Era De Amor Y Paz

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Capítulo final
Todos iban en camino a la Villa Andrew en Escocia , todos los pobladores salieran a recibirlos, como era de esperar al ser de la nobleza debían presentar a su familia, así que antes de llegar se habían ido a un hotel para descansar un rato y luego cambiarse de ropa, afuera los esperaría una carroza dorada, llena de almohadones y con un cochero muy bien arreglado, lo halarían cuatro caballos, los Grandchester también harían lo mismo ya que sus villas quedaban cerca, eran vecinos, la diferencia es que su carroza era blanca, las damas estaban muy nerviosas pero a medida pasaban Candy saludaba haciendo una demostración de dominio, se le notaba su elegancia  que su sangre noble había heredado.
A una así noto que varias mujeres que parecían nobles las miraban mal, seguro que deseaban estar en su posición y así era ahora estaban dispuestas a levanta la voz proclamando una ley ancestral ya olvidada en la que los patriarcas podían no casarse pero si tener concubinas para guardar su legado, ya tenían todo el dominio del tema, pero para esto la esposa o solo tenia niñas o  no podía tener ningún hijo; cuando vieron al pequeño y que llevaban a otros envueltos en una sabana azul en sus brazos se vieron frustradas y a desestimar la opción claro que mas de uno lo quería seducir pero no contaban que Albert solo tenia ojos para su esposa.- Así fue emprendiendo cada ves mas negocios en conjunto con Terry, todos Vivian felices colocándoles hijos a sus mujeres como conejos  no les daban respiro, pero les encantaba que no perdían su escultrural figura, solo sus caderas se habían vuelto mas anchas y sus pechos mas pronunciados, cosa que a ellos no les molestaba.
La vida transcurría en Paz y alegría al final las esposas de los Lores Andrew y Grandchester fueron aceptadas y amadas por todos ricos y pobres, dos mujeres nobles que no se creían más que los demás a pesar de su posición no hacían distinciones y tampoco se creían más que los demás “ dos mujeres virtuosas y solidarias” eran las habladurías que corrían de ellas y llegaban a la corono se sentían afortunados al haber abierto sus brazos y no interpuesto en el camino de esos matrimonios. Habían resultado una bendición para las tierras que administraban los duques eso les hacía sentirse más tranquilos.
El tiempo pasaba volando y las villas se llenaban de niños, no solo los hijos de Albert y Terry que ya eran muchos, a decir verdad las chicas les pusieron un alto cuando llegaban al octavo, así que decidieron operarse para no tener más hijos, porque sabían que si se dejaban sus hombres las harían seguir teniendo mas y a un que ellos les ayudaban muchas veces sus responsabilidades los absorbían a un que jamás los descuidaban tampoco podían ayudar por completo así que era mejor evitar mas niños pues ellos aparte de cuidar de su familia tenían la responsabilidad de velar por el pueblo al que sus esposos dirigían.
La vida les estaba regalando paz y felicidad, después de tanta angustia vividas y muchas veces estar a punto de perder la vida, al fin la vida le estaba jugando una buena cara.
Después de algunos años ya cuando había cambiado la cara de Japón después de mucho esfuerzo, poco a poco se iba convirtiendo en una potencia, después de estar en la ignominia se levanto con mucha perseverancia y persistencia, con el tiempo Candy y Albert llevaron a sus hijos a conocer sus raíces, las raíces de su madre, estaban encantados al ver su herencia histórica, por su sangre corría una gran combinación de sangre real, pero su nobleza no solo corría por sus sangres si no que eran muy nobles, nobleza heredada por sus padres, el amor al prójimo y la lucha por la justicia, el bienestar de los demás, si la vida transcurría al fin en paz y armonía, la felicidad se miraba por los poros, sus activos crecían y se reproducían sus clanes estaban en la opulencia, llevándolos no solo a ser los principales pagadores de divisas a la casa real de Inglaterra, si no que eran la principal fuente de trabajo de Escocia, a Albert le habían puesto el sobre nombre de Midas, porque decían que negocio que abrían prosperaba. Su vida transcurrió llena de paz, amor, felicidad y lealtad; problemas tenían igual que cualquier pareja, pero siempre sabían cómo solucionarlos.

Nunca hubo punto de quiebre en esa relación que supo vivir de entre las cenizas de una cruel guerra.

fin

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⏰ Última actualización: Nov 08, 2021 ⏰

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