CAPÍTULO 17- Tú y Elo hacen buena pareja

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𝓙𝓪𝓬𝓴

Esta es la quinta taza de té que llevo, tengo rato esperando a cierto mini demonio por aquí. Aunque disfrute de la compañía de las Srs. Taylor, estoy impacientándome por no ver a Eloise en ninguna parte. Sé que debe estar molesta, no fue una escena linda la que vio con Scarlet. No quiero que malinterprete mis cosas con ella.

Scarlet se puede decir que fue una aventura. Es hermosa, de buena familia y folla de un bien que te quedas con más ganas, pero nunca me enamoré de ella, yo se lo advertí. Yo le dije que no soy de esos que va a venir un día llevarle flores, no le iba a invitar a caminar por la plaza, ni tampoco le iba a pedir matrimonio. Ella se enojó, me odio por un tiempo y después volvió queriendo solo ser mi amiga con beneficios.

Desde que llego Eloise, no la he buscado. No sé por qué, pero mi mente ha estado al 100% enfocada en una persona enana y refunfuñona. Quise venir cuanto antes, lo que paso ayer me dejo pensando, besarnos fue un error (delicioso) pero un error que puede malinterpretarse y no quiero que ella salga lastimada. No se merece esa clase de mierda.

Escucho que alguien abre la puerta, pasos firmes se acercan a nosotros. Mierda, ya llego. Me está mirando y sinceramente no es nada lindo. Si sus ojos fueran un revolver yo estuviera muerto en este instante.

-Tú- dice señalándome. - Afuera-

-Eloise- la reprende su mamá

Adele sonríe nerviosa y dice - ¿Por qué no vienes a tomar una taza de té con nosotros, linda?

-No- espeta- Jack, afuera. Ya- articula cada palabra lento y con índole amenazante. A la única mujer que le temo cuando está molesta es a Rose. Pero ahora creo que tiene competencia.

Yo me disculpo con las señoras, camino para afuera de la casa. Ella me sigue, cierra la puerta tras de ella. Y es como si fuera una explosión.

- ¿Y tú qué coño haces aquí, ah?, ¿No estabas muy feliz con tu amiguita? O ya sé, vienes a besarte conmigo, ya que ella no te fue suficiente-

Si el infierno existe los ojos de Eloise lo son. Pareciera que estuviera en llamas.

-Hey, yo no hice nada con Scarlet- me excuso

-Oh claro, él beso de bienvenida ¿qué? -

- ¿Estas celosa?

- ¡Tú eres imposible, Jack! - me grita exasperada - ¡Fue un puto tropezón todo lo de ayer, fue un desliz haber tan si quiera recostado mis labios en los tuyos-

-Pues ayer cuando te estaba besando como un loco no te estabas quejando- respondo molesto

Ella abre la boca asombrada e indignada –Retracta eso. Ya-

-No, recuerdo que una señorita ayer me dijo que tenía ganas de besarme. Y yo tenía ganas de besarla- ella se queda muda, sonrojada. Yo desvío mi mirada hacia sus labios, lo cual fue un error porque ahora la quiero besar y no de manera tierna. – Sí tenía ganas de besarla. Pero eso no significa que se vuelva a repetir, Eloise. No volverá a pasar. Yo no estoy jugando contigo, tampoco quiero que pienses que lo de ayer fue un juego, porque no lo fue, si pudiera repetiría ese momento mil veces. Pero te doy mi palabra de caballero, que jamás te volveré a besar- Ella se me ve ¿triste?, pero antes de que la enana diga algo más o estalle otra vez me doy la vuelta y me voy.

Me siento extraño, nunca me había peleado con una chica. Camino sin rumbo por un momento, hasta que recuerdo que por aquí cerca vive alguien de mi entera confianza. Necesito hablar con alguien sobre esto, yo no entiendo porque me siento así con ella. Cuando, ella se ríe, enoja o llorá, produce algo dentro de mí que es...raro. No se siente desagradable, pero aun así me deja pensando.

Jack y EloiseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora