Antes de ti [completa]

CAPÍTULO 2

AVANI

Cuatro años antes...

-Te juro que me saca de mis casillas—Cerré mi taquilla con más fuerza de la necesaria

-Estás bastante cegada por tu molestia—Se burló Ellie

-¡No es cierto!—Chille llamando la atención de los que estaban a mi alrededor en el pasillo y mi prima enarco sus cejas—Bueno, puede ser

-Te "molesto"—hizo las comillas con sus manos—Durante el primer año

-No es verdad, siempre está ahí mirándome sabiendo que me molesta—Bufe molesta—Nathan es un idiota, no hay más lógica que esa

-¿Alguna vez escuchaste el "los que se pelean de chicos, se casan de grandes"?—Inquirió divertida comenzando a caminar a nuestro siguiente salón

Me quede pasmada en mi lugar asimilando sus palabras con las cejas enarcadas, esa chica debería hacerse payaso, definitivamente cuenta muy buenos chistes.

Camine aligerando el paso para poder alcanzarla, en el camino me cruce con la mirada de Nathan, rodee los ojos y le mostré el dedo del medio ganándome su patética sonrisa ladeada.

-Lávate la boca antes de ponernos a nosotros en ese contexto—Dije mientras me colgaba de su brazo

-Si tú dices...

-Si, yo digo—Contraataque—Hoy saldremos de fiesta, no acepto un no por respuesta

¥

-Papito, me llevaré el auto—Comente en español entrando a la cocina

Sí, seguíamos con la dinámica de los idiomas aunque ya era una mezcla de todo.

Mamá estaba preparando la cena para ellos, papá le hacía compañía, y mi hermano, debía estar en su cuarto escuchando música.

-¿A dónde vas? Debes tener cuidado, pequeña—Dejo su móvil para mirarme

-Iremos a una fiesta con Ellie, si llevo el auto podremos volvernos cuando queramos—Asegure cambiando de idioma—Es en lo de Mia

-Okey—Aseguro

Sonreí y bese sonoramente su mejilla, luego abrace a mamá y subí a mi cuarto para cambiarme.

En mi vestidor tenía ropa bastante variada, me gustaba vestirme bien como mamá, pero también estar cómoda. Tenía varios estilos: informal, formal, skater, elegante, fina y así hasta que se me acaben los pensamientos, pero siempre me acompañaba el elemento de estar pulcra o siempre arreglada.

Me vestí con un vestido corto rojo con puntitos blancos, algunos volados en las costuras y un moño al costado en mi cintura. Calce sandalias abiertas marrones de taco, un poco de maquillaje, específicamente rimel, delineador de ojos y labial nude, y me eche perfume. Deje mi pelo negro con las livianas ondas que se crearon al dejarlo secar con el aire, pero cogí un poco en un moño desarreglado para despejar mi cara y que algunas mechas de mi flequillo caigan hacia adelante.

Cogí mi pequeña cartera marrón, puse mi labial, llaves de casa, móvil y algo de dinero dentro y salí de la habitación. Salude a mis papás antes de montarme el coche, y cuando la seguridad me abrió la verja salí en dirección a la casa de mis tíos por Ellie.

Con Bruno Mars de fondo, tamborilee la canción sobre el volante del Range Rover negro y avance cuando el semáforo me lo indico. Cuando en el estéreo sonó una canción de Justin Biber, llegue a la casa de Ellie.

Aparque sobre la vereda y le envíe un texto para que saliera, al cabo de unos minutos luego de que la guardia le abriera la verja, estábamos cantando en el auto a todo pulmón yendo a una cafetería par cenar hamburguesas.