Xenon-4333

Episodio 29 - El hombre de nieve

    —Nuestro transporte se averió —Informó el Suboficial —No vendrán por nosotros en un rato...

    El equipo había salido de la mina, al exterior de misma. Cuando llegaron a arriba se encontraron con la sorpresa de que estaba comenzando a nevar, era una nevada muy leve, apenas y caían algunos copos. No trataron de buscar a los encapuchados pues ya debían estar un poco lejos. Al igual que cuando llegaron, todo el lugar estaba en silencio, no había nadie allí arriba, era como estar en un pueblo fantasma.

    Xain se sentó en el suelo, cerca del agujero, seguido de Zack y de Alt.

  —¿Que haremos entonces, Sub? ¿Esperamos aquí?

  —Supongo que eso tendremos que hacer...

  —Debe haber algo que hacer... —Susurró Zack.

  —¿Y si caminamos un poco? —Sugirió Alt.

  —¿Caminar? ¿En dónde, al rededor de la mina? —Reprochó Thawne.

  —Podemos caminar entre los árboles un rato, y luego regresar, creo que tenemos suficiente tiempo.

  —Señor, es mejor idea que quedarnos aquí...

  —Si, Sub, ¡Aquí no hay nadie, ni nada!

  —¿Entonces iremos a caminar, Señor?

  —Podemos perdernos entre los árboles y la nieve, en especial si comienza a nevar con más fuerzas.

  —Yo puedo marcar el camino que tomemos, así sabremos cómo regresar siempre —Insistió Alt.

    Thawne se giró y les dió la espalda, caminó un poco y volteó a ver a los chicos por sobre su hombro.

  —¿Que esperan? Apresúrense.

    En el "bosque" todo parecía ser blanco, debido a la nieve, a la espesa niebla y al cielo bastante nublado, lo único que parecía tener un tono diferente eran los árboles de los que el lugar estaba repleto, sus troncos oscuros generaban un pequeño contraste con todo lo demás del lugar, sus hojas, de un verde grisáseo, estaban cubiertas a más no poder de nieve, que parecía estar a punto de caer. Los cuatro caminaban uno al lado del otro por entre la nieve, la cual les dificultaba un poco el paso (Pues los centímetros de espesa nieve que cubrían el suelo les llegaban hasta casi las rodillas). Habían dejado sus armas en la mina para caminar mejor, además, supusieron que no las necesitarían. Dejaron también sus cascos por lo que ahora podían sentir, al menos en sus rostros, el frío y la nieve de Jedha.

  —¿Por qué se retrasó nuestro transporte? —Preguntó Xain.

  —Averías en varias partes de la nave, los pilotos dijeron que era por el clima. También dijeron que estarían pronto aquí, no podemos tardar mucho.

  —Sub... Tendremos al menos un día de descanso ¿Verdad?

  —Si, creo que mañana será nuestro día de descanso, aunque no estoy seguro...

  —¡Genial, al fin podremos descansar bien!

    Xain levantó sus brazos.

  —¡Piensa rápido! —Gritó mientras se acercó corriendo a Zack, lo empujó y este calló de espaldas en la nieve.

    Xain, de pie, comenzó a reír mientras miraba a Zack en el suelo. Cuando iba a girarse, una bola de nieve golpeó la parte de atrás de su cabeza, llenando su cabello de nieve, Alt le había arrojado la nieve. Zack se levantó a rastras del piso y en cuanto pudo tomó un puñado de nieve y la lanzo hacia Xain. Los tres jugaron con la nieve, arrojándoselas unos a otros mientras reían, hasta que una bola se desvío de su camino y golpeó al Suboficial. Los tres se callaron y dejaron de jugar, Thawne se acercó lentamente, de brazos cruzados, a ellos, se agachó un poco, tomó bastante nieve entre sus manos y con todas sus fuerzas se la arrojó a Zack. Por un momento todos permanecieron en silencio, hasta que volvieron a reír y reanudaron su pelea de nieve.

  Mientras jugaban se dividieron en dos equipos, Thawne y Alt lanzaban nieve desde un lado mientras Zack y Xain lanzaban nieves desde el otro extremo. Pronto se convirtió en una pequeña "simulación" de una batalla real, cada uno tomó cubiertas y lanzaba nieve desde esos lugares. Xain se escondió detrás de un árbol, Zack por su parte se lanzó por sobre una piedra para caer detrás de ella y así contar con su cobertura. Cuando cayó, un poco de nieve entró en sus ojos, en ese momento se sintió un poco extraño, como si estuviese mareado. Tomó un puñado de nieve, se levantó y se dispuso a lanzarla, pero al buscar a su objetivo notó algo extraño. No había nadie con el.

    Caminó un poco, en dirección a donde la pelea había comenzado. Las marcas de sus presencias estaban en la nieve, pero no podía ver a sus compañeros en ningún lado. Siguió caminando pero esta vez en dirección a la roca, vió las marcas de su caída y luego de examinarlas un poco regresó sobre sus pasos. Mientras iba de un lado a otro puedo notar algo, todo parecía moverse un poco más lento, además, respirar le costaba un poco. Se quedó de pie en medio de la nieve, veía a los lados obviamente confundido, «Si se fueron, no deberían estar muy lejos» Pensó para si mismo, tratando de resolver sus dudas «Bueno, aún si estuvieran un poco lejos yo podría verlos, nuestros trajes son negros y todo el ambiente es blanco». 

    Siguió pensando un rato, estático, hasta que sus pensamientos se vieron interrumpidos por un movimiento en la nieve. Frente a el, como si nada, una persona comenzó a emerger lentamente del suelo, mientras se levantaba la nieve caía de su cuerpo hasta el piso. Cuando salió por completo caminó hasta estar más cerca de Zack, quien lo reconoció al instante. Si no era uno de los hombres misteriosos en la mina debía tener alguna relación con ellos. El hombre apoyó una rodilla en el suelo, y levantó sus manos, en ellas sostenía una fruta bastante verde.

  —Llamanos... cuando estés listo, Zack —Le dijo.

    Zack tomó la fruta, y la vió por un momento. El hombre se levantó de nuevo.

  —¿Dónde están mis compañeros?

  —Para volver a verlos solo debes cerrar tus ojos cuando yo me vaya... Estaremos esperando por ti.

    Así como apareció el hombre se fue como un fantasma, atravesando la nieve como si estuviese bajando unas escaleras. Nunca pudo ver si rostro, pues debajo de su capucha todo estaba demasiado oscuro como para poder observar algo. Zack regresó a la roca, se sentó lentamente y apoyó su espalda en ella mientras jugaba con la fruta en sus manos. Cerró sus ojos un rato, y al abrirlos se encontró en el transporte. Thawne, Alt y Xain estaba al rededor de el, mirándolo.