CAPÍTULO 4- No minimices tu dolor

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𝓔𝓵𝓸𝓲𝓼𝓮

Mamá nos ha guardado tantos secretos de su pasado.

Mamá era de una familia de título Condes. Huyo de su casa cuando conoció en el mercado un joven llamado Claus Vancaster la enamoró y la dejo embarazada; solo dejo una nota diciendo que huía de casa por "amor". La buscaron por meses mis abuelos maternos, hasta que un día la encontraron con un vientre bastante pronunciado...en pocas palabras la desheredaron y le prohibieron ver a cualquiera de la familia para pedir ayuda.

Mamá termina de contar esa historia tan trágica de su juventud, y logró entenderla. Papá era pobre, sin clase, tampoco era el hombre más atractivo de Inglaterra y mucho menos poseía recursos. Pero pese a todo eso fue lo suficientemente coqueto, persuasivo o labioso para conquistar a Mamá.

 Algunas diríamos que los hombres son algo brutos o toscos, pero que va, esas alimañas son inteligentes, capaces de hacer cualquier cosa para meterse bajo las faldas de una mujer.

Por otro lado, considero que tal vez Claus si se enamoró de ella. A lo mejor estaba tan loco por Mamá que no se pudo contener y paso. Supongo que cuando estás tan enamorado haces ese tipo de locuras: haces el amor, huyes, te embarazas y terminas viviendo en una granja con el hombre que crees que es el amor de tu vida. Mamá contaba que Claus era un hombre honesto, amoroso y tan a merced de las necesidades de Mamá, con los años perdió su centro.

Me imagino que muchas cosas son así en la vida, sobre todo en el amor. Arriesgamos tanto porque pensamos que iba hacer un amor para siempre, un amor que ni con los años se iba a disipar. Pero al final alguno de los dos cambia, y te das cuenta que a veces el amor no es suficiente.

Eso paso con Mamá, mamá ama a Claus como la primera vez que lo vio en el mercado, pero su amor nunca fue lo suficiente como para arreglar a alguien torcido como él. Y es triste, mamá se quedó en el pasado lo idealizo tanto que la persona a la cual ama ya no existe.

Espero nunca casarme, si mi destino es terminar tan sumergida en el ayer como mamá. Enamorada de un fantasma. Se siente un silencio absoluto, veo a mis hermanos, todos están procesando lo que Mamá y Adele contaron.

Adele se ve una mujer agradable, creo que era la hermana favorita de Mamá. Ella sonríe y noto que tiene una cicatriz visible levemente en su mejilla izquierda. Me pareció algo curioso, ¿una mujer refinada, de buena familia y casada con una cicatriz en la cara?, las chicas aristocráticas tienen que estar puras desde la cabeza a los pies, inclusive hasta para las pobres tenemos que tener ese requisito.

Ella percibe mi mirada, me sonríe, yo hago lo mismo - ¿Cómo te llamas, linda? – siento que todos me miran esperando a que responda, trago grueso y miro a Adele.

-Eloise-

Ella voltea en dirección hacia mamá y se ríe –Siempre te gusto el nombre de Mamá-posa su mirada en mi hermano mayor- ¿Cómo te llamas tu jovencito? -. Esta vez se dirigía a Archibald.

-Archibald Charles Vancaster Taylor-

Adele se tensa al escuchar el nombre de Archibald y lo mira con adoración, en ese momento mamá se apresura a hablar –Como verás Archi no se parece a él, como fue mi primer hijo me parecía considerable que se llamará como él, ¿no crees? -

Adele suspira – Sí me parece correcto, Archibald tienes el nombre de un gran hombre de la familia, siéntete honrado de poseerlo - le dedica una gran sonrisa. Gira su mirada hacia Colin y Will.

-Ellos son mis gemelos, tiene 17, son los menores de la casa. Se llaman Colín y Will.-

-Bueno, todos son hermosos, le diré a Glynis que les asigne sus habitaciones, hay espacio para todos-

La mucama mal educada se llama Glynis, y nos guio a cada uno a una habitación. Cuando me asignaron la mía dudé en entrar, pero cuando lo hice me sentí abrumada esta habitación es la mitad de mi antigua casa. 

Solté un silbido al ver lo delicada, refinada y lo bien organizada que era esta habitación. Era de un color rosa pálido, con adornos plateados, tanto en las paredes como en la cama. Estaba embelesada observando cada detalle, me sentía como una basurita, yo estaba toda llena de tierra por la granja no quería ensuciar nada.

Alguien abre la puerta, me volteo rápido, y suspiro al ver que es Will- ¿Qué pasa? –

-Nada, solo quería chismosear-

Me rio y le hago una seña para que pase, el entra dando saltos. –Eloise, que bella habitación es igual de grande que la casa-

Cuando el menciona nuestra casa, siento una punzada en el estómago y en el pecho. Me toco el corazón y logro ver que Will me mira enarcando las cejas. Yo me hago la loca, volteo para otro lado.

-Conmigo no puedes hacerte la fuerte, sé que te duele el corazón. Lo tienes tan agrietado y roto como todos. No perdimos algo insignificante, no minimices tu dolor en mi presencia-.

Miro a Will con nostalgia, mis labios esbozan una pequeña sonrisa. De todos mis hermanos, Will era sabio, dulce, sensible y respetaba los sentimientos de los demás. Le di un golpe en la nuca con suavidad- Esta bien tonto, solo que mi trabajo como hermana mayor es ser fuerte. Tengo que verme fuerte, no importa que tan afectada me vea-.

-Mamá nos debe muchas explicaciones ¿eh? –

-Tantas mentiras...estoy intentando procesar todo-

-Mamá era una dama...- dice en un tono más bajo de lo normal.

-Sí, y por un amor fallido la desheredaron. Espero que ninguno de los cuatro cometa esa estupidez. - digo seria

-Ya ¿para qué?, si nuestra herencia se la robaron. Ni si quiera pudimos cometer una estupidez. Hasta para ser desheredado es un lujo que ni los pobres tenemos -. Hubo un momento de silencio, pero estallamos en risas. Esto era verdad, nuestra herencia se la llevaron unos jugadores, ni medio chance de cagarla para poder tener el lujo de ser desheredada. Es mejor reír que llorar, ¿cierto? . 

En ese momento entra mamá, paramos de reír y se nos queda viendo con dulzura.

-Will necesito hablar con tu hermana, un momento-. Se le queda viendo a Will, él entiende y sale de la habitación, mamá cierra la puerta para tener más privacidad.

-Ya sé por dónde van los tiros, y no me gusta nada- pongo los ojos en blanco

-Eloise...- mamá intenta calmarme, pero eso es un intento fallido, porque estoy a punto de explotar en 3,2, y ....

-No, ya basta, él día de hoy he recibido mucho. Perdí mi hogar, perdí mi vaca, mi normalidad. Ahora resulta que tú eras alguien de Elite, tengo una tía rica y con estatus, mis hermanos y yo somos unos bastardos desterrados, ¿ahora vienes a lo que es ahora mi nueva habitación a pedir que te comprenda?, ¡al diablo, mujer! -

-Esta bien, estas en todo tu derecho de estar molesta al igual que tus hermanos, ¿pero, a donde íbamos a vivir?, pese a que estoy exiliada de mi propia familia, no podía dejar que mis hijos durmieran en un puente. Adele es la hermana, ella me ayudo en varios momentos y a escondidas de mis Padres. -

-De acuerdo, solo que...ya no quiero más secretos, quiero mi vida de antes-

Mamá acaricia mi cabello revuelto y coloca mechones detrás de mi oreja –Lo sé, preciosa. Pero por ahora esto es lo que te ofrezco, prometo no volver a guardar secretos-. Me da un abrazo y se va de la habitación.

¿Qué se supone que haré con mi vida ahora?, no les pasa que se han planteado una vida distinta y cuando transcurre los días y ciertas eventualidades cambian por completo sus planes y se dicen "Esta no es la vida que imagine", bueno así me siento, estoy viviendo otra vida.

Empiezo acomodar mis pertenencias, cuando ya termino me quedo en medio de esta habitación tan grande, me siento tan triste, sola y recuerdo mi hogar, ¿cómo estará Hortensia?, esos malditos no la tratarán bien, sin darme cuenta tengo la vista nublada, me siento en lo que ahora es mi cama, y me tomo la libertad de llorar un rato.


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Hoy tendremos doble dosis de nuestra dulce Elo.

Así que...¡Doble actualizacióoooon!, ¡correle, chama!

Jack y EloiseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora