Después de unas horas, habíamos comida comida tradicional coreana, como teokbokki y dalgona. También fuimos al arcade, que estaba lleno de juegos increíbles, y la mayoría del tiempo jugamos en la máquina del baile (era una excelente bailarina), y fuimos a ver ropa que no compraríamos porque no teníamos ni un céntimo de dinero después del arcade.
Ahora estábamos sentados en una banca, ya sin nada que hacer ni nada de qué hablar, pero igual no se sentía incómodo el silencio.
-Hoy estuvo increíble.- dijo Umji sonriendo. Tenía sus rodillas abrazadas al pecho, y se mecía ligeramente en su asiento.
-Tambien lo creo- dije posando mis manos a los lados-. La única parte mala fue cuando me ganaste en casi todos los juegos.
Rió y tomó uno de los dulces que había intercambiado con los tickets del arcade.
-Siempre venía con mi hermano, tal vez por eso soy buena.
-¿Venías o vienes?
Se le nubló un poco el rostro.
-Se fue al ejército. Ya tiene 30 y decidió irse para cumplir su tiempo.
Asentí, en señal de comprensión.
-¿Son cercanos? Tú y tu hermano.
-Nos hemos distanciado, no lo he visto en casi un año y llamarlo es incómodo- dijo comiendo un skitle-. Pero creo que cuando vuelva retomaremos nuestra relación.
-Sí, sería genial que volviera a ser como antes- dije, comiendo uno de mis dulces.
A Umji se le había nublado la mirada, y por alguna razón no se le quitaba esa expresión.
-Lo siento si no te gusta hablar de eso, no debí preguntar- dije mirándola a los ojos.
-No, está bien- dijo comiendo su último dulce-. Solo lo extraño mucho.
Se levantó y desechó los envoltorios.
-Creo que debería irme, es extraordinariamente tarde, mi mamá debe estar preocupada.
Miré mi reloj, eran las 9:35.
-¿Te parece si te voy a dejar a tu casa? No quiero que vayas sola- dije también levantándome. Y no lo dije porque quisiera algo con ella, o por ser un "pick me". Lo dije porque ya estaba muy oscuro y para las chicas es más peligroso andar por la calle por muchas razones.
-No, está bien, yo puedo ir sola...
-No dejaré que te vayas sola por nada del mundo. Te seguiré a donde vayas.
Pareció un poco molesta, pero no me importaba. Prefería su seguridad que su agrado.
-Está bien- dijo al fin-. Pero si mi padre ve que salí con un chico podría ponerse raro y hacer muchas preguntas, así que nos separaremos una cuadra antes.
-Claro, no hay problema- dije sonriendo.
Empezamos a caminar, y comenzamos a hablar en algún punto de nuestra música favorita. Ella me dijo que le gustaba cualquier tipo de música, con que fuera buena no importaba el género. Y yo le dije que me pasaba igual, pero sí me inclinaba más a música del estilo R&B.
Cuando llegamos a una casa con enredaderas y flores rojas, Umji me paró bruscamente.
-Vaya, estaba tan concentrada hablando contigo que no me di cuenta de que ya íbamos a llegar- dijo poniendo su mano en mi abdomen para pararme. Lo cual fue bastante agradable.
-Vaya, tú casa es bastante linda- dije mirando las enredaderas con flores-. Parece la casa de una familia con dinero.
Umji sonrió.
-No, no, pfff- pareció un poco incómoda-. No soy de mucho dinero, para nada.
Sonreí y fruncí el ceño.
-Bueno, debo irme- dije rascando mi cuello-. Mi madre debe estar esperándome, ya van a ser las 10.
Ella asintió y abrió el portón de la casa con bastante dificultad.
-Nos vemos mañana, ten buena noche- dijo entrando ligeramente en el patio de la casa-. Y... Gracias por distraerme un rato.
Sonreí, dije "de nada" y luego caminé hacia la esquina diagonal a la casa de Umji, vivíamos a unas dos manzanas de diferencia.
Iba a seguir caminando cuando crucé la calle, pero mi teléfono vibró, y tuve la curiosidad de saber quien me escribiría a esta hora.
Mamá
Ya es tarde... ¿Llegas pronto?Iba a contestarle cuando escuché que el portón de la casa de Umji abrirse de nuevo, pero esta vez más brusco. Era el mismo chillido que había oído cuando lo abrió la primera vez.
Tuve miedo de que alguien estuviera metiéndose a la casa, o qué algo extraño estuviera pasando, así que caminé de nuevo hacia la casa a revisar...
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«Little Things» |FELIX|
Hayran Kurgu°Felix sufre de síndrome de abstinencia, y necesita pedir la ayuda necesaria para lograr vivir una vida de adolescente común y olvidar aquel estruendoso accidente. ☀️Capítulos Cortos☀️