- ¿Juicio? ¡Eso no existe cuando te tengo cerca!

Perth me entrega un ramo de rosas muy hermoso y mientras me distraje poniéndolas en un florero, él me agarró por la espalda. Podía sentir su respiración cerca de mi oído y mi cuello, dándome una sensación de excitación que solo él ha logrado provocar en mí.

Me doy la vuelta y él captura mis labios entre los suyos, besándome con gran intensidad, yo rodeó sus hombros con mis brazos y correspondo. El beso cada vez se pone más caliente, Perth me carga de nuevo deslizando sus manos desde mis muslos hacia mis glúteos, pero se detiene.

- Me preocupo por ti amor, aún está muy reciente tu primera vez.

- ¡Vamos a la cama Perth! ¡Más acción y menos charla!

Mi esposo es tan apasionado que cumple con mi petición, y ya que me vi separado de él por un año, pensaba recuperar el tiempo perdido. Y así fue durante el siguiente año, Perth me hizo el amor cada noche después de su trabajo y no se iba sin despedirse a la mañana siguiente.

El precioso hombre que se robó mi corazón, descubrió un restaurante latino cerca de nuestra casa, así que me llevó ahí para celebrar el segundo aniversario. Nos cantaron, celebraron, bailaron por nosotros, todo fue hermoso y estábamos tan felices que caminamos a casa.

- ¿Mark? ¿Escuchas eso?

(Llanto de bebé)

- ¡Está muy oscuro aquí! ¡Espera, sacaré mi celular!