Saturday

356 58 5
                                    

Mew se encontraba limpiando su casa, recogió y lavó las ollas y todos los utensilios que su mma usó al cocinar, recogió la ropa de sus hermanas que estaban tiradas en el sofá, luego limpió el baño ya que la ropa no estaba dentro del la cesta de ropa sucia, y como pudo comenzó a barrer la sala y la cocina; terminó de limpiar a tiempo y pidió por Delivery algunos bocadillos para que pudieran comer mientras hacían o intentaban hacer el proyecto juntos.

Minutos después el timbre sonó, Mew abrió la puerta y saludó a Franco con un apretón de manos, luego miró a Gulf e intentó saludarlo hablando en señas que estuvo practicando toda la noche anterior y la mañana, esperaba hacerlo bien.
Cuando Mew saludo al pelinegro, el lo corrigió un par de veces, el castaño notó que estaba algo nervioso, Gulf era un poco delicado, su piel era un poco blanca, su cabello era color negro, era un poco hondeado y se veía suave, su nariz y sus mejillas estaban un poco rojas debido al frío que comenzaba a hacer.
Cuando Gulf lo corrigió, el castaño recién se percató que el pelinegro tenía sus uñas pintadas de un color celeste pastel, a decir verdad le quedaba muy bonito con su tono de piel.

Ese día fue un poco tedioso para todos encontrar algo que los caracterice o identifique, no tenían idea de qué cosas podían dibujar para su trabajo; después de 3 horas de estar pensando y sin alguna solución, Franco y Gulf se fueron a sus casas.

Una semana había pasado y se habían reunido dos veces más en la casa de Mew, aún sin mucho éxito con el proyecto, volvió a llegar el sábado y los chicos volvieron a reunirse en casa de Mew.

Mew aprovechó en volver a limpiar su casa, no entendían como sus hermanas podían ser tan desordenadas y dejar sus ropas por toda la sala, limpio como pudo y ordenó la cocina; siendo las 3pm el timbre sonó; abrió la puerta y ambos chicos pasaron hacia la sala a continuar con el trabajo.
Al parecer la profesora consiguió juntar a las tres personas más diferentes de la clase para hacer el proyecto.

Gulf se moría de nervios al estar tan cerca de Mew, pero a su vez estaba feliz porque podía admirar sus ojos de cerca, podría quedarse durante horas mirando al castaño y nunca se aburriría, en su interior sentía como cada minuto que pasaba, su corazón latía más fuerte por Mew, realmente le gustaba.
Por otro lado, Mew había agarrado su cuaderno junto con un lápiz y se había puesto a dibujar, pero el pelinegro ni siquiera se dio cuenta de eso, incluso Mew se había dado cuenta que Gulf se le quedaba mirando pero no le decía nada; le parecía muy tierna la manera en la que sus labios estaban un poco entre abiertos y sus cejas un poco fruncidas, como si estuviera discutiendo consigo mismo dentro de su mente.
Gulf reaccionó y se dio cuenta que el castaño lo estaba mirando de manera concentrada, como analizando cada parte de su cara, de pronto Mew comenzó a sonreír al notar que Gulf se estaba sonrojando y se tapaba la cara con la manga de su polera.

Los chicos no se concentraron mucho en el proyecto, estaban en un silencio pero no incomodo, cada uno de ellos estaba en su propio mundo; Mew estaba concentrado en su cuaderno haciendo cualquier cosa, Franco escribía cosas en un cuaderno y Gulf exploraba con la mirada a su al rededor, veía algunas fotos que se encontraban colgadas en la sala y otras puestas en los estantes, fotos de bebés y cómo iban creciendo, había una foto donde Mew salía con puras niñas, supuso que serían sus hermanas, tenían un gran parecido.
Todas las fotos que se encontraban en la sala y en los pasillos eran muy hermosas, todos sonreían, le hizo recordar a esas familias de los anuncios de la televisión... solo que está si era una familia de verdad.

Gulf continuaba viendo al rededor y su vista se detuvo en un pequeño estante que había a unos metros de la televisión, habían varias revistas, dibujos, cuentos infantiles pero un libro le llamó la atención, "Lenguaje de señas para principiantes".
Discretamente Gulf roso la pierna de Franco para que este le prestara atención, de reojo miró a Mew y el seguía concentrado en su cuaderno; Gulf señaló discretamente el estante donde estaban los libros, al principio Franco no entendía que cosa señalaba pero se quedó mirando por unos segundos y se dio cuenta del libro.
Franco se tapó la cara con sus manos para no soltar algún tipo de emoción, lo habría comprado por Gulf o será que algún familiar suyo tenía problemas auditivos? Gulf en parte estaba feliz pero sabía que no podía hacerse muchas ilusiones, no sabía la verdadera razón de porque Mew tenía ese libro.

100 razones para enamorarme - MewGulfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora