Pequeña vengadora

Capítulo Sesenta y Siete

Narra Chloe 

Más tarde ese día

Hoy era mi cita con Elsa para controlar al bebé. Y todo lo que puedo decir es que Loki está muy emocionado de ver al bebé. Así que, aunque no quiero dejar la comodidad de mi habitación, tenía que hacerlo.

Miré a Loki y me tomó de la mano besando mis nudillos. "Todo estará bien mi amor, estaré a tu lado todo el tiempo", dijo. Asentí y apreté su mano en la mía en agradecimiento.

Salimos de la habitación y nos dirigimos a la sala de medicina donde encontraría a Elsa. Pero una vez que llegamos allí, era más que solo Elsa. Todos estaban allí, incluso Nick. Miré a Loki con nerviosismo, me acercó más a su lado con su mano en mi estómago haciéndome sentir segura. No es que tuviera miedo de mis almas gemelas, solo estaba nerviosa por lo de la la última vez.

Tragué saliva y caminé hacia la camilla, me acosté y Loki se quedó a mi lado. "¿Estás lista para esto?", Me preguntó. Asentí con la cabeza mientras miraba a Loki.

Elsa puso el gel frío en mi estómago haciéndome jadear levemente. "Wow, está frío", dije, escuché reír a Elsa. Movió la máquina alrededor. Miré la máquina, pulsó un botón y pronto escuché los latidos del corazón del bebé. Miré a Loki para verlo con ojos vidriosos con una sonrisa en sus labios.

"El bebé parece estar bien, el mes que viene averiguaremos qué género es, estás a la mitad del segundo mes", dijo Elsa sonriendo.

Le pedí a Elsa que registrara el sonido de los latidos del corazón del bebé e imprime una imagen. Luego limpió el Gel de mi estómago.

Rápidamente me volví hacia los demás, pero no pude mirarlos.

"Entiendo si ya no me queréis, pero os amo- Si ya no queréis que viva con vosotros, me iré. Os prometo que no haré un escándalo, yo- ", pero me cortaron.

"No digas una palabra más niña, tú y el bebé os quedáis con nosotros. Nos encantaría estar en tu vida y en la del bebé, porque te amamos y aprenderemos a amar al bebé como si fuera nuestro. Te amamos niña y lamentamos cómo reaccionamos, ¿puedes perdonarnos?", dijo Tony mientras me abrazaba. Sollocé y le devolví el abrazo.

"Ya lo he hecho", susurré. Se apartó y me secó los ojos de lágrimas. "Pensé que no me querrías cerca después de todo, lo siento", le dije.

Miré hacia abajo, pero él levantó mi barbilla, así que lo estaba mirando. "Nunca te arrepientas de algo que es normal, somos tus almas gemelas y tú eres la nuestra, estaba destinado a suceder uno de estos días, y no iban a hacerte renunciar al bebé. Sí, puedes ser joven, pero siempre estaremos a tu lado, te queremos y nada de eso va a cambiar", dijo. Envolví mis brazos alrededor de su cuello y puse mis labios suavemente sobre los suyos.

Pronto nos apartamos del apasionado beso. "Te amo niña", me susurró. Le sonreí amorosamente. 

"Te amo Tony", susurré.

Nos apartamos y Steve y Bucky me envolvieron en un abrazo.

"Te extrañamos tanto muñeca, no tienes idea", dijo Bucky. Sonreí y pasé mis dedos por su cabello.

 "Yo también os extrañé, lamento haber sido tan injusta durante los últimos días, ¿podéis perdonarme?", Dije. Se apartaron y me miraron con amor en sus ojos. 

"No hay nada que perdonar, te amamos Chloe y nada va a cambiar eso, ni siquiera el bebé. Lo queremos como si fuera nuestro", dijo Steve. Vi como Bucky asintió, estando de acuerdo con Steve.

"Os quiero chicos", les dije abrazándolos con fuerza. 

"Nosotros también te queremos cariño", dijo Bucky. Me abrazaron con fuerza, pero no lo suficiente como para lastimarme a mí o al bebé. Ambos se apartaron y besaron mis mejillas.