Catorce

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Joongi se había despertado temprano para cortar leña para su familia ya que las noches se ponían cada vez más frías por las fuertes lluvias; en cuanto terminó fue a tomar agua ya que sentía una leve incomodidad en el pecho

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Joongi se había despertado temprano para cortar leña para su familia ya que las noches se ponían cada vez más frías por las fuertes lluvias; en cuanto terminó fue a tomar agua ya que sentía una leve incomodidad en el pecho.

Decidió ir temprano ese día al bosque porque ese tendría que viajar a otro pueblo para traer telas, sin embargo quería ver aunque sea por poco tiempo aquellos dulces ojos de cielo, sonríe simplemente con recordarlo.

Llevaba un poco de leña y unas bonitas telas para Baekhyun, pensaba que los colores que solía usar eran bastante sombríos y quería enaltecer su belleza con preciosas telas coloridas. 

En cuanto ingresó al bosque, comenzó a tararear ya que le emocionaba poder pasar un rato agradable en compañía de Baekhyun, sin embargo cuando llegó no había rastros del pequeño. Paseó un rato tratando de hallarlo hasta que su nariz captó un olor ferroso, era sangre.

Corrió hacia el lugar y cuando el aroma se hizo más fuerte, se detuvo ya que su mente estaba intentando procesar lo que veía; sus leños y telas resbalaron de sus brazos para luego despegar sus suelas del lodo yendo directamente hacia el cuerpo lleno de sangre y carne abierta.

Quiso vomitar al ver la escena sacada de un cuento de horror, no había espacio de piel que no estuviera partida y el pequeño cuerpo estaba mojado con hojas, ramas y gotas de lodo. Desató los nudos de la cuerda alrededor de las muñecas de Baekhyun quien cayó al suelo inconsciente.

—Pequeño ¿Quién te hizo esto? —se arrodilla para luego colocar su oreja sobre el pecho del omega, se relajo cuando escuchó el leve latido, —Baekkie, —un par de lágrimas cayeron sintiendo empatía por el dolor que debió haber atravesado.

Levantó al omega en sus brazos para luego entrar en la cabaña cerca de donde estaban, pensaba que ese debía ser el hogar de Baekhyun. Coloco al pequeño sobre su estómago en el colchón para luego humedecer un trapo y empezar a limpiar las heridas; cierra sus ojos con fuerza viendo la carne abierta, en ese momento deseaba poder saber algo de enfermería para poder coser las heridas.

Su espalda, sus brazos, sus glúteos y sus piernas, no entendía como es que alguien pudo hacerle algo así a un omega tan pequeño como Baekhyun, por momentos se detenía para coger aire ya que sentía que se iba a desmayar en cualquier momento.

Tapo sus glúteos con una tela por respeto, luego fue a la cocina viendo que habían algunas hierbas de las que su madre solía utilizar para hacer ungüentos así que él hizo el que ella solía hacer cuando alguno de sus hermanos se lastimaba al correr. En cuanto terminó, fue a la habitación para empezar a esparcir la crema por toda su piel.

—Siento tanto no haber estado aquí, lo siento, —limpia sus mejillas con el dorso de sus manos. 

Colocó unas hojas limpias por toda su piel y luego fue a la cocina para preparar algo de comida, cuando Baekhyun despertará tenía que comer algo. Quería encontrar a la persona que le hizo eso para hacerla pagar, no creía que alguien pudiera odiar tanto a ese ángel como para hacerle daño a ese nivel.

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