Duras decisiones

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"MAGNÍFICO!"

"MARAVILLOSO!"

"SOBERBIO!"

Los chiflidos y aplausos por parte de la tía Lía hacen que la pequeña Cass se calme un poco porque estaba a punto de golpear a Sebastián hasta cansarse.

"Sigue mi hermosa niña, por favor sigue!"

"No debes dejar que todo lo que piensas se pudra dentro de ti!"

"Además, me imagino que le diste oportunidad a Sebastián de marcharse."

"Es más estoy casi segura de que le dijiste un par de veces que se fuera pero él decidió quedarse."

"O me equivoco?"

Sebastián yace en el suelo observando a las tres bellas y dominantes mujeres que lo miran de diferente manera.

El halo malévolo que se desprende de la tía Lía es sobrecogedor.

La mirada de compasión de Elisbeth hacia el chico lo hace sentir miserable, pero la mirada todavía entre enfadada y decepcionada de Cass, es la mirada que más aflige al chico.

"Lo hice pero se quedó."

Responde por fin Cassandra con voz más tranquila.

"LO SABÍA!"

La tía Lía ríe tan femeninamente como lo haría una demonio mujer al tener a su indefensa presa entre sus garras.

"Entonces, Sebastián debe soportar el peso de sus decisiones, hayan sido buenas o malas,"

Elisbeth se sienta en el sillon mirando la escena mientras la Lia tambien se sienta al lado de ella.

"Sigan por favor."

"Decías Cass..."

La jóven escucha las palabras de la hermosa mujer mirando a Sebastián a quien tiene a su merced.

"No vales la pena, ni mi tiempo, ni mi esfuerzo."

"No sabes cuanto lamento haberme fijado en ti."

"Creí que si pasaba tiempo contigo en verdad podrías llegar a quererme, a amarme, eso lo único que quería, sabes?"

Sebastián no puede moverse y ni lo intenta.

El joven casi puede sentir al arma apuntandole directamente a la sien.

Arma que sostiene descuidadamente la tía Lía en sus manos, jugando con ella como si fuera algo inocente...

"Incluso en mis momentos de debilidad no me hubiera importado rogarte para que me amaras, pero sabes que?"

"Ningún puto hombre jamás se atreverá a decirme que soy nada!"

"Que solo soy hija o hermana de alguien importante y por ese solo motivo se acercan a mi!"

"Como si estar conmigo les abriera el camino hacia un mundo mejor, pero se toparan con pared."

"NADIE ME MERECE!"

"NADIE JAMÁS PODRÁ TENERME!"

"Todos los hombres, menos el tío Sten, mi padre y mis tíos, son todos unos putos de mierda."

La tía Lía ríe cuando escucha a la jóven decir el nombre de su esposo en primer lugar.

Si la joven Cass supiera lo que ella sabe de Sten.

No cabe duda de que la juventud es tan linda e inocente!

"No me interesa lo que tengas que decirme, porque se que todo lo que dirás serán puras mentiras ensayadas para que crea que sientes algun tipo de remordimiento por lo que hiciste."

Prohibido Amor de un CEO. Tercera ParteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora