«Little Things» |FELIX|

Chapter Fourteen

Lo admiré por unos segundos, un poco atontado por los perfecto que era su rostro, pero me descongelé cuando el chico a mi lado exclamó.

-¿¡Hija!?

Casi me morí de la vergüenza por cinco minutos. Nos habíamos metido a la casa de el mejor actor del país, quién ahora resultaba ser papá de mi nueva amiga.

-Señor Kim, Señor- dije haciendo varias reverencias hacia donde estaba él.

-Para el show, Félix- dijo Umji levantándose del sofá-. Mi padre es una persona igual que tú, no tienes que hacerle tantas reverencias.

Ya sabía que era una persona. Pero era una de las personas más famosas del país y una de las más talentosas también.

-Ya es sumamente tarde, te dije que estuvieras en casa para la cena...- el hombre me miró la cara y se quedó pasmado- Dios mío, ¿Que te pasó en el rostro?

-Larga historia que te contaré cuando mis amigos se vayan, papá- dijo Umji, hablando de una manera más educada de como generalmente habla-. Chicos, puedo decirle al chofer que los lleve a su casa si quieren.

Nosotros accedimos porque ya era sumamente tarde, aunque en realidad no queríamos irnos. Nos hubiera gustado conocer un poco más al padre de Umji.

-Te explicaré lo de mi padre luego- susurró Umji tomándome del brazo mientras salíamos de la casa.

Jeongin y yo nos subimos al asiento trasero de un automóvil negro. No sabíamos ni siquiera quien manejaba, pero supusimos que Umji le había dado nuestra dirección, porque solo comenzó manejar sin preguntar nada.

-Esta fue una noche bastante intensa- dijo Jeongin con una sonrisa-. Deberías llegar a tu casa a lavar esas heridas, se ven bastante mal.

Estaba muy oscuro como para poder ver mi propio rostro, pero cuando pasamos por un poste de luz, vi el rostro de Jeongin. Tenía un rostro tan anguloso que podrías cortarte con su mandíbula. Sus ojos eran rasgados pero grandes, y sus labios parecían suaves. Tenía el cabello un poco alborotado, probablemente por haber hecho ejercicio en la noche y por correr junto conmigo y Umji.

Me sorprendí a mi mismo contemplando al chico.

-¿Porqué me miras así?- dijo dándose cuenta de mi mirada

Me sonrojé ligeramente.

-Por nada, es solo que te pareces a una persona que conocí hace unos años.

-¿En serio? ¿Quién?

-Te explicaré después- dije con una media sonrisa. La verdad, si hablaba de él con Jeongin, o con quién fuera, lloraría. Y sería incómodo para Jeongin tener que "consolarme".

-Bueno...- dijo acomodando un poco su desastroso cabello- ¿Porqué no te quedas en mi casa y me cuentas un poco sobre este chico que se parece a mí?

Con la propuesta, recordé que eran las 12 de la noche y no le había avisado a mi mamá donde estaba. Probablemente estaría frenética y no me dejaría quedarme en casa de Jeongin.

Saqué mi teléfono y miré la pantalla de bloqueo. 20 llamadas perdidas da Mamá 🌊

-Mierda- dije desbloqueando el celular y marcando su número. Después de unos cuantos bip sonó la voz histérica de mi madre.

-Felix, ¿Dónde rayos estás?- dijo con voz algo temblorosa- Te he estado llamando las últimas dos horas y no contestabas, no sabía que hacer.

Enterré mi cara una la palma de la mano, me sentía muy mal por haber preocupado a mamá.

-Mamá, lo siento muchísimo. Es que algo me pasó y tenía el celular en silencio, olvidé por completo llamarte. Por favor, por favor perdóname.

Mi madre suspiró, y supuse que había entrado en razón y había salido de su estado de pánico.

-Aaaagh, está bien Félix- dijo con menos enojo, pero aún molesta-. Pero te quiero en la casa en este instante, por favor.

Miré a Jeongin y luego puse mi atención en la llamada de nuevo.

-Mamá, de hecho pensaba quedarme en la casa de un amigo esta noche, estamos relativamente lejos de casa. En la mañana te explicaré todo, te lo prometo.

Jeongin sonrió. Vi como uno de sus hoyuelos se marcaba. Mi mamá suspiraba en el teléfono, como harta de tener que lidiar conmigo.

-Está bien, por lo menos ya sé que estás bien- hizo un sonido como de exasperación-. Mañana tendrás que venir con una excusa válida, Félix. Y por favor, si vas a quedarte con alguien en su cama, usa protección, no hagas locuras.

Me sonrojé, esta vez DEMASIADO.

-Sí, eeeeh.... Está bien, mamá. Solo me quedaré con un amigo.

-Está bien, solo por si acaso. Mañana te quiero aquí antes de medio día.

Y colgó.

Supe que estaba enojada conmigo, pero no me importó.

Pasaría la noche con Jeongin, eso era lo importante.