100 razones para enamorarme - MewGulf

Sweater

Después del receso, todos fueron al campo para la clase de Educación Física, como siempre, primero entraron durante media hora el cuerpo, después el profesor les hizo dar 20 vueltas a la cancha.

Mew no suele sudar así nomas, pero esta vez se quitó la polera que tenía y la puso en una banca que estaba cerca a la cancha, junto con su mochila y la de sus amigos; una hora después de clases intensas, el profesor habló para todos.

-Bien chicos las clase termino! Como siempre, tienen 20 minutos de descanso, de ahí ya pueden irse!- el profesor se sentó en las bancas

Mild agarro la pelota y el salón se dividió en dos equipos y comenzaron a jugar; todos se divertían, en especial Mew, algunos chicos se tiraban al piso, otros se reían en Miraflores del juego, todo era muy bonito.

Por algunos momentos, Mew quería mirar las gradas a ver quienes estaban ahí, sabía que no podía adivinar quien de todas las personas que estaban ahí era quien le mandaba esas hermosas tarjetas, volteó en dirección a su mochila para ver si aun seguía ahí y sonrió al ver que había algo pequeño encima de su polera.
Continuó jugando con sus amigos, no sabía si aquella persona seguiría ahí observándolo o ya se habría ido pero dio lo mejor de sí en el juego, además de divertirse... ganaron 4-2.

El partido terminó y fue corriendo para agarrar sus cosas y leer aquella tarjeta tan esperada.

"Me encantan tus poleras, huelen rico, perdón pero no pude contenerme, es un pequeño recuerdo oler algo tuyo, quizá nunca hablemos, me encanto verte jugar"
-G

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After recess, everyone went to the field for Physical Education class, as always, first they entered the body for half an hour, then the teacher made them walk around the field 20 laps.

Mew doesn't usually sweat like that, but this time he took off his sweater and put it on a bench near the court, along with his backpack and that of his friends; an hour after intense classes, the teacher spoke for everyone.

-Well guys, class is over! As always, they have 20 minutes of rest, from there they can go!- the teacher sat on the benches

Mild grabbed the ball and the room divided into two teams and began to play; everyone had fun, especially Mew, some boys threw themselves on the floor, others laughed in Miraflores about the game, everything was very beautiful.

For a few moments, Mew wanted to look at the stands to see who was there, he knew that he could not guess who of all the people who were there was the one who sent him those beautiful cards, he turned to his backpack to see if it was still there and smiled when he saw that there was something small on top of his sweatshirt.
He continued playing with his friends, he did not know if that person would still be there watching him or would have already left but he gave his best in the game, in addition to having fun... they won 4-2.

The game ended and he ran to grab his things and read that long-awaited card.

"I love your sweaters, they smell delicious, sorry but I couldn't contain myself, it's a small memory to smell something of yours, maybe we'll never talk, I love watching you play"
-G

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Me imaginé a Mew jugando football y mi mente voló pero no quise ser muy explícita por qué esta historia tiene que ser un poco más tierna de lo que suelo escribir.
Espero les esté gustando mucho!

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I imagined Mew playing football and my mind flew but I didn't want to be too explicit why this story has to be a little cuter than I usually write.
I hope you like it a lot!

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