Emma Morgan Mitchels

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10 paginas de Word y 5220 palabras después:

¿Recuerdan que dije que sacaría fanfics de Emma siendo Morgan? Pues aquí esta.

Andaba bañándome y escuchando kpop, cuando la imagen se me viene a la cabeza como si fuera iluminación divina, así que aquí esta plasmada.

Aclaración: Emma tiene una capacidad especial para recordar cosas, al estilo Spencer Reid de Mentes Criminales. Sufre de hipertimesia un síndrome que le permite recordar cada detalle de su vida, como si hubiera ocurrido ayer. Alondra un personaje original creado por mi tenía 18 años cuando todo inicio y lamentablemente murió de 21. 

Estado del fanfic: Corregido

No siendo más iniciemos:

La pelinegra estaba algo mareada con el viaje, hace poco había salido de fiesta con algunas de sus amigas y compañeras en Rusia, se emborracho, bailo como una perra profesional y termino teniendo sexo fantástico y delicioso con un desconocido que le dejo las nalgas vueltas nada, los muslos sensibles, los pechos peor y ni se diga de su pobre pochola, la cual esta resentida por haber sido desvirgada por una verga tan gruesa y larga, dios ese hombre le perforo hasta la inconciencia, es una verdadera lástima que no lo vuelva a ver.

- ¡Emma! - La menor de las James la llama con insistencia, la morena andaba perdida en sus recuerdos y no había notado que ya habían llegado.

- ¿Qué pasa, porque me gritas? -Dios tras que el dolor de cabeza la está matando llega esta mujer a querer romperle los tímpanos.

-Llevo minutos llamándote, pero andabas perdida en tu mundo como siempre. Vamos ya llegamos

-Está bien-Se bajan del automóvil y se dirigen a la entrada del cuartel general de la FEMF donde la capitana (recién nombrada) James los espera con emoción, en compañía del ministro Morgan que observa todo con una sonrisa en su rostro. Emma se apresura a abrazarla con algo de cuidado después de todo aún debe estar débil por el tratamiento para la recaída.

-Que emoción que ya estes aquí, a salvo. Deseaba poder hablar contigo hace mucho, pero nadie me contactaba ni me daba respuesta alguna sobre tu situación me tenías sumamente preocupada.

-Estoy bien Emm, gracias a dios ya estoy bien.

-Es muy bueno saberlo...-Su comentario es opacado por la llegada de los demás integrantes de la familia James quienes acaparan la atención de la capitana. Así que de forma inteligente se hace a un lado y les permite tener un buen momento con su hija, después de todo ella no es realmente un miembro de su familia. Sin embargo, en su vocabulario no existe estar de lado o ser ignorada como si fuera un cuadro o una maldita pared, por lo que sin temor a nada se acerca al ministro Morgan a quien le brinda la mano y jala para darle un beso en la mejilla y un gran abrazo, sonríe porque lo siente tenso, dios puede jurar que hasta nervioso.

- ¡Emma! -El grito de Luciana es un claro indicativo de que no le agrada la acción de la pelinegra, de seguro debe estar pensando en la vergüenza que le está dando, eso la hace sonreír de forma más descarada. Si a ella le arruinan las vacaciones teniendo que compartir con gente tan amargada pues ella le arruinara las vacaciones también y que mejor que molestarla relacionándose con quien más vergüenza le da, los Morgan.

-Tranquilo ministro soy una niña buena -Sonríe con burla y le habla una vez se separan- le prometo que no me lo voy a comer- alza su mano derecha en señal de promesa y le guiña un ojo. A lo que este sonríe mientras niega la cabeza, nota muy bien su doble intención. Esta señorita es un verdadero enigma.

Después de saludos cordiales y de que inicien una marcha hacia el interior del recinto, la pelinegra se prende del brazo del ministro y se pasea por todo el cuartel de esa forma, haciendo preguntas y dando sugerencias para mejora las mismas que para Sam y Luciana son realmente tontas, pero que al ministro le parece muy interesante. Llegan a la sala de reuniones donde se encuentra el resto del equipo elite, el coronel y Regina Morgan. La pelinegra entra como perro por su casa, viendo todo, saludando a todo el mundo y presentándose a las personas desconocidas, todo en compañía del ministro quien sin saber porque le cumple el capricho con mucho gusto. Ganándose exclamaciones de sorpresa por parte de todos, mientras los Morgan restantes solo observan la escena con curiosidad (ya saben chicas, la sangre llama). A la final la pequeña ninfa hace que el ministro Morgan acomode su silla y por si no fuera poco se siente a su lado, el aire entre ellos es de complicidad absoluta. Gema esta que se la lleva quien la trajo no puede creer que las James sean tan resbalosas y ambiciosas.

FANFIC ILEMMA [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora