-𝔠𝔲𝔞𝔯𝔢𝔫𝔱𝔞 𝔶 𝔠𝔦𝔫𝔠𝔬-

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— ¡No sé de que me hablan! —gritó Myung en cuanto le preguntaron en dónde estaba Seungmin

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— ¡No sé de que me hablan! —gritó Myung en cuanto le preguntaron en dónde estaba Seungmin.

—Claro que lo sabes, él llamó desde tu teléfono.

— ¡No puedo decirles! —gritó Myung mientras uno de los empleados de Kikwang lo tenía agarrado fuertemente del cabello— ¡Ellos van a matarme!

—Y lo mismo vamos a hacer nosotros y de una manera más dolorosa, si no nos dices en dónde está el chico —le advirtieron— Y no solo a ti, lo mismo con tu familia.

—Así que habla de una vez, maldita basura —dijo el otro chico— ¿En dónde esta?

— ¡No sé! —contestó y los chicos comenzaron a perder la paciencia, así que uno de ellos lo golpeó fuertemente con la culata de la pistola en la cara.

— ¡Habla o te juro que daré la maldita orden de matar a tus hijos ahora mismo! —le amenazó y entonces Myung comenzó a sollozar.

— ¡No, no, por favor! —exclamó mientras la sangre de su herida caía— ¡Lo diré!

— ¿En dónde diablos está Myung? —se preguntó Jisung a si mismo, mientras lo esperaba fuera de la habitación— ¡Ese imbécil me va a escuchar!

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— ¿En dónde diablos está Myung? —se preguntó Jisung a si mismo, mientras lo esperaba fuera de la habitación— ¡Ese imbécil me va a escuchar!

Le llamó a su número telefónico nuevo y después de unos cuantos segundos, Myung respondió.

— ¿En dónde te metiste? ¡necesito irme! —le gritó con enojo— Te quiero aquí, ahora mismo.

—Si, jefe —contestó en un susurro, pero Jisung no le importó y colgó.

Entró una vez más a la habitación y miró qué Seungmin se movía de una forma rara, así que se acercó a él y le quitó la cinta de la boca.

— ¿Qué te pasa?

—Quiero ir al baño de nuevo —contestó mientras trataba de respirar con calma y contener las ganas de vomitar.

— ¿Otra vez? —preguntó con fastidio— ¿Para qué?

—Quiero vomitar de nuevo, por favor, déjeme ir —pidió y entonces Jisung le ayudo a sentarse.

oh, daddy ✧ knowminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora