Una vez que Loki entró en la habitación, vio al amor de su vida sentado en la cama. No importa qué, ella era hermosa, de cualquier forma, la ha visto toda y ella es la mujer más hermosa que jamás haya conocido. La ama y seguirá amándola por siempre, incluso si tienen que empezar de nuevo. Sabía que su corazón le pertenecía, siempre será de ella.
Le entristecía saber que ella no lo recordaba. Sintió que un atizador rojo ardiente se clavaba en su pecho, sabiendo que no puede confesarle su amor y hacerle cumplidos como solía hacerlo.
No tenía idea de por qué estaba aquí, pero él si, y sabía que era su culpa. La acusó de algo que ella nunca hizo, debería haber confiado en ella. Si lo hiciera, ahora estarían en casa disfrutando de su vida.
Apretó los puños antes de suspirar suavemente por la nariz. La vio mirando todos los cables que estaban conectados a ella. Sus hermosos ojos verde esmeralda encontraron los de él y dejó de jugar con los cables.
Después de un segundo, siseó y se aferró a su hombro. Corrió hacia ella por instinto, poniendo una mano sobre la de ella donde estaba su marca del alma.
"¿Qué diablos fue eso?", Preguntó confundida.
"No lo sé cariño", dijo.
Se bajó el vestido desde el hombro y vio la marca. Sus ojos se encontraron con los de él, pudo ver el destello de nuevo, pero no el mismo destello que una vez conoció. Sintió que ella tomaba su mano y la ponía en su marca de alma. Ella le sonrió, pero no era la sonrisa con la que estaba familiarizado. "Hola amor, soy Chloe sue Annesley, pero puedes llamarme Chloe o Annie", dijo sonriendo.
Se llevó el dorso de la mano a los labios, besándolo suavemente. "Hola señorita Chloe, es un placer conocerte. Soy Loki", dijo. No tienes idea de lo doloroso que era volver a presentarse al amor de su vida.
"El placer es mío, alma gemela", dijo Chloe guiñándole un ojo.
"Sabes que somos...-", fue interrumpido por ella. Ella le sonrió.
"Por supuesto que sí, sé mucho sobre mis marcas del alma, pero no sé quiénes son. Sentí algo cuando abrí los ojos por primera vez, simplemente no sabía qué era, y de alguna manera supe que eras tú , dijo sonriendo de nuevo.
Jugueteó con los pulgares. No sabía si ella todavía podría rechazarlo. Pero pensar en que lo hiciera, lo asustó. No quería perderla.
Ella le impidió jugar con los pulgares. "Basta, sé lo que piensas y no, no te voy a rechazar, te he esperado mucho tiempo", dijo. Podía sentir las lágrimas brotar de sus ojos, era casi como cuando se conocieron por primera vez.
La sintió inclinarse y limpiar la lágrima con el pulgar.
"Puedes darme un abrazo, sé a ciencia cierta que no puedo usar mis piernas en este momento", dijo abriendo los brazos. No lo dudó, pero sabía que debía tener cuidado, todavía estaba muy frágil por el accidente. Envolvió sus brazos alrededor de su amor, se sentía bien tenerla de nuevo en sus brazos. Sentir su calor, sentir su cuerpo físico en el de él, oler la esencia de su cabello.
Podía sentir los pequeños círculos en su espalda. Estaba en Valhalla, tenía que serlo. Este sentimiento era asombroso.
Pero en poco tiempo, ella se apartó y le echó un buen vistazo.
"Vaya, eres impresionante", dijo, pero rápidamente se sonrojó tras darse cuenta de lo que dijo. Él se rió de nuevo, tratando de no llorar, ella había dicho casi lo mismo cuando se conocieron.
Se aguantó las ganas de darle un beso en la frente. Para ella, se acababan de conocer y no quería hacerla sentir incómoda, incluso cuando sabía que ya había besado cada pedazo de piel de su cuerpo.
Pero luego pensó en algo.
Él le sonrió. "¿Quieres ver algo genial?", Preguntó. Ella le dedicó una sonrisa radiante. Él se rió de ella, la amaba más que a nada en este mundo. No le importaría esperar a que ella lo amase de nuevo mientras ella siga siendo suya.
Utiliza su niebla verde para jugar, ella siempre había amado su magia. Vio que sus ojos se iluminaban de asombro, su boca bien abierta. "Es jodidamente asombroso", susurró. Esbozó una sonrisa. Lo usó un poco más antes de golpearla en la nariz haciéndola reír, lo cual extrañaba muchísimo durante todas estas semanas. Echaba de menos todo de ella.
Pero al menos ella sabía que él era su alma gemela y ella era suya. No quería verla con algún mortal, al menos con uno que no sea su alma gemela. Él y los demás tendrían que mantenerla alejada de los medios hasta que recuperara sus recuerdos, o será un infierno explicarle que ya se conocían antes.
Pero por ahora, iba a disfrutar viéndola sonreír, porque era él quien la hacía sonreír. Se fijó en sus hermosos labios rojos rubí anhelando besarla, pero sin intentar hacerlo, no hasta que sea completamente ella. Iba a recuperar a Chloe de una forma u otra. Iba a recuperar a su reina.
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Pequeña vengadora
ActionChloe no siempre lo tuvo fácil, se burlaron de ella por tener muchas marcas de almas gemelas. De hecho, tenía 11 marcas de alma gemela, pero no sabía quiénes eran, ella solo tenía dieciséis años pasando a los diecisiete. Ahora que se muda de su ciud...