Relatos del Cosmo Oculto.

Introducción: Un Rostro Nuevo.

Hey, alto ahí.
Tu no eres de por aquí ¿cierto? Rayos, es la primera vez que veo a un tipo como tú por estos alrededores.

Pero hey, tranquilo, no te estoy acusando de nada. Es de esas pocas veces que recibimos un visitante que no se haya establecido ya en la memoria de todos los que habitamos este lugar.
Dreamland es un lugar bastante bello, ¿no es así?
Y antes que lo preguntes, mejor guardate la cuestión sobre qué es Dreamville. Si nos damos el tiempo (quizás, muy a futuro) es una cuestión que podremos resolver y hasta podría sacarte una sonrisa.

Por ahora, disfruta del pueblo. Es bastante acogedor para cualquier refugiado. Podrás encontrar buenos restaurantes locales como el de doña Sara, esta doblando la esquina Stanley, o si lo tuyo es más del tipo alcohol, hay un buen bar manejado por un amigo pasando dos cuadras de aquí.

Aunque... no estás aquí para pasar las vacaciones, ¿verdad? Tranquilo, sé que es lo que personas como tú buscan al acudir a este sitio.
Dreamville es un lugar majestuoso... pero vaya que tiene sus anomalías. Hay rumores de que un chico desapareció cerca del lago prisma hace unos meses, posterior a eso vino todo un equipo militarizado a la zona, aunque nunca se nos informo que estuvieron haciendo por allí.

Quizás el viejo Russell sepa algo, seguro lo viste al entrar al pueblo, prácticamente el maneja varios de los negocios del lugar. Él quedó al mando tiempo después de que la fundadora del pueblo, la señora Mc Afee, muriera hace unos 10 años. Pero al caño, dejemos eso para luego.

Aquí por las noches hay que poner atención a los susurros que soplan en el aire cuando tratas de dormir por la madrugada... colega, aquí las estrellas narran historias. No miento, no sé que ocurre, pero este lugar atrae a oyentes como tú o, quizás, los relatos tal cual leyendas les atraen a ustedes.

A todos los ciudadanos de este lugar amamos el pueblo, pero algunos despiertan en las noches y ven la oscuridad que perfora el sonido y el tiempo atraves de la ventana. Las pesadillas más fuertes se narran incluso entre las personas que las viven.
Quizás haya algo fuera cada noche, o cada día. Para ser sinceros, en la oscuridad del cosmos... en el abismo de nuestro desconocimiento, todo es posible.

Sé que te darás cuenta de eso colega.
Disfruta de tu estadía por aquí, nos encontraremos luego. Y créeme, ahora tengo tu rostro bien marcado en mi memoria.
Personas como tú, personas tan significativas, son fáciles de reconocer incluso entre un centenar de miles de personas.

Hasta pronto, amigo mío.
Oh, casi lo olvido. Solo recuerda una última cosa: Deja saciar el hambre de tu curiosidad, aquí mata más rápido la duda que el descubrimiento.

Aunque, eso ya lo sabes, ¿Me equivoco?