¡Dulce asistencia! -Kookgi-

𝟙𝟚

Tú eres perfecto para mi... sin duda está frase estará presente en toda la historia.

—No lo entiendo, solo quiero irme— yoongi estaba tan decidido a salir de ahí que habló sin siquiera tartamudear—

—Tu serás mi pensamiento, mi cómplice, mi mano derecha, mi empleado favorito... ¿como lo dice Namjoon?— Jungkook se acercó a yoongi, acorralándolo en el rincón más obscuro, tomó la palabra nuevamente— tu serás mi asistente, solo mío—

El escalofrío de Yoongi se notaba a kilómetros.

—Anota en esa cabeza— tocando sus hebras rizadas, jungkook siguió— que Jeon Jungkook no es Kim Namjoon, quieres un dios para quien trabajar... yo puedo serlo, le fallaste a él... conmigo no vas hacer eso— Las palabras eran solamente susurradas, pero yoongi sentía la voz de jungkook hasta dentro de sí mismo— no estás en el cielo, no hay bienestar y dulzura en el aire, tu trabajo ahora es diferente, si estás aquí lo sabes... déjame ver si eres lo que necesito Min Yoongi—

¿Yoongi estás seguro de meterte en la boca del lobo, quien no dudará en sacarte los ojos si tus alas no son ocultadas?

—Namjoon ¿donde está yoongi?—

Ahora si había un problema, yoongi estaba despedido, tanto fue el alboroto y la decepción que Dios guardó que ni siquiera veló por el bienestar de uno de sus ángeles, ni siquiera de su ángel.

No respondió a la pregunta.

—Nam... por favor, dime ¿donde está?—

Sus ojos se vieron hasta abajo, intentando evadir la pregunta el ser celestial bajó su cabeza.

—Lo siento— un sin fin de preguntas atormentaban la cabeza de sunmi, aquella madre solo quería tener a su hijo en brazos nuevamente, sanar sus heridas con besos y calmar su llanto con amor—

Al no recibir más respuesta que esas tan simples, dando la vuelta, salió de la oficina. ¿No se supone que el cielo es un lugar de paz?

—¡Te dije, moonbin!— los gritos para nada amigables de un Taehyung se escuchaban en toda la casa— Estoy como matraca vieja, repitiéndolo—

Jisoo y Jin escuchaban atentamente el regaño, nadie decía nada ni defendían al muchacho que era regañado. Moon Bin era un joven de tan solo 16 años, su pulcra sonrisa brillante era causante de miles infartos al segundo.

Tanto así que por enrollarse con la señorita de matemáticas... fue expulsado del colegio.

—Una aventura es más divertida si huele a peligro, dijo mi amigo íntimo el Romeo Santos— un zape a la cabeza del joven llegó por parte de su madre—

—No voy a estar contigo toda la vida bin... Los Ángeles guardianes solo tenemos una misión y si fallamos en ello —Taehyung cerró sus ojos, intentando esquivar el mal sabor— las consecuencias son graves—

—¿Que tan graves?— borrando su sonrisa juguetona, moon bin pregunto asustado—

—Muy graves...— simplemente el ángel era negado de una segunda oportunidad, su misión era velar por aquella persona que se le daba para toda la eternidad, sino cumplías o hacías bien tu trabajo... eras reemplazado—

Hasta en eso, no había ninguna redención.

—¿Y que haremos?— no quería admitirlo, pero las palabras de tae calaron muy adentro del joven— No te va a pasar nada ¿verdad?— con miedo preguntó— ¿¿Verdad??

Seokjin reía a carcajada limpia, después de todo Taehyung era un ángel excepcional, no más que su yoongi pero... entendemos el punto.

—Eso fue extremo— jisoo yacía enojada en el sillón, mientras los dos hombres reían por lo sucedido— son unos tontos—

Tal vez tae si se había pasado de la raya. Lo del reemplazo era verdad pero las pequeñas faltas que haga moon bin en su adolescencia no afectan mucho, lo potencial es su madurez, ahorita tenía una condición llamada "la edad del burro" lo que hacía justificada sus acciones.

—El tiene miedo a perderte, Taehyung— jisoo estaba muy molesta por lo que había pasado con su hijo— y tú burlándote de sus sentimientos— pero en parte bin si se lo merecía, ella estaba de acuerdo—

—Saben que yo jamás dejaría que me separen de él, pero necesitaba medidas drásticas— no estaba bien que él se tomara las cosas tan ligeramente—

—Por cierto, dejando de lado que le dejaste un trauma a mi hijo...— jisoo se aguantó las ganas de darle otro zape a su esposo— ¿Donde está yoonie?—

—Trabajando con el demonio, en el infierno— tomando un buen trago del vino compartido, sonrió—

Jisoo y seokjin escupieron todo lo que tenían en la boca.

¡Salud!

Sus comentarios alegran mi alma siquesi.
Las actualizaciones han estado lentas pero esto de tener clases ya presentes, me tiene loca... al parecer ando luchando por no quedarme en idioma pero- soy malísima en el inglés y AAAAAAAH

Este es como mi lugar seguro jsjs.
Los amo. Hasta la próxima.

Min_aguacatito.