Capitulo 2

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Ezra empezaba a despertarse, y vio a su novia desnuda debajo de las sábanas. La vio dormir sobre su pecho. Se veía tan hermosa. En ese momento sintió que era el hombre más afortunado y feliz de la galaxia. - Buenos días, guapo. - Saludo Leia, sacando a Ezra de sus cavilaciones.

- Buenos días. - Respondió él.

- Buenos días. - Repitió y lo beso en los labios. - ¿Y que podemos hacer hoy? Tenemos dos semanas libre, hasta que tu equipo te venga a buscar.

- Sobre eso...

- ¿Que? ¿que ocurre? - Ella se sentó.

- Quiero quedarme contigo. No me iré con ellos. - Leia lo beso de nuevo. - Bueno, ¿que planes tienes para hoy?

- De eso te hablar. Me tome un tiempo de mis deberes, ya sea de la Rebelión o otras cosas, y se me ocurrió que deberíamos escaparnos por un tiempo.

- Es una gran idea. ¿A donde?

- Mis padres tienen una mansión en un planeta paradisíaco.

- Suena increíble.

- Le avisare a mi padre lo que haremos y en dos horas ya nos podremos ir, hasta entonces podemos empacar.

En el Fantasma, Sabine estaba en la cabina con Hera. La Twile'k le indicaba algo, pero Sabine lo la oía, estaba observando las estrellas. Había pasado un día, y desde entonces no podía dejar de pensar en Ezra. Ya empezaba a extrañarlo. Hera puso su mano en el hombro de la joven y la sacudió haciendo que ella salga de sus pensamientos. - Hey, Sabine, Sabine.

- Hu, si, Hera, ya conozco la misión. - Respondió confundida.

- ¿Misión? ¿que misión? Te indique que redirigieras una parte de la energía para que podamos reparar los escudos.

- Si, claro. - Ella hizo lo que la Twile'k le indico.

- ¿Te encuentras bien?

- ¿Bien? ¡Bien! ¡Todo bien! Por favor, ¿que no estaría bien? Siempre todo esta bien. ¿Por qué las cosas dejaría de estar bien ahora? ¿Verdad?

- Si... - Respondió Hera a voz baja. - Solo lo digo porque estas actuando raro.

- ¿Rara? ¿a mi? Por favor. - Hera la mira con reojo. - Okay, si. Extraño a Ezra. ¿Ya estas feliz?

- Si, lo estoy. Lo amas.

- ¿¿Que?? Claro que no, solo es que... - Sabine se rasca la cabeza. - ¡Ahgg! Dank Farrik. Si, Hera, lo amo. Solo es que me cuesta admitirlo. No es que no quería decirle, solo que... Maldición... Con tan solo decir esto, rompo con el test de Bechdel. Que escritor más flojo. ¡Escribe otra cosa que no sea Star Wars, maldito!

- Oye, ¿que te pasa?

- Nada. Se lo diré cuando vuelva.

- Esta bien. Y es obio que él te ama.

El Jedi y la Princesa. - (SWR - Fanfiction) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora