Osvaldo

13 2 0
                                    

Corrí confundido de regreso con Carolina, me sentía de maravilla, me sentía revitalizado, fuerte, con mucho entusiasmo, mi velocidad era aún mayor, mi fuerza se notaba al correr, sabía que en mi forma animal me veía mucho más imponente y grande.

Cuando llegue a lado de Carolina, note que retrocedió y me miraba con cara de asombro pero temerosa a la vez

—¡¿Sombra?! —su voz sonaba temerosa

Yo asentí con una reverencia y note que su cuerpo se relajaba, la tención en su rostro se desvaneció, Sebastián corrió a abrazarme nuevamente y a jugar conmigo, yo lo lambi con mi lengua y a él le gustaba, grito de alegría y corrió con Carolina.

—¿Osvaldo ya lo conoce? Le voy a decir que venga a verlo, es un animal hermoso.

Carolina se quedó pasmada y me miró con cara de confusión al ver qué no me encontraría dentro de la casa, sin pensar me transforme en humado pero Carolina de inmediato se sonrojo y tapo su rostro con la cara roja como un tomate, un hermoso tomate diría yo.

—¿Otra vez? Ponte algo, ¿dónde dejaste la ropa que traías?... Demonios, la rompiste, corre detrás de la casa, te llevo algo, Sebastián no sospecharánada—

Corrí haciendo lo que me decía, esto sería algo complicado, más cuando un niño se aferra a algo. Carolina llegó tapándose la cara según ella pero mirándome de reojo en algunos momentos y eso la sonrojaba aún más.

—Que tanto miras? —le pregunté con una media sonrrisa pícara.

—¡Claro que no!, Cómo se te ocurre que estoy mirando, por algo tengo mis manos en el rostro —coloco su mano cubriendo totalmente su vista pero sonrojandose aún más y manoteando mientras hablaba.

—Bueno, solo preguntaba, es que casualmente cada que mueves tu mano te sonrojas —rei jugetenado un poco con ella —que si así fuera, créeme que no me molestaría, al contrario, me sentiría apagado que una mujer tan hermosa como tú me morbosee un poco —se marcho a paso rápido a buscar a Sebastián y gritandole desde afuera par que supiera donde estaba par apoderó enseñarme a aquel enorme y hermoso animal que casualmente ya no estaria.

Sebastian buscaba de un lado a otro con la mirada, confundido por no encontrar aquel enorme lobo que hace un momento estaba por ese lugar, se rascabala cabeza y caminaba de un lado a otro buscándolo sin tener éxito.

—¿pero donde se metió Carito?, Hace un momentoestaba aqui, yo quería mostrárselo a tu novio —Caro se quedó pasmada y completamente sonrojada mirándome fijamente.

—No es mi novio Sebastián, ya te había dicho cariño, solo es un amigo que va a rentarme en lo que llega mi hermano —

Sebastian la miraba con picardía, intentando que su sonrisa la traicionara y poder molestarla, pero ella lo conocía y no le daría el gusto, sabía que no se lo quitaría por un tiempo con eso, por lo que optó por darse la vuelta y caminar frente a los corrales.

—Quizas sobra fue a buscar a los demás animales que faltan, por eso ya no está, sería una lastima que se extraviaran, no tendría como pasarla sin mi hermano —su tono de voz fue más que claro, quería que fuera por los demás animales antes que les pasará algo, cosa que no me causaba molestia, con lo que había pasado, a pesar de ser confuso me causaba emoción por mi nueva fuerza.

Así que espere que sebas se distrajera un momento y salí corriendo, está vez procurando pararme y quitarla ropa para no romperla, aunque no me molestaba que Carolina me viera como dios me trajo al mundo, me gusta verla sonrojarse.

Mi olfato y sentidos en general se había agudizado así que fue aún más rápido reunir todos los animales faltantes, así casi por anochecer llegué con el último ternero que se había alejado más de la granja para llegar y ponerme el shorts y entrar, pude notar en un espejo que incluso la musculatura en mi cuerpo humano había cambiado, mi altura había aumentado unos centímetros y eso a mí parecer lo agradecía.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 23, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Mi lobo GuardianDonde viven las historias. Descúbrelo ahora