» Capítulo Tres

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"Se siente como si hubiera soñado
dentro de un sueño"

— Deja vu, Ateez.



— ¡Me asustaste!



Yeosang estaba por fin sentado en mi cama, yo acostado en la misma. Me disculpé con Seonghwa, dejándolo en su habitación y fui directo a la mía.

Por un momento sentí que nada era real, que todo lo que estaba viviendo era un simple sueño del cual por fin desperté. Todo se volvió extraño desde entonces. Aunque intente poder comprender qué significan mis sueños siempre vuelvo a quedarme dormido en un profundo silencio, sin respuestas y nada más.



— Es la primera vez que tienes un sueño despierto.


— No es la primera vez, pero si es la primera vez que sueño el de la niebla. Podía sentir que estaba ahí. Podía jurar que era real, Yeosang. Se sentía asfixiante y muy oscuro. — Respiré profundamente y luego lo solté, miré a Yeosang que estaba preocupado.— Eso me asustó demasiado. Por un momento podría jurar que nada de lo que he vivido es real.



La conversación pasa a segundo plano cuando escucho la puerta sonar. Al otro lado podía escuchar a Seonghwa preguntándome si estaba bien o si necesitaba algo, que no dudara en llamarlo. Yo le agradezco, pero no tengo las ganas ni la fuerza de levantarme de la cama así que sólo le dije que iré a dormir y ya mañana le explicaré todo lo que me faltó por hacer.

Pero a pesar de mis palabras, no pude dormir ni un sólo minuto y todos esos recuerdos de mi sueño seguían rondando mi cabeza. Se sentía como un deja vu. Era cómo si todo fuera mentira, pero mi mente me dice que ya viví algo así.

No pude dormir, me encuentro en el trabajo con ojeras debajo de mis ojos y un café en mano. Estoy sentado en mi oficina, esperando que llegue algún paciente pero es cuando me doy cuenta que Choi San ha intentado hablarme.



— Perdón, ¿decías?



El estudiante me sonríe, su distinguido hoyuelo a la vista. Lo veo acomodar unos papeles y me los entrega.



— Si puedes firmar esto. Es para comprobar que he venido a la práctica. También hay unos documentos de evaluación, para cuando culmine todo.


— Oh, si. Claro. Ya los firmo.


— Has estado todo el día muy raro, ¿te sientes bien?



Lo miro, está cruzado de brazos, su mirada fija en mi y realmente se ve preocupado. El pensamiento de que es muy guapo pasa por mi mente antes de controlarlo y me estresa un poco.

Nunca he ocultado lo que soy, ni lo que me gusta. Pero el amor, una relación, sea cuál sea; no está en mis planes. Ya no más. Tuve un amor antes, aunque terminó antes de que pudiera darme cuenta.



— Perderte en tus pensamientos es como una costumbre, Wooyoung. — Escucho a San reír y mi piel se eriza.



Pero mis ojos se enfocaron en aquella niña que estaba a su lado y que gracias a mi maldición, sabía que no estaba viva.

Los niños que se convertían en fantasmas eran más complicados. Muchos de ellos no sabían que habían fallecido, y tampoco qué era lo que querían para poder cruzar al más allá. Si es que realmente existe algo después de la muerte.

Muchas veces creí que al morir, sólo tu cuerpo permanece en la tierra mientras que tu alma se va al cielo o al infierno. Sin embargo, no lo he descubierto y poco a poco siento que quedamos vagando por mucho tiempo en la tierra luego de la muerte y es aquí dónde se decide a dónde irás o qué pasará con tu alma.

En el caso de los niños, muchos de ellos siguen puros. Puedo notar su aura diferente, su entorno brilla más a diferencia de otros, como Yeosang que aunque su esencia brilla, ya no posee esa intensidad como la de un niño.

Una vez leí, que había auras oscuras. Aquellos espíritus que sólo quieren hacer daños y están llenos de rencor por todo lo que les pasó mientras estaban vivos, pero nunca me he encontrado con uno y espero que continue de esa manera.



— Vuelvo enseguida.



San asiente pero me mira extrañado. Con un pequeño gesto, muevo mi mano para que la niña me siga afuera del hospital, donde nadie pueda verme hablar con ella. Me es complicado dado que muchas cosas le llaman la atención, pero lo logro y salimos al callejón.



— ¿Estás bien, pequeña? ¿Puedes recordar algo de lo qué te pasó? — Me arrodillo frente a ella, la miro a los ojos y le sonrió.



Ella lleva un traje morado, que ya está un poco sucio. Tiene un oso de peluche en sus brazos el cuál aprieta con más fuerza y el cabello castaño cayendo sobre sus hombros. Me es súper extraño cómo se aferra al peluche pero sonrío un poco al recordar que Yeosang le es complicado hasta agarrar un dulce.



— Estaba en el carro. Íbamos para casa de abuelita pero papá se enojó y grité.



Era poca información, pero pude entenderla. Su padre había ocasionado un accidente y es probable que estén hospitalizados aquí, por eso la niña apareció.



— ¿Quieres encontrar a tu papá? — ella negó— ¿tu mami? — Ella asiente.



Pero en cuestión de segundos, ella sonríe y sale corriendo hasta otra persona. Alguien que tiene su aura muy desgastado y sólo quiere decir que lleva mucho tiempo en la tierra de los vivos sin pertenecer a él. Era su mamá, quién lloraba tal vez de alegría o tristeza, pero se aferraba con fuera a su hija. Su mamá me mira, yo me levantó y asiento. Le brindo una sonrisa antes de verlas desaparecer al mismo tiempo.

Puede sonar lindo, madre e hija se han reencontrado después de tanto tiempo. Sin embargo, una tuvo que morir para que sucediera tal acto y alguien tuvo que ser abandonado para eso. Pensar en el padre, que posiblemente siga con vida, ahora completamente solo, me dan ganas de vomitar y odiar por completo mis ojos. Si tan sólo no los tuviera, no tendría que soportar ver las situaciones que considero injusta.

Pero no puedo tapar el sol con un dedo, ni el océano con la mano.



— Eso fue extraño, Wooyoung.



Brinco en mi lugar, volteándome al instante. Miro a Choi San, nuevamente de brazos cruzados pero con una sonrisa fascinante en el rostro. Se acerca paso a paso ante mi y sus manos colocadas en mis hombros.



— Tienes que contarme, con quién estabas hablando.



❤️‍🩹

* El aura de los fantasmas varía depende de su tiempo en la tierra. Los más brillantes pertenecen a aquellos que recién acaban de convertirse en uno, mientras que los que tienen menos intensidad (una inexistente) llevan mucho tiempo deambulando en un lugar que no les pertenece.

A excepción de los niños puros, ellos brillarán sin importar los años que lleven en la tierra de los vivos.

💟
Quiero disculparme por no actualizar dos martes corridos. Estuve en finales de mi universidad y casualmente mi cumpleaños cayó este lunes😅 así que se me hizo un poco difícil poder corregir y actualizar.

Intentaré reponer las dos semanas en esta y actualizar antes del domingo✨🥰

¡Muchas gracias por leer!

🐨 💜
- Miez

Cursed Eyes » SanWooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora