Heartbreaker [Terminada]

Capítulo 34

Alexa's point of view

"Nena, te estás durmiendo" Justin me clavó el dedo en la mejilla, pinchándome de forma juguetona.

Gimiendo, me restregué los ojos con la manga del abrigo. Mis ojos seguían sin adaptarse a la luz que había tan temprano.

Era lunes de nuevo. Para mí, levantarme a las seis y media de la mañana un lunes para ir al instituto era un pecado, literalmente. Necesitaba mis horas de sueño, y después de lo que Justin y yo estuvimos haciendo, apenas dormí un par de horas.

Aún así, había valido la pena totalmente. Lo de ayer fue...joder, fue increíble.

"Sólo tengo sueño" murmuré, volviendo a cerrar los ojos y recostándome en el asiento del coche.

"No me imagino por qué" sonrió él, mirándome con diversión por debajo de sus gafas de sol negras.

"¡Justin!" le dije riéndome con las mejillas más que sonrojadas.

"No te pongas tímida ahora, bebé. Ayer no parecías estar para nada avergonzada" levantó sus cejas un par de veces, reprimiendo una sonrisa tonta.

"No estoy avergonzada, pero no sé, es...raro recordar eso"

"¿Raro? A mí se me pone dura sólo de pensarlo, nena" dijo con mucha tranquilidad, y al instante mis ojos se abrieron como platos.

Él me miró con diversión a través del espejo retrovisor, mientras yo notaba que mis mejillas estaban literalmente ardiendo de vergüenza.

"Eres un guarro" dije, poniendo mis ojos en blanco mientras intentaba no reírme.

Él se giró para mirarme, recorriendo su labio inferior con su lengua. Reseguí el movimiento de su lengua, mirándolo completamente embobada.

Justin se dio cuenta de ello, y aquello sólo hizo que su sonrisa se intensificara más.

"Tú no te quedas atrás, nena" dijo, haciendo referencia a lo ocurrido la noche anterior, con una risa burlona.

Le pegué un pequeño golpe en el brazo, mientras él arrancaba el coche de nuevo tras habernos parado frente a un semáforo.

Al parecer, Justin iba a estar toda la mañana haciendo bromas respecto al tema.

----------

Me senté en una de las mesas libres de la cafetería, completamente agotada después de haber soportado dos intensas horas de matemáticas.

Le di un bocado al donut que acababa de comprar, con virutas de chocolate, y acompañado de un café con leche. Miré mi móvil, sin demasiado interés, haciendo tiempo hasta que Justin y Luca aparecieran por la puerta.

Me fijé en que apenas tenía batería en mi teléfono, así que decidí guardarlo y simplemente observé a la gente de mi alrededor.

Si algo podía decir de mí es que era una persona muy observadora, me encantaba quedarme embobada mirando a la gente, observando sus gestos e imaginando cómo serían sus vidas. Recorrí la cafetería con la mirada, mirando a los diferentes grupos de personas que se encontraban apretujados en las mesas, cuando me encontré con unos ojos que me miraban, no muy amablemente.

La reconocí enseguida. Sarah, mi ex mejor amiga se encontraba completamente desconectada de la conversación que el resto de sus amigas estaban teniendo, y me observaba fijamente, con una mirada de odio y asco que no pude evitar devolverle.

Lo que más me confundió de todo fue ver una pequeña sonrisa maliciosa en sus labios perfectamente perfilados y pintados de un color rojo mate.

Fruncí el ceño, sin entender por qué me miraba así, pero enseguida alguien me distrajo de aquel duelo de miradas que estábamos compartiendo mi ex amiga y yo.