Capítulo 1

299 35 10
                                    



Narra Perth:

Vi a Saint, mi novio estaba desnudo en la cama con otro hombre; o para ser sincero con más de dos hombres y esa es una imagen que no puedo borrar de mi cabeza, por más que lo intente mi ego está demasiado herido, así que opté por huir de mi dolor en lugar de enfrentarlo.

Conocí a Saint cuando recién había entrado en la universidad, fue la primera persona que llamó mi atención con su increíble belleza. Nos hicimos amigos demasiado rápido, y junto con su amigos siempre estábamos los cuatro, éramos inseparables, hasta que decidimos iniciar una relación.

Max y Tul nos dijeron que esperáramos, que nos conociéramos mejor; pero como dos jóvenes apresurados no quisimos escuchar. Poco tiempo después, pasamos la noche juntos, Saint fue implacable y creí que por ser nuestra primera vez es que estábamos así de insaciables.

Cuando me dijo que descubrió que era un adicto al sexo, prometí ayudarlo; pero fue más difícil que lo que pensaba. Le di la espalda a Saint y por eso buscó en otros lo que yo no supe darle; sé que no es excusa para la infidelidad; pero, de todas maneras, esa noche iba a terminar con él.

- ¡Qué serio! ¿Estás pensando en mí?

- Hola Mark, es un gusto verte, estoy bien gracias; espero que tú también.

- No contestaste mi pregunta.

- Y tú no me saludaste, estamos a mano. ¡Cuídate y adiós!

- ¡Que ternura! ¡Te preocupas por mí!

- No, no me preocupo por ti; eres una molestia caminante; lo único que quiero es que me dejes en paz.

Este chico es Mark Siwat, lo conocí hace dos años cuando hice cambio de universidad, incluso cambié mi carrera. Antes estudiaba economía, ahora estudio leyes y me propuse convertirme en el mejor Fiscal que pueda existir, quiero demostrar que la justicia sí existe.

- ¡Hola Perth! ¿Te gustan los dulces? ¡Traje algunos para ti!

- Hola señorita Piket, le agradezco por los dulces, pero no los quiero.

- Me llamo Nina, me encantaría que alguna vez me llamaras así.

Primero Mark y ahora esta chica, la verdad es que no estoy de humor para sus tonterías; es como si tuviera un cartel en mi frente que dijera: "¡Se necesita pareja! ¿Quieres postularte?", es realmente molesto y no pienso tolerarlo ni un solo día más.

- Señorita Piket, ese es su apellido y así es como me referiré a usted, se lo estoy diciendo de buena manera, así que por favor déjeme solo.

- Yo solo quería ser amable contigo... - Dice envuelta en lágrimas antes de salir corriendo.

- ¡Wow! ¡Eso sí que fue cruel! ¿Acaso no tienes sentimientos ni sentido común?

- ¡Otra vez tú! ¿Qué no tienes nada que hacer?

Puse mis ojos en blanco lleno de ira cuando vi a Mark ahí, estaba tan furioso en ese momento, porque no quiero que se me acerquen. Por ahora, necesito estar solo, aclarar mis ideas, dejar ir el pasado y tal vez, después de eso busco la forma de crear mi propio futuro.

- No seas pesado conmigo; compartimos esta materia por si no lo recuerdas.

- Gracias por aclararlo, me cambiaré de lugar.

- ¿Qué pasaría si te persigo a donde sea que vayas?

- Tú no quieres descubrir la respuesta a esa pregunta...

Dije de forma irónica mientras me cambiaba de lugar y Mark se reía de forma muy divertida; este chico sí que me hostiga. En verdad me saca de mis casillas no lo tolero, lo veo hasta en el reflejo del espejo; aunque creo que piensa que todos lo aman y podría ser por su influencia.

Porque sí, todos conocen a "Laboratorios e Investigadores Siwat", es la empresa más influyente en el país. Creo que esa es la razón obvia por la que todos quieren estar cerca de él; digo, para un estudiante de Fiscal, su ayuda sería como estar en la cima del éxito.

- Perth Tanapon eres un amargado.

- Y tú eres un niño inmaduro... ¡Crece de una maldita vez!

Estábamos de esquina a esquina gritándonos en el salón, que estaba lleno de nuestros compañeros y nos miraban de forma atónita. Nadie me desespera tanto como Mark Siwat, es como tener un clavo atorado en el pie; y lo peor, es que él parece disfrutar de mi enojo.

Lo más irritante, es que puedo sentir las miradas de Mark durante todo el desarrollo de la clase; y no me gusta sentirme tan acosado, así que por más que me esfuerce por alejarlo, parece que él se empeña en mantenerse cerca de mí.

Por fin se llegó la hora del almuerzo, el único momento del día en el que puedo librarme de la piedra en mi zapato llamada Mark. O eso es lo que yo creía, porque mientras investigaba un poco sobre la siguiente clase, apareció, sentándose frente a mí y mostrando su mejor sonrisa.

- ¿Aún no estás aburrido Mark? ¿Quieres más?

- No seas odioso Perth, solo quiero escuchar la respuesta.

- ¡Púdrete! ¡Y ya déjame solo!

- ¡Mira a tu alrededor Tanapon! ¿Cuántos están solos?

Estoy harto de Mark, pero inconscientemente le hago caso y me doy la vuelta solo para darme cuenta de que todos están en grupos. Algunos en parejas, sin embargo se estaban divirtiendo mucho, entonces noto que tiene razón, y lo peor, es que no quiero hacer nada para remediarlo.

- ¡Esos son ellos y es su vida! ¡A mí no me gusta estar con otras personas!

- ¿Acaso alguien te decepcionó? ¿Por qué estás tan empeñado en alejar a los demás?

- Porque la gente no me necesita, así que yo tampoco los necesito... ¡Y ya vete!

- ¿Qué pasaría si te digo que yo sí te necesito? - Miro sus ojos y no hay una pizca de ironía en sus palabras.

- ¿Qué ganaría yo si te ayudo?

- Señor Tanapon, usted no quiere saber la respuesta a esa pregunta.

El muy idiota se puso a reír con fuerza, literalmente todos se dieron cuenta de que burló de mí y en verdad odio esto. Juro que si no deja de hacer esto voy a golpearlo tan fuerte, que se arrepentirá de todas sus malditas bromas y lo forzaré a pedirme perdón.

Aunque unos días después, no tuve que preocuparme por eso, Mark se había ido, es decir, que llevaba días sin poner un pie en la universidad. Pero para mi mala suerte, en lugar de sentirme aliviado de no verlo, sentía que algo no estaba bien, así que tuve que preguntar por él.

- Señorita Piket, disculpe que le interrumpa, ¿ha visto a Mark Siwat?

- Oh, no... Bueno, lo vi hace como cuatro días, estaba hablando con Pineare, después de eso desapareció.

- Por casualidad, ¿escuchaste de lo que hablaban?

- Realmente no, pero sí pude notar que estaban discutiendo, porque el joven Siwat se veía muy enojado.

¿Mark estaba enojado? Eso sí que es nuevo, todos lo conocemos como el chico más divertido y que todo es gracioso para él. Ah sí, y por cierto; gracias al imperio de su familia, todos se refieren a él como "joven Siwat", soy el único rebelde que lo llama por su nombre.

- Hola Perth, ¿me extrañaste?

- ¡Hasta que apareces! ¿Así que tú crees que puedes acercarte a mí, fingir que somos amigos, desaparecer por nueve días y después venir como si nada hubiese pasado?

- ¡Increíble! Incluso contaste los días...

- ¡Vete Mark, estoy estudiando un caso y no tengo tiempo para tus estupideces!

- Perth... ¿Quieres casarte conmigo?

Esa pregunta me hizo separar mis ojos de los documentos para centrarme en Mark, ¿acaso se volvió loco de remate? ¿Por qué me casaría con él?...

Fiscal Tanapon "PerthMark"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora