Puede que hayan pasado miles y miles de cosas en este tiempo que he estado desaparecida por aquí, pero por motivos personales no he podido estar aquí antes, pero ya estoy y esta vez para volver más fuerte que nunca.
En este tiempo he aprendido muchas cosas, y aunque no hemos llegado aún a primera, y puede que pase un tiempo hasta que volvamos, pero soy feliz aquí, porque cada temporada pasa algo extraordinario. Puede que no juguemos el play off tampoco, pero la ilusión de los partidos nadie nos la puede quitar.
Pasa el tiempo y todo sigue igual, para algunos puede que incluso seamos como esa lluvia que vuelve a llover, pero nosotros seguimos siendo ese todo que hace casi 10 años, si ya casi van 10, te salvamos de entre el barro para volver a hacerte grande, aunque bueno, eso nunca dejaste de serlo. Y puede que aunque esto sea aún muy extraño, yo nunca jamás lo olvidaré, ese infierno sostenido en el que vivimos, entre insultos y burlas, porque eso es justo lo que nos hace ser más grandes.
Parece que tras mucho esfuerzo, el día había llegado, la felicidad era más grande que nunca, y como me enseñaste, tarde o temprano, pero llegó y aquí estaba, ese día de devolver todas y cada una de las risas y burlas que nos habían gastado. Pasaban los derbis y eran incapaces de ganarnos, de hecho, a día de hoy sólo han sido capaces de ganarnos una vez, y con un robo épico que ronda el racismo, pues sí, se burlaron de Ibra todo lo que quisieron y más, pero por mucho que hicieron nunca nos volvieron a ganar, parece que fue la magia.
Pero eso no es todo, desde que habíamos regresado a segunda, eran incapaces de hacernos daño, pues cada gol que les marcábamos, cada punto que les sacábamos, servía para cerrar una de las viejas heridas de mi corazón, aunque puede ser que no sea el tiempo solo quien cura las heridas, si no también esas pequeñas "motas" las que ayuden. Y es que después de todos estos años y de tanto daño, por fin podíamos vivir la vida como quisiéramos, no podían pararnos ni hacernos nada.
Pero aún queda algo que contar, y es que así es la magia, algo impresionante, y puede que a otros les parezca estúpido pero a mí no, y es que se da la causalidad de que esos goles que les robaron los puntos para entrar al play off, fueron marcados por nuestra gente, por esos jugadores de la cantera que sufrieron lo mismo que cualquier persona, por esa gente que siente de verdad y que los celebra como si no hubiera un mañana, y aunque la vida nos diera un obstáculo más, el no poder vivirlos allí, no pasa nada, porque después de todos estos años, con solo verlos nos conformamos, tampoco somos tan exigentes.
Y parece que ya llegó un nuevo punto y final de una época, parece que sus insultos y risas van sonando a despedida, sepultando este maldito escenario que parecía eterno, y que aquel mal trago se terminó, al menos en una temporada. En el fondo envidio a esos niños que ahora viven todo esto, mientras yo en mi infancia me debía de limitar a vivir con la angustia de si algún día acabaría esta tortura y de si cada gol y cada recuerdo sería una despedida. Pero parece ser que la locura venció a la calma y que después de todos estos años, y de tanto daño, al fin, podemos ser libres y gritar sin miedo, a que nos amenacen con quemarnos vivos, que te amamos, porque esto es una locura, la cual no puede describirse, la cual no puede nombrarse.
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Una historia de verdaderos héroes.
NonfiksiY esta es nuestra historia, las cicatrices ya no duelen, permanecen cerradas, recordándonos el lugar de donde venimos, recordándonos que somos indestructibles, que nuestra historia es interminable.