III. Iba tan bien

763 55 34
                                    

Zhongli se dió cuenta que no era la puerta correcta para personal cuando el pasillo se volvió más largo de lo que recordaba, lucía muy descuidado y las luces estaban muy viejas al parpadear tanto, quizá por puro orgullo debería regresar a su asien...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Zhongli se dió cuenta que no era la puerta correcta para personal cuando el pasillo se volvió más largo de lo que recordaba, lucía muy descuidado y las luces estaban muy viejas al parpadear tanto, quizá por puro orgullo debería regresar a su asiento y pretender que nada pasó, pero estaba en el teatro para ver a alguien, no iba a irse sin lograr su objetivo, no después de sentirse como un ladrón escabulléndose por ahí, continuó caminando guiándose por el olor a pizza que se percibía en el ambiente, llegando frente a otra puerta que marcaba staff, se dijo que si abría y no estaba, bien puede decir que se perdió, y no era mentira.
Al girar el pomo, incluso si ya había comido, sus tripas se retorcieron ante el exquisito aroma de la pizza en medio de los jóvenes orquestantes, estaban reunidos en esa pequeña sala comiendo muy alegres sin notar su presencia, cosa que en realidad agradece porque no era muy sociable y le ponía de mal humor.

— ¿Zhongli? Que sorpresa — El alto tragó en seco escuchando esa voz a su espalda, al girarse sin soltar el pomo de la puerta pudo ver de nuevo a Venti tan de cerca, tenía un maquillaje de escarchas y estrellas a penas visible alrededor de sus ojos y eso se le hizo muy tierno, porque el menor era tan chiquito. Parecía un idol chiquito, iniciando con eso y terminando por su cabello peinado cuidadosamente, llevaba también un pequeño prendedor de flor de cecilia arriba de su oreja izquierda.

— Hola, pasaba a saludar, pero veo que me hallaste primero — Respondió con una sonrisa amable sin despegar su mirada del otro, haciéndolo cohibir más ¿Es que acaso no sabía lo mucho que su mirada ponía a temblar al menor?

El de trenzas sonrió tímido asintiendo dando un paso dentro de la habitación para que Zhongli pudiera cerrar la puerta e impedir que el aire frío entrara más.

— Estabas caminando por la salida de emergencia, casualmente venía atrás tuyo — Se encogió de hombros viendo por su costado al resto de chicos comiendo sin él. — ¿Quieres comer con nosotros? Podemos platicar mientras comemos, de verdad tengo hambre.

Zhongli desvió su mirada después de eso, su corazón de piedra estaba latiendo tan duro viendo al menor quejarse de hambre con un abultamiento de labios, con esos esponjosos labios que en realidad no debería estar deseando besar, no cuando su preciosa novia lo esperaba ya en casa de seguro, con una cama tibia y muchos besos. Una bofetada era lo que le hacía falta, sí.
Asintió a la oferta algo incómodo por no conocer al resto de gente.

— ¿No viene tu novia esta noche? — preguntó el bajo como quien no quiere la cosa, sin mirarlo, caminando frente a él hasta sentarse en un taburete acolchado y jalando otro para él.

— Sí, la linda chica amiga de Jean — Mencionó alguien más entre la multitud y Zhongli sudó frío quedándose quieto. Porque había olvidado ese pequeño detalle: Jean.

— Eh, no, ella estaba ocupada con otras cosas — Respondió en con un tono ligeramente más alto para que le escuchara esa persona mientras tomaba asiento. — Por cierto ¿Ella no está aquí? — Su mirada recorrió al resto de personas dentro de esas cuatro paredes buscando una coleta rubia. Y su mirada chocó con varias personas, pero no la que buscaba.

What if i said - ZhongVenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora