Omicron, el Comandante del Caos (Un fanfic de Percy Jackson) Traducción

Capítulo 13

[Descargo: Nada es mío, yo solo traduzco]

[Disclaimer: None of this is mine, I just translate]

Este capítulo va dedicado a May_ Bashira por ser la primera en contestar correctamente a la pregunta.

Nico POV

Estábamos todos sentados alrededor de una mesa en el Búnker Nueve, dado que Ómicron había destruido nuestro lugar de reunión normal, pensando en cuánta gente acabábamos de perder. Nadie en este tiempo estaba acostumbrado a estar en una guerra, sólo los campistas inmortales, ya que la última guerra había sido la guerra Gigante. Hace mucho tiempo no habíamos estado en una posición tan desesperada como lo habíamos estado entonces, ya nadie recordaba lo que era estar en el lado perdedor. Todos nos habíamos sentido a salvo.

Miré hacia la cabeza de la mesa, donde estaba de pie Quirón, sus ojos estaban tan faltos de esperanza, me di cuenta de cuán desesperada era nuestra posición. A este paso no duraríamos otra semana.

—De acuerdo, creo que estamos de acuerdo en que necesitamos ayuda, ¿cierto? —La voz de Lambda vino de la esquina de la habitación, donde estaba recargado contra la pared. Empezó tentativamente, como si tuviera noticias desagradables y no estaba seguro de cómo iba a ir.

—Sí, creo que es fácil estar de acuerdo en eso, —respondió Quirón, luciendo ligeramente aliviado de que alguien más estaría diciendo las verdades difíciles en esta reunión.

—Bueno, tengo una idea, sólo no estoy seguro de cómo funcionará. Pero no creo que tengamos otras opciones exactamente... —La voz de Lambda se fue apagando incómodamente, claramente no disfrutando de su idea en lo absoluto.

Suspiré. —Sólo dinos de una vez. No puede ponerse peor que esto.

—No estaría tan seguro de eso. Los únicos otros aliados en los que puedo pensar son... los romanos.

Simplemente nos sentamos ahí mirándolo, aturdidos. No podía querer trabajar de nuevo con los romanos. La última vez que intentamos eso, ambos campamentos habían sido casi completamente destruidos.

Finalmente, alguien habló. —No estás hablando en serio, ¿verdad? ¿Entiendes cuánta gente perdimos por ellos?

Se encogió de hombros. —¿Ves alguna otra forma fuera de esto? Además, si dos enemigos tienen un enemigo en común, pueden convertirse en aliados fácilmente.

—Sí, eso es lo que dijimos la última vez... —Murmuré bajo mi aliento.

—Estoy de acuerdo, parece ser nuestra única opción, —dijo Quirón seriamente.

Nadie dijo nada contra eso, lo que solo probaba cuán desesperada era nuestra situación, porque estuvimos de acuerdo con un plan suicida tan fácilmente.

—Grandioso, enviaremos un grupo pequeño primero, ¿cierto? —pregunté.

—Por supuesto. Una misión de algún tipo, aunque con el oráculo bloqueado por Vacío, difícilmente califica, pero debe ser hecho. El resto de nosotros construiremos barricadas en nuestra posición aquí y aguantaremos cuanto podamos. Con la División Omega ayudando, podemos hacerlo. Debemos hacerlo, —dijo Quirón.

—Y lo haremos. Junten a algunos campistas para ir y yo juntaré a algunos soldados. La misión se irá mañana en la mañana. El punto de encuentro será en la Colina.

Y con eso, Lambda se había ido, dejando silencio en su paso. Ninguno de nosotros se había dado cuenta de cuán buen líder podía ser porque Ómicron siempre había estado a cargo. Ahora pienso en ello, Lambda también se ve muy familiar...

Quirón se aclaró la garganta. —¿A quién le gustaría ir en esta misión? No hemos tenido que expedir una misión en un rato largo, deberían ser campistas inmortales, así que depende de ustedes.

—Yo iré, —dije inmediatamente—. He sabido de su existencia desde hace más tiempo.

—Si Aliento Muerto va a ir, también considérenme dentro. —Thalía sonrió con suficiencia, retándome a comentar sobre mi sobrenombre... otra vez. Esta vez, solamente le sonreí malvadamente, planeando cómo vengarme de ella por eso.

Miré de regreso a Quirón. —Ahora sólo necesitamos a alguien inteligente que pueda detenernos de matarnos el uno al otro. ¿crees que Annabeth querrá venir?

—Tendrán que hablar con ella, pero ustedes tres serían perfectos para esto. Si no quiere ir, déjenme saber, pero hasta entonces, pueden irse. Y que los dioses estén con ustedes.

Percy POV

—Annabeth. Vamos, despierta.

Cuando finalmente recuperé la consciencia en la enfermería, había encontrado a Annabeth en la silla junto a mi cama, su cabeza descansando en la orilla del catre. Había sonreído, usando mi voz normal y diciendo lo que solía usar siempre para despertarla hacía todos esos años atrás.

Se removió en su sueño, sonriendo ligeramente y susurrando una palabra. Me congelé tan pronto como la oí. —Percy...

¿Qué podía hacer para convencerla de que no era yo? —¿Señorita Chase? —Sí... entre más formal sea, mejor.

—¿Qué...? —Bostezó, parpadeando mientras me miraba adormilada. Una mirada de reconocimiento cruzó su rostro, mientras se enderezaba rápidamente, cepillándose el cabello fuera de su rostro y bajando la mirada, avergonzada.

—Lo siento, comandante Ómicron. No tenía intención de quedarme dormida...

—Está bien. Gracias por quedarte conmigo. ¿Qué está pasando, de todas maneras? Normalmente, mi equipo estaría atacándome verbalmente en este momento por hacer algo tan estúpido.

Annabeth sonrió un poco ante eso. —Probablemente estén en la reunión. Aparentemente, vamos a ir con los romanos por ayuda. No estoy deseando eso.

—Puedo imaginarlo, —murmuro para mí mismo, pensando en todo lo que Caos nos dijo que había sucedido.

—Oigan Annabeth, Ómicron, —dijo Nico, acercándose a mi cama—. Annabeth, se supone que tengo que preguntarte si quieres ir a la misión a Campamento Júpiter. De los campistas, somos sólo Thalía y yo hasta ahora. Necesitamos uno más.

Parecía ligeramente preocupada por haberle pedido que fuera a hablar con los romanos sin un deseo de muerte, pero rápidamente escondió sus emociones. —Por supuesto que lo haré, Nico. Estaré lista en la mañana.

Él asintió y se alejó para decirle a Quirón y Annabeth se dio la vuelta hacia mí. Bajó la mirada y dijo—: Me alegro de que estés bien, Ómicron. Deberías evitar esforzarte de ahora en adelante.

Sonreí ante eso. La misma vieja Annabeth. —Lo haré. —En un impulso, rápidamente tomé su mano mientras se paraba y sólo la sostuve, deleitándome en cuán perfectamente su mano aún encajaba con la mía. Pareció sorprendida al principio, pero luego sus mejillas lentamente se volvieron ligeramente rosas. Me tomó un momento darme cuenta de que seguía sosteniendo fuertemente su mano. Rápidamente la solté y simplemente dije—: Gracias.

—De nada. Asumo que te asegurarás de estar en esta misión, ¿si puedes incluso llamarla así?

—Por supuesto. Te veré en la mañana.

—Nos vemos entonces. —Me sonrió, entonces se dio la vuelta y se alejó, dejándome considerando qué pasaría si le revelaba mi identidad a una persona más.

[N/A La pregunta es: ¿qué hizo Percy en El Ladrón del Rayo que convenció al guardia del Empire State Building para dejarlo subir al Olimpo.]

[N/T Estoy consciente del tiempo que ha pasado y no tengo excusa, más que reiterarles que sí o sí acabaré esta traducción, espero que más pronto que tarde, pero no pierdan la fe.]