༒Capitulo 2༒

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Hestia

Estoy nerviosa, estoy muy nerviosa. Todavía no he llegado a instituto y ya me tiemblan las manos.

—¡Tia se nos hace tarde!—grita Be. Hoy se vino más escotada de lo normal, y siento el por qué.

Mamá sale de la casa y nos metemos al auto.

—¿Y eso que vienes tan guapa el día de hoy?—le pregunta mi madre a Bi.

—Para conquistar a un chico—dice entusiasmada.

—Apuesto que cuando te vea quedará rendido a tus pies—digo con un tono de sarcasmo que mi madre y prima entendieron perfectamente .

Después del viaje de 15 minutos en auto por fin llegamos al instituto. Me bajo de golpe sin despedirme de mi madre. Busco con la mirada a mis dos mejores amigos.

—¡Mira rápido!—oigo que me dicen a mi espalda y me agacho al instante.

—Te dije que se daría cuenta—le oigo decir a Eliot.

—Ella tiene poderes, lo se, estoy muy segura—murmura Kiara haciéndome reír.

—Si fueras un poco más discreta con tus pasos, probablemente me hubieras dado mi cabezazo—digo mientras caminamos hacia el interior de la escuela.

Mis mejores amigos y yo tenemos un juego desde los 10. Si estas despistado, manotazo en la cabeza te has llevado. Kiara es muy ruidosa en cuestión de caminar, así que es muy fácil descubrirla.

Parece un juego brusco, si, pero cada quien con sus juegos y opiniones.

—Dicen que ya llego a la escuela—dice Eliot mientras nos paramos en su casillero.

—Pero yo fui una de las primeras en llegar a la escuela y no lo vi—aclara Kiara.

—Tu eres muy despistada Kiara. Si una cucaracha pasa justo a tu lado, te apuesto a que no te darás cuenta—río y recibo un empujón de su parte.

Eliot guarda unos cuantos libros en su casillero y lo sierra—¿Tienen sus horarios?—pregunta el.

—El mío me lo paso mi madre—digo

—Yo no. ¿Me acompañan?—nos pide Kiara.

Después de caminar por los pasillos durante un buen rato conseguimos el horario Ki. Nos tocaron varías clases juntos, eso es lo bueno, pero la primera clase de hoy solo la tengo compartida con Eliot.

—No es justo, ¿¡acaso pagaron para tener su primera clase juntos!?—dice indignada Ki haciéndonos reír a ambos.

—Posiblemente te toque con el sexy, hermoso, papi rico de Ciaran—dice Eliot haciendo que deje de sonreír.

—¡Mira se puso celosa!—dice Ki mientras me señala.

—No estoy celosa, es solo que mi prima podría estar rondando por acá, y si escucha las atrocidades que están diciendo del chico probablemente le diga a mi madre que soy una mente del demonio.

—Ella no puede decir mucho, se ha acostado con media escuela—murmura Eliot.

—Si, pero ella es ella y yo soy yo. Mi madre no me trata de la misma manera a la que la trata a ella

—Por dios Hest, tienes diecisiete años, tú madre debe estar más que consciente que hablas de sexo con tus amigos—mofa Kiara.

El secreto de CiaranDonde viven las historias. Descúbrelo ahora